- Realizar una monitorización constante. Para la empresa 202 Digital Reputation, conocer en tiempo real las menciones y conversaciones sobre las empresas es esencial para entender mejor a los usuarios, detectar puntos de mejora e identificar crisis potenciales.
- Generar contenido de interés . Los expertos recomiendan publicar información relevante y auténtica, algo que ayudará a crear una identidad digital.
- Responder e interactuar. Concretamente, con los públicos de interés: responder rápidamente demuestra compromiso con los clientes y el servicio.
- Diseñar un plan de crisis. Asegura una respuesta rápida y coordinada. Es un paso básico para realizar una óptima gestión de las turbulencias.
- Ser transparentes y honestos. Es esencial para mantener la confianza y la credibilidad, tanto en la marca como en el discurso.
¿Cómo cuidar la imagen en Internet? Así trabajan los 'guardianes' de la reputación digital
La compañía catalana 202 Digital Reputation ofrece servicios como la escucha social o 'social listening' y cada vez tiene más demanda de empresas que buscan prevenir crisis reputacionales en el mundo digital
Saber qué se dice de una marca en Internet, clasificar cada mensaje según el sentimiento que desprende y trabajar para corregir los contenidos negativos o falsos que corren por la red. Éstos son tres de los servicios clave que ofrece la empresa catalana 202 Digital Reputation con el objetivo de cultivar la identidad digital óptima de sus clientes. Con más de 10 años de experiencia en gestión de crisis y solución de problemas reputacionales online, es la primera consultora integral especializada en la prevención y la gestión de la reputación digital. Forma parte de un sector que va al alza: cada vez hay más empresas interesadas en cuidar la imagen digital, de la misma forma que lo hacen en el mundo físico.
"La inversión de las compañías en elaborar estrategias para gestionar su presencia digital está creciendo considerablemente", corrobora Carlota Gatius, cofundadora de 202 Digital Reputation. El catalizador ha sido triple. "Tienen la necesidad de ser más transparentes, son conscientes de la rapidez con la que se difunde la información en las redes sociales y quieren estar preparados para gestionar las crisis en tiempo real", añade Ruben Gálvez, el otro cofundador de la compañía. Ambos se conocieron cursando un master sobre el entorno digital. "Ideamos el proyecto juntos, con la intención de enfocarlo a la prevención del riesgo reputacional", concreta Gatius.
Desde mediados de 2021, ayudan a todo tipo de compañías –y personas– a mejorar su identidad digital, diseñando estrategias preventivas y emprendiendo acciones reactivas. "Al principio nos enfocamos sólo en gestionarles los contenidos negativos y en ofrecerles el servicio desocial listeningo escucha digital –saber qué dicen de ellos en el mundo digital–, pero a medida que los clientes descubrían el potencial del sector ampliamos la cartera de servicios", explican entre los dos. Actualmente también ofrecen servicios de regulación digital, como el eliminación de datos personales de internet o del uso indebido de una marca en el entorno digital.
Además, pueden gestionar la eliminación de reseñas que incumplen las políticas de las plataformas de opiniones, analizar qué tipo de valoraciones se están publicando y trabajar para mejorar su identidad. El equipo multidisciplinar de 202 Digital Reputation también es experto en propiedad intelectual, en gestión de crisis en las redes sociales y en impartir formación sobre prevención de la reputación digital.
Objetivo: cultivar la reputación
El modus operandi de 202 Digital Reputation para trabajar con la reputación digital de sus clientes comienza entendiendo bien sus necesidades y los objetivos que quieren conseguir. "En función de eso, diseñamos una estrategia personalizada para cada uno", explica Gálvez. Uno de los servicios que tiene más salida es el de social listening. Es el proceso mediante el cual se monitorizan todas las menciones y conversaciones que hablan de la empresa o persona en internet: desde redes sociales, blogs y foros hasta los medios de comunicación. El objetivo es obtener información sobre una marca, la industria a la que pertenece y la imagen que proyecta. "Permite a las empresas entender mejor las opiniones y sentimientos de los consumidores, medir acciones de comunicación, detectar posibles crisis, identificar tendencias, conocer su relevancia mediática y gestionar la reputación en tiempo real", especifica Gatius.
El interés por tener una buena reputación digital es común en todos los sectores, pero toma fuerza en áreas como la tecnología, la salud, la hostelería y los servicios financieros. "Es un servicio aplicable a cualquier tipo de empresa e incluso a personas físicas que tienen cierta marca personal", explica Gálvez. El futuro del sector de la reputación online se vislumbra prometedor y en constante crecimiento. De momento, la reputación ya se ha convertido en el activo intangible de mayor valor para las empresas, y amenazas como la desinformación han entrado en el top 10 de peligros empresariales, según un estudio de Zurich.