El festival de música donde se pueden degustar platos de restaurantes que suman seis estrellas Michelin

El Valle de BasCon un concierto de la Sinfónica de Cobla y Corda de Catalunya (SCCC) –120 músicos sobre el escenario– y con la participación de Manu Guix, Beth, Mariona Escoda, Joan Garrido y La Pau –y con las entradas ya agotadas–, se inicia la cuarta edición del festival Vallviva, que se celebra desde este miércoles hasta el domingo 14 de julio en el Vall d'en Bas. Este festival solidario, que destina todos los beneficios a la investigación contra el cáncer en el Hospital Vall d'Hebron, este año crece un día y llega hasta el domingo, donde la programación se concentrará por la tarde y será totalmente familiar, con actividades infantiles y un concierto de El Pot Petit con la Black Music Big Band.

La programación del festival, como en las anteriores ediciones, es una combinación de géneros y jóvenes artistas emergentes con nombres consagrados de la escena estatal. Comenzará con una actuación de Miratjazz –que también actuarán el jueves y el viernes–, y el miércoles también actuarán Olga Zoet y Èric Vinaixa, además la SCCC. El jueves será el turno de Marc Andurell, Ginestà y Els Amics de les Arts, que también tienen todas las entradas vendidas.

El viernes el cartel lo formarán Pep Poblet, Àlex Pérez y el veterano grupo donostiarra La Oreja de Van Gogh –que también ha agotado las entradas–. El sábado actuarán Julia Blum, Alfred García y Álvaro de Luna. Todas las noches, cuando acaben las actuaciones, habrá sesión de disc-jockey, que alargará la velada hasta las dos de la madrugada.

Oferta gastronómica diversa

Como cada año, una de las características del Vallviva que le diferencia de otros festivales es la cocina de calidad que se ofrece. De miércoles a sábado, cuatro restaurantes con Estrella Michelin preparan la cena. El miércoles irá a cargo de Nandu Jubany, el jueves será el conocido restaurante olotense Les Cols, el viernes el restaurante garrochino Ca l'Enric, y el sábado el ampurdanés Miramar de Paco Pérez. La oferta gastronómica también tendrá un espacio dedicado a la cocina de autor, con dos restaurantes garrochinos del Grupo Quinze Ous y el Equilibrio, y finalmente una zona de gastronomía kilómetro cero con paradas que ofrecerán productos locales y de calidad completará la oferta culinaria del evento.

El promotor del festival, Eudald Morera, es un reconocido empresario, por lo que cada año son más las empresas que apoyan el festival en forma de patrocinio. El año pasado fueron doscientas, y éste son doscientas cincuenta. En la pasada edición, se generaron unos beneficios de más de 76.000 euros. Morera decidió fundar el festival, pese a la opinión contraria de su familia, cuando estaba gravemente afectado por una enfermedad que casi le impedía andar y tenía muy mal pronóstico. En ese momento vital, Morera pensó que la vida pasa demasiado deprisa y que hay que tener momentos para estar con los amigos, relacionarse socialmente, compartir lo que se tiene -el festival se hace en una finca del Vall d'en Bas, que es de su propiedad- y disfrutar de la vida. Afortunadamente, Morera se ha ido rehaciendo y él asegura que fundar el festival le ha dado vida. “En el Vallviva no sólo se encuentra música, también hay naturaleza, cultura y gastronomía y, sobre todo, un rescoldo especial que lo hace diferente. Todo esto enmarcado en un entorno y en una voluntad de compartir y celebrar la vida. Este año hemos agotado las entradas de tres conciertos antes de empezar el festival, algo que nunca había pasado antes”, valora Morera.

La jornada inaugural contará también con la presencia de investigadores del Vall d'Hebron, hospital donde destinan las ganancias del festival.