Liberadas nueve jóvenes a quienes obligaban a prostituirse: "Vivían esclavizadas"
La policía ha liberado a nueve mujeres y ha detenido a diez miembros de la red criminal, entre ellos los dos líderes
BarcelonaLas jóvenes tenían una habitación para cada una. Un espacio pequeño, oscuro y con poca ventilación. El mismo espacio donde dormían y comían también era donde las obligaban a prostituirse. Tenían un microondas y un montón de sus pertenencias apiladas en una pequeña estancia de la que no podían salir. La Policía Nacional y la Guardia Civil han logrado liberar a nueve víctimas de entre 23 y 31 años de los tentáculos de un grupo criminal que las explotaba sexualmente en Manresa y en Mollet del Vallès. En total hay diez detenidos. Todas las mujeres llegaron a Cataluña desde Sudamérica, principalmente desde Paraguay, con la esperanza de construir un futuro mejor.
La banda criminal captaba a las víctimas en situaciones de vulnerabilidad mediante el engaño. Les explicaban que vendrían a trabajar cuidando a personas mayores, con unas condiciones laborales dignas y una vida prometedora. El grupo criminal pagaba todos los gastos del transporte y demás trámites necesarios para entrar en el país. Cuando llegaban a los pisos, les tomaban la documentación y el móvil. Una vez incomunicadas, les decían que habían contraído una deuda económica con la organización criminal. Una deuda que sólo podría saldar a través de sus servicios sexuales. Las víctimas vivían "bajo condiciones de esclavitud", tal y como explica en declaraciones al ARA el oficial Miguel, agente de la Policía Nacional. Estaban obligadas a estar disponibles las 24 horas del día, no tenían días de descanso y estaban forzadas a mantener relaciones sexuales aunque estuvieran indispuestas.
Las relaciones sexuales forzadas eran sin protección, a menudo acompañadas de violencia física, y los clientes, si lo pedían, podían grabarlas. Además, las víctimas estaban controladas con cámaras de videovigilancia y obligadas a consumir cocaína para incentivar la compra de esa droga por parte de los clientes.
Diez detenidos
Este martes la Guardia Civil y la Policía Nacional ha desarticulado los dos pisos y han liberado a nueve víctimas, cuatro de las cuales están en protección de testigos. Las autoridades han detenido a diez personas implicadas en la red criminal por presuntos delitos de tráfico de seres humanos con fines de explotación sexual, prostitución, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, la salud pública, la integridad moral y por organización criminal.
La red criminal mantenía una jerarquía "sólida" en el reparto de roles relacionados con la captación, traslado y explotación de las mujeres. Según fuentes policiales, la red estaba liderada por un hombre y una mujer, que trabajaban conjuntamente con un miembro que se aprovechaba de su conocimiento como agente de viajes para introducir a las víctimas en el Estado. Fuentes policiales consultadas por este diario confirman que la mujer que dirigía la organización había sido previamente víctima del propio grupo criminal. Las autoridades explican que no se trata de un hecho aislado que cuando una víctima logra salir del grupo criminal vuelva poco tiempo después para trabajar para la organización. Estas mujeres, que a menudo son del mismo país de origen que las víctimas, las llaman "mamis" y se encargan de coordinar la llegada de las víctimas.
Escapar del prostíbulo
El oficial Miguel explica que la investigación arrancó en agosto del 2022, después de que una de las víctimas lograra huir de uno de los prostíbulos y acudiera a la policía. Las autoridades no tienen claro cuánto hace que este grupo criminal actúe en Catalunya. De momento, el operativo, llamado Joya-Aguyje, se ha centrado en Catalunya y no ha habido detenciones en los países sudamericanos donde captaban a las víctimas. Los agentes han realizado entradas en Gavà, Manresa y Mollet del Vallès, y han intervenido más de 13.000 euros en efectivo, 18 teléfonos móviles, 300 gramos de cocaína y numerosa documentación relacionada con la explotación de las víctimas.
Las víctimas liberadas están siendo atendidas por la Fundación Apic-Acam y las autoridades han clausurado los pisos prostíbulo. La investigación ha estado dirigida por el juzgado de instrucción número 3 de Manresa y llevada a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Vizcaya y la Unidad Central de Redes de Inmigración y Falsedades Documentales de la Policía Nacional de Barcelona.