Niño perdona a Dobrowolski por espiarle el correo
El productor formalizará la decisión el jueves y reducirá la petición de prisión en el juicio para intentarle asesinar
BarcelonaEl productor de televisión Josep Maria Mainat ha decidido perdonar a su exmujer Angela Dobrowolski por haberse colado en su correo y haber consultado mensajes de sus abogados sobre su patrimonio y el procedimiento de divorcio, que la dejaría sin herencia. Esta decisión, que formalizará el jueves con un escrito en la Audiencia de Barcelona, derribará el delito de revelación de secretos de los que también está acusada en el juicio por presuntamente intentar asesinarle inyectándole insulina para provocarle una hipoglucemia. De esta forma, cuando Dobrowolski encare su interrogatorio ante el tribunal, lo hará para defenderse de una petición de trece años de cárcel, tres menos que los dieciséis que afrontaba al inicio del juicio.
Este miércoles un informático ha explicado al tribunal que la acusada le contrató en agosto del 2020 –unos dos meses después del intento de asesinato– para que le ayudara a desbloquear el portátil del productor para descargar imágenes de las cámaras de seguridad de la casa donde vivían en Horta y documentos sobre la diabetes y el coma diabético. El trabajador se dio cuenta de que el ordenador no era de ella sino de Mainat, porque en la pantalla de inicio estaban las iniciales de él. Le dijo, como excusa, que no podía abrirlo y debía llevárselo al taller. Después intentó contactar, sin éxito, con el hijo del exmiembro de La Trinca para alertarle. Finalmente devolvió el ordenador a Dobrowolski sin desbloquear. Tampoco accedió a ayudarla a extraer documentos de dos discos duros, supuestamente con información que ella necesitaba para sus estudios de Medicina, porque vio que existían grabaciones de las cámaras de seguridad de la casa.
En la tercera jornada de juicio también han declarado médicos de la clínica Quirón, donde Mainat ingresó tras la hipoglucemia que sufrió el 23 de junio del 2020. Esa misma tarde Mainat había avisado a Dobrowolski de que al día siguiente iniciaría el procedimiento de divorcio que, como ella sabía porqué había accedido a su ordenador, le supondría quedarse sin herencia. Los médicos que han declarado en el juicio han coincidido en que "el único fármaco" capaz de reducir los niveles de glucosa de forma tan drástica en dos horas es la insulina. También confirmaron que "ninguna" de las medicaciones que Mainat tomaba le podría causar esta reacción.
Además, los mossos que revisaron el glucómetro de Mainat aseguraron que los datos del aparato "no se pueden modificar" y que funcionaba correctamente. Con este aparato, Dobrowolski midió varias veces durante la noche los índices de azúcar en sangre de Mainat, que marcaban una hipoglucemia grave que requería atención médica urgente. Sin embargo, no llamó a urgencias hasta que creyó que "sería imposible prácticamente salvarle la vida", según el fiscal, con la intención de encubrir su crimen.
"Ningún trastorno mental grave"
Por otra parte, tres psiquiatras aseguraron que la acusada no sufre "ningún trastorno mental grave". Sí que señalaron un trastorno límite de la personalidad leve, una depresión y un "inadecuado control de la ira". Los forenses también han recordado que en 2018 ingresó en un centro por tomar drogas. En este sentido, añadieron que el consumo de estas sustancias puede tener efectos sobre la impulsividad y la exageración, y que todo ello puede afectar "levemente" a su capacidad de controlar y comprender sus actos.
