"El pájaro está liberado": Elon Musk despide a los principales directivos de Twitter después de comprar la red social
El magnate tenía hasta este viernes para cerrar una operación a la que se había comprometido por un precio de 44.000 millones de dólares
BarcelonaYa es oficial. El multimillonario Elon Musk se ha autoproclamado este jueves propietario de la red social Twitter después de aceptar, finalmente, comprarla por 44.000 millones de dólares. En un comunicado, el fundador de Tesla asegura que compra la red social "por el futuro de la civilización" y, de hecho, lo primero que ha hecho justo después de formalizar la compra es despedir a los principales directivos de la compañía, según recoge la agencia Reuters.
La confirmación de compra se ha hecho 24 horas antes de que se acabara el plazo que impuso la jueza para abrir un proceso si no se formalizaba la compra. El magnate sudafricano ha publicado un mensaje este viernes en el que celebra la operación: "El pájaro está liberado", ha tuiteado Musk, en referencia al ave del logotipo de la compañía.
A través de Twitter mismo, Musk, que ya luce en la descripción de su perfil "Chief Twit" –tuitero jefe–, había publicado unas horas antes un comunicado "destinado a los anunciantes" en el que explica las razones que lo han llevado a comprar la red social. De entrada, asegura que "es importante para el futuro de la civilización tener una plaza digital comuna, donde se puedan debatir diversidad de creencias y pensamientos de manera sana, sin que acabe en violencia", asegura.
Musk, que intentó hasta el último momento deshacerse de la operación de compra –a la que se había comprometido por un precio desorbitado– con acusaciones en la red social de engañar a sus anunciantes, ahora ha tratado de suavizarlo. "Ha habido muchas especulaciones sobre los motivos por los que he comprado Twitter y lo que pienso sobre los anuncios en la plataforma. La mayoría eran erróneas –ha asegurado–. Lo hago con humildad, y reconociendo que el fracaso de este objetivo es una posibilidad muy real, a pesar de que hacemos los mejores esfuerzos".
"Fundamentalmente, Twitter aspira a convertirse en la plataforma de publicidad más respetada del mundo que fortalecerá tus marcas y hará crecer tu empresa. Construyamos juntos una cosa extraordinaria", concluye.
A pesar de esto, Musk había criticado los criterios de moderación de comentarios de la red social, diseñados en buena parte para reducir el impacto de campañas de desinformación, y había avisado de que los modificaría para hacerlos más laxos. Recientemente el multimillonario también recibió muchas críticas -por ejemplo, de Kiev- después de publicar una serie de tuits defendiendo los referéndums falsos que el gobierno ruso ha llevado a cabo en cuatro regiones ocupadas del sur de Ucrania y repitiendo algunos de los argumentos del Kremlin para justificar la invasión.
El final de la batalla
El último episodio del culebrón Musk-Twitter llegó este miércoles, cuando el magnate, en una de sus excentricidades, se presentó en la sede de Twitter con un lavabo en las manos. Según el millonario, este gesto fue un juego de palabras en inglés, y venía a decir que la operación de compra ya estaba prácticamente cerrada.
La batalla empezó en marzo, cuando Elon Musk se convirtió en el máximo accionista de la compañía, después de un goteo de compras de acciones. Un mes más tarde, en abril , el fundador de Tesla llegó a un acuerdo para comprar la totalidad de Twitter por una suma de 44.000 millones de dólares.
Pero solo dos semanas después se hizo atrás alegando que no estaba de acuerdo con la fórmula de Twitter para identificar las cuentas falsas de la red social, cosa que podía generar noticias falsas y manipulaciones. Ante la negativa de Musk a culminar la compra de la red social, Twitter lo denunció para reclamarle que respetara el acuerdo firmado. El juicio entre las dos partes tenía que empezar el 17 de octubre, pero finalmente no ha habido que celebrarlo. Con todo, parece que se pone el punto final al folletín tecnológico de Silicon Valley.