Periscopio global

Playas cerradas, toque de queda y controles antidroga: la lucha de Miami Beach contra el turismo de borrachera

Tras los tiroteos del año pasado, la ciudad de Florida rompe con los springbreakers que ahora llegan a Barcelona

Spring break en Miami Beach, Florida
3 min

WashingtonLa "idílica" relación entre Miami Beach, en Estados Unidos, y los universitarios ha terminado. Cada año cientos de estudiantes estadounidenses, y de otros países como Canadá, viajan a este punto de Florida para disfrutar de las vacaciones de primavera (conocidas como en Spring break). Aunque muchos jóvenes recuerdan este viaje como una gran experiencia, la realidad es que para los habitantes de Miami es un infierno: descontrol, consumo de alcohol en público e incluso tiroteos. La mala experiencia de los últimos años ha hecho que el ayuntamiento de la ciudad diga lo suficiente. "Eso ya no funciona. Y no somos nosotros, eres tú", dice una actriz del anuncio viral con el que se ha anunciado esta decisión.

"Espera toques de queda, controles de seguridad en los puntos de acceso a las playas, cierres anticipados de las entradas a las playas, controles de alcoholemia, atascos, cierres de carreteras y detenciones por posesión de drogas y violencia" . Las medidas que promete el ayuntamiento a su anuncio se aplicarán durante todo el mes de marzo para desincentivar la llegada de jóvenes que sólo buscan fiesta y beber durante su estancia en Miami. Algunas de las restricciones más duras son las tasas de 100 dólares para los no residentes que quieran aparcar su coche y las penalizaciones de 500 dólares si su vehículo debe ser remolcado del sitio. Para mantener bajo control las posibles fiestas y disturbios, Florida destinará a 140 policías estatales extras a patrullar todo el territorio durante el mes de marzo. Del total, 45 agentes se dedicarán exclusivamente a vigilar las calles de Miami Beach.

El año pasado la ciudad vivió dos tiroteos mortales durante elSpring break que dejaron a dos muertos y dos heridos. El primero tuvo lugar durante la celebración del día de San Patricio (patrón de Irlanda, un día que los estadounidenses celebran consumiendo grandes cantidades de alcohol), el 17 de marzo, y dos días después, el domingo de madrugada, hubo el segundo. Las estampidas humanas también se repitieron en varias ocasiones en la zona de South Beach, uno de los puntos más frecuentados por los estudiantes, ya que está lleno de bares y pubs. A consecuencia de la inseguridad y de "las grandes multitudes ingobernables" se declaró el estado de emergencia y se impuso un toque de queda.

Ni los tiroteos ni el toque de queda eran nada nuevo para la ciudad. En el 2022 hubo otros dos tiroteos durante las mismas fechas que dejaron cinco heridos. En esta ocasión también tuvo que aplicarse un toque de queda pasada la medianoche.

La decisión no ha sido fácil, ya que supone una pérdida económica importante para buena parte del sector de la restauración y los hoteleros. David Wallack, propietario de uno de los bares situados en South Beach, contaba en la CNN que tiene sentimientos contradictorios. Debido a los disturbios que se producían reiteradamente frente a su local (peleas, lanzamientos de sillas, estampidas humanas), estaba pensando en cerrar durante una temporada, pero ahora con la llegada del toque de queda perderá el 30% de lo que ingresaba cada año . "Si hay toque de queda, no hay discotecas. ¿Qué nos queda?", lamentaba. El mismo relato sostiene Janet Alvarado, que regenta un restaurante de cocina cubana. "¿Cómo pagaremos a nuestros trabajadores? Porque no tenemos suficientes clientes. Hay demasiados pocos", lamentaba en una entrevista en el Miami Herald.

"Intentamos mantener a la gente segura", argumentaba el pasado domingo en la CNN el alcalde de la ciudad, Steven Meiner, quien cree que estas son las mejores medidas que se habrían podido tomar para asustar al turismo de borrachera. Esto no quiere decir que Florida deje de ser un destino vacacional, pero sólo está interesada en aquellas personas respetuosas con la zona. Al igual que dicen los actores del anuncio, pasarlo bien significa "relajarse en la playa, en el spa o ir a un nuevo restaurante" y no "emborracharse en público e ignorar las leyes".

Spring break 'made in Barcelona'

Mientras Miami Beach intenta poner freno a los springbreakers, al otro lado del océano, Barcelona se está convirtiendo en un nuevo destino para los universitarios estadounidenses que tienen ganas de fiesta en las largas vacaciones de marzo. Opium, una de las discotecas de frente marítimo barcelonés, organizó el fin de semana su novena edición de el Springfest. En las redes sociales, como TikTok, se pueden encontrar decenas de vídeos de jóvenes estadounidenses enseñando sus vacaciones en la capital catalana y recomendando el destino como un lugar alternativo en las clásicas ciudades de Florida como Miami o Tampa.

@lucia_castellini wednesdays are my fav going out nights here… sad this is probs the last one !!!! :( #studyabroad #blingbling #barcelona #comeoutwithme #springbreak ♬ Calm Dooowwnnn Lalalaaa (Remix) - FAITAH NADA
stats