El nuevo Govern

Aragonès reitera que su "prioridad" es saber si Junts apoyará los presupuestos

Illa presiona al 'president' para que "aclare" si cuenta con el PSC para los presupuestos

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Aragonés durante la entrevista este jueves por la noche

BarcelonaEl president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha reiterado que su "prioridad" es saber si Junts apoyará los presupuestos de 2023. En una entrevista este jueves por la noche en TV3, el jefe del Govern ha explicado que en los últimos días ha contactado con Salvador Illa, Jordi Turull, representantes de la CUP y Jéssica Albiach para evaluar el escenario. Aragonès espera que, a pesar de abandonar el ejecutivo, Junts "no abandone a la ciudadanía", y que priorice el país a su "táctica de partido". El president ha opinado que "no es deseable" prorrogar las cuentas, y ha mantenido abierta la vía del PSC. Eso sí, ha emplazado a los socialistas a ser "proactivos y claros" y llegar a acuerdos en otros ámbitos como por ejemplo "el anti-represivo".

¿Pero el nuevo Govern cuenta o no cuenta con el PSC? La duda es razonable si tenemos en cuenta que el líder de ERC, Oriol Junqueras, se ha mostrado partidario de un veto meridiano a los socialistas mientras que el president de la Generalitat, Pere Aragonés, no los ha acabado de descartar del todo. Ante esta incógnita, el primer secretario del PSC, Salvador Illa, ha reclamado este jueves al president que "se aclare". Es decir, que diga si quiere o no quiere negociar los presupuestos de la Generalitat de 2023 con su partido. Aragonès ayer no resolvió la duda, pero retó al PSC a explorar acuerdos sobre otro ámbito: la lucha contra la represión.

Illa hace "responsable" al president de la reciente ruptura del Govern y ha recordado que, de los 74 diputados que apoyaron investir a un president de ERC, ya solo mantiene el apoyo de 33 porque la CUP y Junts se han dado de baja de ese pacto. Con este nuevo escenario, Illa se ha mostrado dispuesto a "hablar" con el nuevo ejecutivo porque vería "grave" que Catalunya no tuviera presupuestos, pero exige a cambio que la Generalitat tenga algún gesto hacia los socialistas, ha dicho en una entrevista en el programa Cafè d'idees de Ràdio 4. Un gesto que empezaría por decir claramente si quiere o no al PSC.

Si el Govern acaba optando por el PSC –cosa que ahora mismo no quiere considerar públicamente, pero tampoco descarta–, también se tendrán que engrasar las confianzas, ahora tocadas. La prueba es que Junqueras el pasado sábado acusó a los socialistas de haberse "llagado las manos aplaudiendo nuestro encarcelamiento", una afirmación que ha molestado a Illa, que ha replicado que nunca se ha alegrado "del sufrimiento de nadie" y que los socialistas catalanes "han hecho lo que han podido para arreglar las cosas".

Si Illa quiere respuestas, todavía no las tendrá. En una entrevista con TV3, el president Aragonès mantuvo que su “prioridad” es aprobar las cuentas con Junts, la CUP y los comuns. No descartó a los socialistas, pero considera que no es momento de hablar de este “escenario”. Eso sí, propuso al PSC que, si quiere calibrar las posibilidades de llegar a pactos, se sumen al consenso para impulsar una “ley de amnistía”, una norma que Illa siempre ha rechazado.

La CUP se ofrece

Al margen de la esgrima dialéctica con el PSC, este jueves al Govern le ha salido un potencial aliado inesperado para las cuentas. Si la CUP hace unos días parecía autoexcluida de la negociación, hoy la portavoz del secretariado nacional, Maria Sirvent, ha asegurado que estarían dispuestos a "hablar" con el nuevo ejecutivo si se les traslada "un programa político y unas propuestas en términos sociales y nacionales". A pesar de la oferta, no es que los cuperos se estén volviendo a plantear un apoyo estable en el Parlament, puesto que han manifestado que ven "un recorrido muy corto" al nuevo Govern. En todo caso, aunque el Govern sedujera a los nueve diputados de la CUP –la consellera de Presidencia, Laura Vilagrà, ha celebrado el ofrecimiento–, serían estériles sin el apoyo o bien del PSC o bien de Junts.

Quien no da ninguna tregua al ejecutivo monocolor de ERC es la ANC, que ya criticó los perfiles de los nuevos miembros del gabinete. Este jueves, sin embargo, la entidad que lidera Dolors Feliu ha puesto en su diana a los tribunales españoles con la presentación de una campaña de denuncia. La campaña, que empezará este sábado con una acampada en la Plaça de Catalunya que durará todo el fin de semana, tiene por nombre Nosotros acusamos a la justicia española y el objetivo es "visibilizar a las personas represaliadas". La entidad también presentará una petición para que haya una comisión de investigación en el Parlament "por la causa contra Catalunya y el independentismo".

Reuniones con comisarios

Más allá de las cuestiones de política interna, el president Aragonès siempre ha priorizado en su mandato intentar recuperar puentes con la UE. En este sentido, ayer anunció que la semana que viene se reunirá en Bruselas con dos comisarios europeos: con el de Justicia, Didier Reynders, para abordar el caso Pegasus, y con el de Mercado Interior, Thierry Breton, para hablar del chip europeo y del hidrógeno verde.

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