La CUP mantendrá su posición ante la guerra: no a Putin y no a la OTAN

Sin sorpresas. Oposición a la invasión de Ucrania por parte de Rusia, pero también a la "espiral belicista" que comporta el envío de armas para reforzar la resistencia ucraniana. La coordinadora abierta parlamentaria (COP en sus siglas en catalán), que reúne representantes de las diferentes organizaciones de la candidatura así como de las asambleas territoriales, ha debatido este sábado el posicionamiento de la CUP sobre la guerra y ha acordado alinearse con la dirección, que se opone a enviar armamento y culpa también a la OTAN del ataque ruso. El resultado de la votación ha estado claro. La posición planteada por Lluita Internacionalista (LI), que había forzado el debate interno molesta con el hecho de que los diputados de la CUP en el Parlament exhibieran carteles contra la guerra y evitaran aplaudir al cónsul ucraniano, Artem Vorobiov, solo ha recibido dos votos (el suyo y el de la CUP Exterior), con diez votos en contra y dos abstenciones, según ha podido saber el ARA.

El resultado era de esperar, porque Constituents per la Ruptura (CxR) y la asamblea de la CUP Exterior reclamaban simplemente una condena más enérgica de la ocupación y tanto Endavant como Poble Lliure, los dos grandes sectores de la formación, han mostrado su rechazo a la política de bloques que está dibujando la guerra y a la política neoliberal de Zelenski, con ilegalización de partidos incluida. El posicionamiento de la CUP en este conflicto, pues, se mantendrá como ahora por amplio consenso de la militancia. De hecho, el documento que presentaron los grupos parlamentarios en el Parlament y en el Congreso ni siquiera se ha llevado a votación por el rechazo mayoritario al documento de LI a pesar de que se han introducido algunas enmiendas.

El documento de los dos grupos muestra "el rechazo de la agresión de Putin contra Ucrania" y exige que se acabe la invasión y que "se retiren las tropas de ocupación". Sea como sea, consideran que "es una guerra entre imperios" y denuncian "los intereses de EE.UU. por "la militarización de Ucrania y de la región para alimentar al grupo de presión armamentístico y dar sentido a la OTAN". Ante este escenario, reclaman al Estado que deje de enviar armamento a Ucrania (pero no ayuda humanitaria) para poner fin al "espiral belicista" y que se "sitúe en un lugar de equidistancia entre los intereses geoestratégicos norteamericanos y rusos buscando un rol que ayude a rebajar la tensión militar, desvinculándose de la OTAN", organismo que quieren que se disuelva y del que España salga.

La Coordinadora también ha rehusado el otro punto que LI incluyó en el documento y que pasaba por hacer llegar kits de primeros auxilios en la Defensa Territorial de Kiev, que conforman organizaciones anarquistas, trotskistas y antifascistas, porque no ha conseguido la mayoría absoluta, a pesar de recibir el aval de siete representantes, el rechazo de cuatro y tres abstenciones. Asimismo, también se ha rehusado la propuesta de la CUP Exterior de sumarse a la Red Europea Solidaridad con Ucrania y Contra la Guerra.