Junts lo fía todo en Puigdemont para recuperar la presidencia
El presidenciable plantea las elecciones del 12-M como un dilema entre él y Salvador Illa
ArgelerosLa campaña electoral de Junts per Catalunya en estas elecciones no tiene secreto: se llama Carles Puigdemont. El expresidente es la imagen y el mensaje –incluso su fotografía estará en las papeletas–, ya que el partido está convencido de que su líder no solo compacta a su electorado más tradicional sino que puede ser un reclamo de movilización para el conjunto del independentismo. De ahí que en el primer mitin en Argelers (Catalunya del Nord), ya se ha entrevistado la estrategia que seguirán los junteros al menos en esta primera etapa de la campaña: plantear las elecciones como un dilema entre Puigdemont y Salvador Illa, el candidato del PSC que ahora lidera las encuestas.
"Sólo hay dos opciones: la rendición o levantar cabeza", ha afirmado Puigdemont en el pabellón de esta ciudad de la Cataluña del Norte ante medio millar de personas –donde estarán la mayoría de mítines–, además de asegurar que los socialistas no pretenden ningún avance nacional para Catalunya ni tampoco "plantar cara" en Madrid: "Quiere una nación de gorros que lo acepte todo". Y también ha cargado contra el período de reflexión que se ha tomado el presidente español, Pedro Sánchez: "Nosotros conocemos bien la justicia española y la policía patriótica. Venimos llorados de casa", ha sentenciado. "¿Dónde estaba Salvador Illa cuando atizaban a los catalanes para ir a votar?", se ha añadido el secretario general de Junts, Jordi Turull.
Y es que la campaña de Junts está pensada para presentar a Puigdemont como un presidenciable que puede "liderar" y hablar de "tú a tú" con el gobierno español, en sus palabras. Es a través de estas dos ideas que Junts no sólo carga contra el PSC sino también contra Esquerra –"Es necesario un presidente como es debido", ha dicho Turull–, ya que contraponen su oferta electoral al actual gobierno de la Generalitat. Ahora bien, Puigdemont lo hace sin mencionar al presidente, Pere Aragonès, ya que se ha conjurado a sólo llamar a la unidad independentista ante la estrategia de los republicanos que cargar directamente contra él. "Somos la opción para mirar cara a cara al gobierno español y hacerle pasar por el aro", se ha reivindicado el expresidente, que también ha sacado pecho de su política en Madrid: después de haber pactado con el PSOE, se ha atribuido la consecución de la amnistía y también el espacio de mediación en Suiza. "Esto no lo han hecho las convicciones del PSOE, que no son demasiado distintas a las convicciones del PP [...]. Lo hemos arrancado nosotros", ha asegurado, y ha remarcado, además, que no había pasado antes, cuando el gobierno español dependía de los republicanos.
¿Y cómo pretende Junts defenderse de las críticas de sus rivales? Ante los que acusan a Puigdemont de centrarse sólo en su figura, los junteros reivindican la necesidad de un "buen gobierno". "Esta campaña no va de mí, va de nosotros", dice Puigdemont en el spot electoral, y en el discurso de Argelès ha hablado de la necesidad de abordar cuestiones "incómodas" a la hora de gobernar. Citó la inmigración, la situación de la lengua catalana, la enseñanza, la sanidad, la financiación de la Generalitat –"Ya basta con pagar la fiesta", ha clamado, sobre Madrid– y el estado del economía. Puigdemont se ha referido a la "necesidad" de gobernar bien y "para todos": "Un gobierno que no mire hacia otro lado ante los desafíos". Y es que, más allá de la independencia, lo que quiere transmitir Puigdemont en esta campaña es que él tendrá una actitud a su juicio diferente de Aragonès o Isla. "Somos catalanes y tenemos que ir por el mundo como catalanes. Sin complejos", concluyó.
Apoyo de Jordi Pujol
Pese a que la campaña irá dirigida a captar al votante independentista –sea de derechas o de izquierdas–, Junts ha contado con un pronunciamiento relevante en el arranque de la campaña electoral. El expresidente Jordi Pujol, fundador de Convergència, se ha mojado públicamente por Carles Puigdemont pese a la diáspora del espacio postconvergente y que no siempre ha compartido las decisiones tomadas por el líder de Junts.
"No se deje llevar por el desánimo [...]. Tenemos que votar Junts, votar a Puigdemont", aseguró Pujol la noche del miércoles en una cena en Martorell. ¿Y por qué motivo? "Porque ha dado y da un apoyo muy fiel y muy generoso a la causa de Catalunya [...]. Y pagando un precio". Junts lo fía todo en Puigdemont para recuperar la presidencia.
