ERC pacta blindar el catalán en la ley del audiovisual y avala la tramitación de los presupuestos del Estado
La ejecutiva de los republicanos ha descartado la enmienda a la totalidad en una reunión de última hora esta mañana
MadridEsquerra no presenta enmienda a la totalidad a los presupuestos generales del Estado, después de conseguir blindar el catalán con cuotas en la nueva ley del audiovisual. Así lo ha comunicado el partido este mediodía, al límite de que cerrara el plazo para registrar el escrito que pidiera la devolución de las cuentas al gobierno español. Sobre la bocina, los republicanos han logrado un pacto con el PSOE para proteger las lenguas cooficiales en la norma que el ejecutivo quiere impulsar y que se había convertido en el principal obstáculo.
Las negociaciones se habían intensificado en las últimas horas a medida que se agotaba el plazo para presentar la enmienda a la totalidad. Hace días que varios portavoces de ERC advertían de que esta era una posibilidad, tal como ya hicieron en 2019, abocando a la política española a unas nuevas elecciones que se celebraron el 28 de abril. El año pasado el contexto era muy diferente: el PSOE aspiraba a poner de acuerdo a grupos que se vetaban entre ellos -Cs por un lado y ERC y EH Bildu por el otro-, pero Unidas Podemos consiguió decantar la balanza hacia las fuerzas de la investidura. Esto desencalló el trámite de la votación a la totalidad y la negociación sobre las enmiendas parciales no fue excesivamente dificultosa.
Este año, sin embargo, descartado el escenario de la geometría variable, los republicanos eran conscientes de que su voto afirmativo se daba por sentado y han aprovechado para subirle el precio. El blindaje del catalán en la nueva ley del audiovisual se había convertido en una de las principales condiciones que ha planteado ERC, pero no la única: el grado de ejecución de lo que se pactó para las cuentas de 2020 es más bien bajo y, como ejemplo, ni siquiera se ha reunido la comisión que de manera trimestral tenía que evaluar si los acuerdos se cumplían.
La enmienda a la totalidad no deja de ser un primer aviso, porque de aquí a la votación del jueves de la semana que viene hay tiempo hasta el último minuto para retirarla. Eso sí, no tiene la misma incidencia según quién la presenta. Hay otras formaciones como Junts que reclaman la devolución del proyecto de presupuestos al gobierno, pero el PSOE podría negociar más adelante un cambio en su sentido de voto cuando se dé el trámite definitivo. No pasa lo mismo con ERC: sus 13 diputados son más necesarios que los 4 de Junts para que el ejecutivo supere el debate a la totalidad, de forma que el acuerdo en este caso se vuelve más urgente. De todas maneras, las cuentas podrían avanzar sin los votos de los republicanos si las apoyan el PNV, EH Bildu, el PDECat, Más País, Compromís, Partido Regionalista de Cantabria, BNG, Teruel Existe, Nueva Canarias.
Exceso de confianza en el gobierno
Muchos de los partidos que han ido apoyando al gobierno español alertaban de que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, llegaba a la negociación presupuestaria con un exceso de confianza. Esta mañana el presidente de la ejecutiva del PNV, Andoni Ortúzar, aseguraba que todos los escenarios estaban abiertos a pocas horas de cerrarse el plazo. Pero han llegado a un acuerdo para que Euskadi pueda gestionar íntegramente el ingreso mínimo vital y no presentará enmienda a la totalidad. En rueda de prensa, el portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, ha advertido de que el pacto global por los presupuestos no está cerrado.
EH Bildu, en cambio, ha sido menos beligerante y hace días que apuntó que no se opondría en la primera votación. Ahora bien, su portavoz en el Congreso, Mertxe Aizpurua, ha afirmado en una entrevista en Euskadi Irratia que los abertzales no darán un "cheque en blanco" al ejecutivo y que negociarán enmiendas al articulado y algún acuerdo político. Los independentistas vascos son muy insistentes con la derogación de la reforma laboral y los últimos días se ha revelado el objetivo de fondo de conseguir beneficios para los presos de ETA. Más allá de las palabras de Arnaldo Otegi, sin embargo, Aizpurua ha afirmado que esta cuestión no forma parte de las conversaciones con el PSOE.