Tribunales

El fiscal general del Estado niega haber filtrado el correo del novio de Ayuso

Álvaro García Ortiz se limita a responder a su defensa en su declaración al Supremo y denuncia que se le ha vulnerado el derecho de defensa

El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, a su llegada al Tribunal Supremo para declarar como investigado
29/01/2025
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MadridEl juez que investiga al fiscal general del Estado en el Tribunal Supremo le citó a declarar este miércoles como investigado esgrimiendo que tuvo un "papel importante" en la filtración del correo de la pareja de Isabel Díaz Ayuso. Álvaro García Ortiz ha comparecido durante una hora y media –solo respondió a las preguntas de su defensa– y negó la versión del magistrado, Ángel Hurtado, en una declaración inédita –es la primera vez en democracia que un fiscal general declara como a investigado–. Según fuentes jurídicas, el máximo responsable del ministerio público ha rechazado "rotundamente" que pasara a la prensa ni al gobierno español ni al PSOE el correo en el que la pareja de Ayuso reconocía haber cometido fraude fiscal. También ha asegurado que no dio ningún tipo de orden dentro de la Fiscalía para que lo hiciera otro y ha negado haber tratado de perjudicar a Alberto González Amador, el novio de la presidenta madrileña, que es quien le denunció originando esta investigación por revelación de secretos.

García Ortiz se ha mostrado muy crítico con Hurtado por la investigación contra él y le ha acusado de estar "predeterminado" en la valoración de los hechos. El fiscal general justificó no responder a sus preguntas por el hecho de que se produjo una vulneración de su derecho de defensa. Según ha denunciado García Ortiz, existen diligencias que todavía no conoce, otras que el juez ha impedido y, sobre todo, que todo está basado en la entrada ilegal en su despacho. El fiscal general considera que el registro se debería considerar nulo. De hecho, García Ortiz pidió hace un par de meses en un recurso ante el instructor de la causa que se anulara y ha denunciado que se le esté interrogando cuando aún no ha obtenido respuesta. Con este mismo argumento, la fiscala del caso, Ángeles Sánchez Conde, número 2 de García Ortiz en el ministerio público, ha justificado no hacerle preguntas, aunque era la única parte, aparte de la defensa, a quien el fiscal general se había mostrado dispuesto a responder.

En el registro que García Ortiz quiere anular se le intervinieron dispositivos informáticos entre los que se encontraba el móvil. La Guardia Civil no encontró ningún mensaje de WhatsApp del período en el que se habría producido la filtración. Según las mismas fuentes, el fiscal general lo ha justificado debido a que cambió de dispositivo la semana antes del registro. García Ortiz ha enmarcado el cambio de terminal en la normalidad y ha explicado que desde que es fiscal general del Estado ha cambiado de móvil seis veces y borra periódicamente los mensajes por seguridad y obligación legal. Hurtado desconfía de este argumento y, en diligencias iniciadas antes de esta declaración, ha pedido ayuda a WhatsApp ya Google para tratar de recuperar las comunicaciones de García Ortiz.

Confrontación con la fiscal superior de Madrid

En la declaración, García Ortiz admitió haber realizado gestiones para conseguir el correo del 2 de febrero enviado por la defensa de González Amador al fiscal de delitos económicos, Julián Salto, para proponerle un pacto de conformidad. A diferencia de lo que sospecha el juez, el fiscal general ha desvinculado ese interés de la filtración. En este sentido, García Ortiz se ha topado con la declaración de la fiscal superior de Madrid, Almudena Lastra, como testigo. Lastra explicó que recriminó a la fiscal provincial de Madrid, Pilar Rodríguez –también investigada– que le pasara esa comunicación al fiscal general advirtiéndole de que García Ortiz la filtraría. También comentó que en una conversación con él le preguntó si lo había hecho y que el fiscal general le respondió que "ahora esto no importa".

Según fuentes jurídicas, García Ortiz ha insinuado que Lastra también pudo filtrar el correo porque lo tenía y le ha acusado de tener desafección hacia la cúpula fiscal. Aunque no ha negado esta conversación, el fiscal general ha esgrimido que "no cree que nadie pudiera dirigirse así a su persona". García Ortiz ha vuelto a insistir también en que Miguel Ángel Rodríguez, mano derecha de Ayuso, también tenía a su disposición alguno de los correos sobre el caso antes que él -admitió ante el juez que tenía la respuesta de Salto a González Amador enviada el pasado 12 de marzo y que la filtró en la prensa– y se ha negado a responder a la defensa de González Amador aduciendo que han obviado ese punto. Justamente una de las diligencias que Hurtado no ha aceptado es intervenir el móvil del jefe de gabinete de la presidenta madrileña.

Bolaños: "Persiguió el delito y explicó la verdad"

García Ortiz recibió este martes un balón de oxígeno cuando la sala contencioso-administrativa del Supremo avaló su nombramiento y ha contado, además, con el apoyo del gobierno español. Lo ha reiterado este miércoles por la mañana en una entrevista en TVE el ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, que le ha calificado de persona "íntegra [...] , honesta y comprometida". "Hizo su trabajo, persiguió el delito y explicó la verdad", ha defendido. Bolaños ha reclamado "volver en el origen de toda esta historia": a que González Amador admitiera haber "desfalcado" 350.000 euros y planteara un acuerdo para no ir a prisión. "Siento admiración por quien ha conseguido que miremos el dedo y no la luna", ironizó, presentando al fiscal general de víctima de la persecución de la "ultraderecha política" del PP de Madrid.

Por otra parte, los populares insisten en pedir la dimisión del fiscal general "Es la imagen de un destrozo sin precedentes a una institución fundamental de nuestra democracia. Que se vaya antes de hacer más daño", ha dicho a X la número 2, Cuca Gamarra.

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