Turull da detalles de la huida de Puigdemont: "Estuvimos en Barcelona hasta el anochecer"

BarcelonaHace ya casi un mes del fugaz regreso de Carles Puigdemont a Cataluña. Esta mañana del lunes, el secretario general de Junts per Catalunya, Jordi Turull, ha dado más detalles de todo lo ocurrido durante las 48 horas que el expresidente de la Generalitat pasó en la capital catalana. "Fuimos en Barcelona hasta la noche", ha explicado a El mundo en Rac 1, donde precisó que la salida fue en torno a las 20 h (había aparecido en público a las 9 de la mañana). Además, Turull ha relatado que hasta las doce y media del mismo 8 de agosto, la idea todavía era intentar llegar al Parlament y que Puigdemont pudiera hacer el discurso del grupo parlamentario durante la investidura de Salvador Illa. "Políticamente, la acción sirve para no agacharse la cabeza, no prestarse al derecho penal del enemigo", ha subrayado.

De este modo, el secretario general del partido relató que, a primera hora de la mañana, lo único que estaba previsto era abandonar el Arco de Triunfo en coche "por motivos de seguridad". Según ha explicado, fue al terminar el mitin que, en una carpa trasera del escenario, decidieron dirigirse a un piso de Barcelona para acabar de preparar el discurso. La decisión se tomó después de que se pusiera en duda el horario de inicio del pleno debido a los problemas de salud del vicepresidente de la mesa David Pérez. Así pues, Turull ha asegurado que acudieron a un piso a seguir trabajando en el texto de Puigdemont. Allí se enteraron de la operación Jaula por parte de los Mossos.

Esta versión, sin embargo, choca con lo que ha relatado esta misma mañana el portavoz de Demòcrates, Antoni Castellà, en La mañana de Catalunya Ràdio. Castellà ha explicado que intentaron que Puigdemont entrara en el Parlament en coche por dos vías: en primera instancia lo habrían intentado por la conocida como la puerta del Mamut y, posteriormente, habrían tratado de acceder por la entrada principal. Estas dos opciones se habrían descartado a causa del dispositivo policial que blindaba el Parlament. El organizador del dispositivo de regreso de Puigdemont también ha precisado que tenían hasta tres vehículos preparados.

Según la versión de Turull, una vez llegados al piso, vieron el amplio dispositivo desplegado. Entonces tuvieron que replantearse la aparición del presidente en el pleno de investidura. "En ese momento puedes hacer dos cosas: o dejarte detener o plantar cara. Se decide marchar", ha explicado. Entonces se les abre la posibilidad de moverse y dirigirse a otra vivienda. Se desplazan sobre las 14 y se quedan hasta que no se marchan de Catalunya. Por la noche se inicia el regreso de Puigdemont hacia Waterloo. Al igual que cuando llegaron, se marchan con un coche con vinilos adhesivos en las ventanas de los asientos traseros. Turull no quiso precisar por qué carretera abandonaron el país.

En cuanto a la actuación policial, Turull ha defendido el papel de los Mossos d'Esquadra y ha disparado contra el exconseller Elena. "Los Mossos no hicieron el ridículo, quien lo hizo fue la dirección del cuerpo", ha señalado. Además, explicó que cuando abandonaron el Arco de Triunfo, en contra de lo dicho, él no detectó que nadie les persiguiera y, de hecho, explicó que se detuvieron, incluso, en los semáforos en amarillo. "No nos llegará ninguna multa", ha bromeado. También descartó que Puigdemont se pusiera ningún sombrero y explicó que quien si se puso una gorra fue él.

En relación a los Mossos, Turull también ha insistido en que "no había ningún pacto" para facilitar la detención de Puigdemont. Paralelamente, Castellà ha reconocido que, el día antes, mediante canales no oficiales, la dirección de los Mossos les hizo llegar que, "por respeto a los derechos políticos", no habría detención antes de entrar en el Parlament y que se permitiría la intervención pública del presidente. "Lógicamente, sin embargo, al terminar la investidura, ellos debían cumplir órdenes", ha explicado.

La llegada a Cataluña

El secretario general de Junts también ha dado detalles sobre cómo se produjo la llegada de Puigdemont a Catalunya. Según dijo, sobre las seis y media de la tarde del 6 de agosto, tomaron un coche en la Catalunya Nord que les bajó hasta Barcelona por la autopista AP-7. Durante el trayecto no habrían hecho ningún paro. "Cuando pasamos por Girona, el presidente nos estuvo contando anécdotas de su alcaldía", ha relatado Turull, quien ha añadido que, cuando pasaron por el desvío que se agarra para ir hacia Amer, su pueblo natal, " costaba arrancarle palabras". Al llegar a Barcelona, ​​el coche les dejó frente al piso donde pasarían cerrados las siguientes 36 horas y accedieron desde la misma calle.

Otro momento clave fue pocos días antes del regreso. Concretamente, durante el fin de semana previo. Turull ha explicado que durante aquellos días en los que estaban en Bruselas ambos hablaron mucho sobre la cárcel. Según ha dicho, Puigdemont había asumido el gran riesgo de ser detenido, pero se mantenía firme en la idea de llegar a Parlament y poder dar un discurso desde el atril.

El futuro de Juntos

Aparte del regreso de Puigdemont, Turull también ha hablado sobre el futuro de Junts per Catalunya. El secretario general del partido ha expresado su voluntad de continuar en el cargo de cara al congreso que celebrará la formación los días 25, 26 y 27 de octubre en Calella. Sobre el papel del expresidente en el partido, Turull ha dejado claro su deseo de que vuelva a tomar importancia dentro del organigrama, después de que dejara todos sus cargos para liderar el Consell por la República, del que sigue siendo el máximo dirigente .

Turull también se ha pronunciado sobre el rol que debe adoptar a partir de ahora Junts en el Congreso de los Diputados. El secretario general de la formación ha reiterado que el gobierno español "no tiene ningún apoyo garantizado" y que el pacto con la Moncloa se basa en ir tratando cada cuestión "pieza a pieza". Ya de primeras, sin embargo, ha advertido de que votarán en contra "cualquier medida" que consolide "el café para todos" en materia de financiación.