Plantón del Govern al Estado por el déficit de inversiones

El ejecutivo se ausenta de un acto sobre infraestructuras y la ministra Sánchez lo acusa de azuzar la confrontación

4 min
La ministra de Transporte, Raquel Sánchez, este viernes.

BarcelonaLejos de amainar, la tormenta entre la Generalitat y el Estado por la crisis de las inversiones sube de intensidad. De visita en Catalunya, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, había convocado este viernes un acto para anunciar varios proyectos de mejora de infraestructuras que ha acabado derivando en el enésimo conflicto con el Govern. A pesar de que la Generalitat había comunicado previamente su presencia, finalmente ha decidido plantar a la ministra para hacer de nuevo evidente su descontento con el déficit inversor del Estado en Catalunya. Cada día que pasa las relaciones entre los dos gobiernos se envenenan algo más, teniendo en cuenta, además, que esta no es la única carpeta conflictiva. Todavía está abierta la herida del espionaje por el Catalangate, sin olvidar que no ha habido ningún adelanto en la negociación del conflicto político.

El último choque arrancaba este jueves. El ministerio convocó para el día siguiente un acto en Esplugues de Llobregat para presentar "el acuerdo con la Generalitat y los ayuntamientos" sobre el futuro de la B-40. Entre los protagonistas destacaban dos: se anunciaba la presencia de la ministra Sánchez y también la del secretario general de Vicepresidencia, Políticas Digitales y Territorio, Ricard Font. Fuentes del gobierno español aseguran que tenían la confirmación del departamento de Territorio. La misma versión subscriben otras fuentes conocedoras de la organización del acto.

Este viernes por la mañana, sin embargo, llega la primera alerta del conflicto. En concreto desde la Seu d'Urgell, donde el president de la Generalitat, Pere Aragonès, tenía una conferencia a las 9 de la mañana en el marco del Encuentro Empresarial del Pirineu. Desde allí ha cargado contra el gobierno español asegurando que las propuestas del ministerio para la B-40 "no están sustentadas en ningún acuerdo concreto". Son "de nuevo", ha añadido, "palabras" sin ninguna garantía de su cumplimiento. El nuevo choque con el Estado se ha confirmado cuando faltaban pocos minutos para las once y media, cuando desde la conselleria de Territorio se ha enviado un comunicado anunciando que no estarían presentes en el acto "como muestra de rechazo por la falta de inversiones del Estado en Catalunya".

El origen de la crisis de las inversiones, que hoy en Esplugues ha tenido este nuevo capítulo, se remonta al final de mayo. Un informe del mismo Estado reconocía que en 2021 solo se había ejecutado un 35% del presupuesto del Estado en Catalunya. Por el contrario, en la Comunidad de Madrid, la ejecución había llegado al 184%. Lo que en definitiva venía a reflejar el documento es que en las relaciones Estado-Generalitat no solo no se avanzaba en el terreno del conflicto político, sino que tampoco lo hacía en el terreno de las inversiones.

Reproches cruzados

Desde que este informe se hizo público, la ministra Sánchez, exalcaldesa de Gavà, ha intensificado su presencia en Catalunya y ha prometido mejorar las inversiones. Aun así, este viernes ha expresado su enojo por la ausencia de la Generalitat en el acto sobre la B-40. "No es un plantón al ministerio, lo que se ha hecho es un plantón infantil a la ciudadanía y al territorio", ha dicho, y ha acusado al Govern de usar las infraestructuras para "izar banderas" y "atizar la confrontación". También el líder del PSC, Salvador Illa, ha considerado "injustificada" la ausencia: "Es la actitud que no conviene a Catalunya".

Fuentes de Presidencia de la Generalitat consultadas por el ARA se han mostrado muy críticas con el acto de la ministra al considerar que era poco más que una maniobra para hacerse la foto e intentar tapar los incumplimientos con las inversiones. El problema, según las mismas fuentes, no es la propuesta del ministerio con la B-40, sino que no hay ningún convenio firmado sobre cómo, cuándo y de qué manera se tendrían que ejecutar las obras. En definitiva, que ir hoy a Esplugues era blanquear el déficit inversor.

El siguiente capítulo

El siguiente capítulo del conflicto ya se puede divisar en el horizonte y tampoco augura buenos pronósticos. Hace unos días los dos gobiernos convinieron que abordarían la crisis de las inversiones en la Comisión Bilateral de Infraestructuras, el órgano formado por la Generalitat y el Estado que tiene que controlar el nivel de inversión estatal en Catalunya. Una comisión que no ha funcionado nunca del todo, puesto que solo se ha reunido tres veces en 15 años.

Sea como fuere, la Generalitat ha comunicado esta mañana que ha convocado el encuentro para el el próximo viernes a las 12 del mediodía y, según fuentes del gobierno español, lo ha hecho antes de comunicarlo oficialmente a la otra parte. Será en este foro donde la Generalitat trasladará su malestar y donde el Estado pretende explicarse. Aun así, el Govern ya ha adelantado que no enviará representantes de alto nivel político –a la última fue el vicepresidente Jordi Puigneró– sino que serán "de carácter técnico". Es la manera que tiene la parte catalana de protestar por la situación de las inversiones y de exigir que, antes de regalar nuevas fotos de entendimiento con el gobierno español, el ejecutivo de Pedro Sánchez dé señales que piensa aumentar el nivel inversor en Catalunya.

stats