El laberinto judicial de la supermanzana de Consell de Cent
El eje verde acumula sentencias contradictorias sobre su legalidad
BarcelonaLa pacificación de la calle Consell de Cent no fue precisamente pacífica. El proyecto más simbólico del gobierno de la alcaldesa Ada Colau en Barcelona suscitó enseguida una muchedumbre de partidarios, pero también de detractores. Entre ellos hubo grupos de la oposición y sectores económicos de la ciudad, que combatieron la llamada supermanzana, primero políticamente y después en los tribunales.
Esto ha dado pie a un puñado de recursos en los juzgados que en el último año han ido dando paso a hasta seis sentencias distintas, la última a mediados de diciembre. Un abanico de resoluciones judiciales que ha convertido a Consell de Cent en un auténtico laberinto jurídico. Si uno atraviesa el eje verde desde la calle Vilamarí al paseo de Sant Joan, la mayoría del tiempo paseará por tramos anulados por la justicia, pero a ratos lo hará también por tramos avalados y otros por zonas pendientes aún por definir .
La primera sentencia llegó en septiembre de 2023. La titular del juzgado contencioso administrativo número 5 de Barcelona anuló el acuerdo del gobierno municipal sobre el eje verde de Consell de Cent, en concreto el que hacía referencia al tramo entre las calles Casanova y Bruc y que incluye la plaza creada en el cruce con Enric Granados. Aquella resolución daba la razón a la entidad Barcelona Oberta (que agrupa a la Unión de Ejes Comerciales Turísticos).
La magistrada consideraba que la reforma suponía una "modificación encubierta del Plan General Metropolitano (PGM)" porque se había tramitado como un proyecto de obras ordinario, sin modificar el planeamiento general de la ciudad. Un argumento que después se harían suyo otros tribunales.
Es el caso del juzgado de lo contencioso administrativo número 15 de Barcelona, que el mes de abril va sentenciar también en contra de la pacificación del tramo de la calle Comte Borrell entre Gran Via y Aragó y que genera una plaza en su cruce con Consell de Cent. Una semana después el juzgado de lo contencioso administrativo número 10 de Barcelona hacía lo mismo con el tramo de la calle Roquefort.
El último en seguir este camino ha sido el juzgado contencioso administrativo número 4, que este mes de diciembre también se pronunciaba en dos sentencias contra el tramo entre las calles Casanova y Bruc y contra el tramo de Rocafort. En este caso, por sus recursos presentados por Foment y por la Asociación de Amigos del paseo de Gràcia.
La excepción de la calle Girona
En medio de tanta sentencia contraria, a principios de octubre llegó la primera resolución favorable al eje verde. El juzgado contencioso administrativo número 1 de Barcelona desestimó el recurso interpuesto por Foment contra el tramo del eje verde que une las calles Consell de Cent y Girona.
En este caso la jueza sostenía que no era necesario modificar el Plan General Metropolitano (MPGM) para sacar adelante la pacificación de estas calles. En la sentencia, la magistrada interpreta que "es innecesario" modificar el MPGM porque "la intervención propuesta no modifica el trazado, la anchura, la reserva de suelo, el régimen jurídico del suelo o la funcionalidad de la calle". La jueza argumentó que, como los coches pueden seguir circulando –con restricciones– por estas calles, no es necesario realizar estos cambios.
La disparidad de criterios de los juzgados de contencioso y los recursos cruzados que han interpuesto el Ayuntamiento o los demandantes en función de la resolución, empuja ahora a que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) tenga que posicionarse y fijar un criterio común. Será la próxima batalla de un debate que no termina.