Los 40 grados ya no son una excepción

BarcelonaEl episodio de ola de calor de los últimos días está volviendo a generar temperaturas que en el contexto de hace diez o quince años serían totalmente extraordinarias pero que el cambio climático está haciendo cada vez más habituales. Lo cierto es que ya no hay que ir muchos años atrás para observar un cambio. De los 20 mediodías más cálidos que ha habido en Catalunya desde el 2009, 13 se han producido en los últimos 4 años. No hay que buscar referencias del siglo XX para ver una tendencia marcada de la temperatura. El viernes la media de las temperaturas máximas en Catalunya llegó a 34,3 grados, un valor que en los últimos 14 años solo ha sido más alto en tres episodios más de temperaturas extremas. Todo esto son cálculos del ARA a partir de los datos abiertos del Meteocat, que nos permiten tener una visión del conjunto de Catalunya, pero cuyos datos para años previos al 2009, por el contrario, no son consultables. Algunas series individuales muestran, sin embargo, que por más que se vaya unas cuántas décadas más atrás, las situaciones de oleada de calor de este año y de años recientes no tienen muchos precedentes.

En Lleida los últimos tres días se han superado los 39 grados, y es bastante posible que hoy el termómetro vuelva a saltar por encima de este umbral. Con datos desde el 1960, cuatro días seguidos con temperaturas cerca de los 40 grados se han dado muy pocas veces, pero últimamente estas oleadas de calor extremas y persistentes se están haciendo habituales en Ponent. Cuatro días seguidos con 39 grados o más en Lleida solo se produjeron una vez entre 1960 y 2015: pasó a mediados de agosto del 1987. El 2015 se volvió a repetir la situación en la oleada de calor de principios de julio, y es realmente chocante que desde el año 2019 ya ha habido cuatro episodios de 4 días seguidos con 39 grados o más, y el de hoy podría ser el quinto. Es decir, lo que era una total excepción hasta 2015, se ha convertido en una tónica anual en los últimos cuatro años.

En los últimos días los 40 grados no solo se han producido en Ponent, sino que en l'Empordà, en Osona, en el Pallars Jussà, en el Baix Ebre y también en el Bages se han alcanzado. En la zona del incendio del Bages el calor más fuerte se produjo el viernes, día en que en Manresa se llegó a 39 grados y en Artés a 40,5 grados. En algunos puntos de la comarca también ha habido más de 39 grados cada día desde el viernes.

Quizás la continuidad de temperaturas muy por encima de lo que tocaría, que se arrastra desde principios de mayo, es todavía más influyente que las oleadas de calor. Cogiendo datos de 87 estaciones del Meteocat, este año en Catalunya ya ha habido 578 superaciones de 35 grados, teniendo en cuenta que cada superación es un día y una estación en la que se han superado los 35 grados. El dato por sí solo no dice nada, pero gana mucha relevancia si se sabe que es un valor más de cinco veces superior a la media del periodo 2009-2021, con datos hasta el 17 de julio. Es decir, este año, hasta ahora, ha habido cinco veces más temperaturas de 35 grados o más que la media de los últimos años.

El calor llega en un contexto de lluvias poco abundantes. En Manresa, desde que empezó el año, no han caído ni 150 l/m2, y desde la lluvia de finales de mayo casi no ha habido precipitaciones. Cogiendo datos del último medio año, la falta de lluvia es bastante más grave en la cuenca del Segre que en el Bages, pero si hace mucho calor de manera sostenida, la evaporación hace que haga falta más lluvia para que la vegetación conserve un cierto nivel de humedad.

En los mapas del tiempo no hay indicios de mejoras. A mediados de la semana que viene la temperatura hará una bajada de 3 o 4 grados en el oeste de Catalunya, pero el próximo fin de semana es bastante posible que el termómetro vuelva a situarse cerca de los 40 grados en bastantes comarcas. A más largo plazo algunos modelos de previsión apuntan a una normalización de la temperatura a diez días vista, pero la previsión tan lejana todavía es muy incierta.

Los primeros 40 grados del Reino Unido

Entre lunes y martes la masa de aire cálido que afecta a la Península tirará un potente brazo hacia el Reino Unido y Francia, donde se esperan temperaturas en algunos casos inéditas. El servicio meteorológico del Reino Unido (Met Office) considera que el escenario más probable es que entre lunes y martes en algunos puntos del país se llegue a 40 grados, un umbral que no se ha alcanzado nunca en las islas británicas. Hasta ahora el récord de temperatura del Reino Unido son los 38,7 °C que se registraron en Cambridge durante la oleada de calor de finales de julio del 2019. La Met Office ha activado avisos por calor extremo en este inicio de semana, pero la normalización de la temperatura se espera rápida a partir del miércoles. En l oeste de Francia se esperan temperaturas de más de 40 grados en muchos lugares y máximas que puntualmente superen los 42. Incluso en París se podrían superar los 40 grados de cara al martes.