Cero pantallas para los bebés y volver al teléfono analógico: las recomendaciones que quiere sacar adelante el gobierno español

Madrid / BarcelonaNo exponer a los bebés de 0 a 3 años en las pantallas; reducir al máximo el uso de los dispositivos digitales hasta los 6 años y, en su caso, que se utilicen siempre en presencia de un adulto; limitar el acceso a Internet hasta los 12 años; instalar medidas de protección al menos hasta los 16 años, y retrasar todo lo posible la llegada del primer móvil con acceso a internet. Éstas son las principales recomendaciones del informe elaborado por el comité de 50 expertos (nombrados por el gobierno español el pasado enero) para minimizar el impacto nocivo de las tecnologías entre los menores de edad. Un documento que el gobierno español avala: el consejo de ministros, a propuesta del ministerio de Juventud e Infancia, ha validado este martes este paquete de recomendaciones con el objetivo de diseñar un plan que promueva un entorno seguro para niños y adolescentes.

"Como gobierno recogemos la mano tendida [del comité]. Muchas de estas medidas ya están incluidas en el anteproyecto de ley orgánica para la protección de los menores en entornos digitales seguros, y desde el ministerio [de Juventud y Infancia] trabajamos en una estrategia nacional a través de la que también plantearemos medidas profundas", ha dicho la titular de la cartera, Sira Rego (Izquierda Unida), que en declaraciones a La Sexta ha defendido que el Estado es "pionero" en esta materia.

El documento contiene un total de 107 medidas, de las cuales una treintena ya están recogidas en este anteproyecto de ley orgánica para la protección de los menores de edad en entornos digitales que el gobierno español aprobó en primera vuelta este verano. Ahora, la norma está en consulta pública. Precisamente, además de la estrategia nacional, la intención del ministerio que dirige Sira Rega es estudiar qué recomendaciones del informe presentado este martes pueden incorporarse al futuro anteproyecto, y que esto también suponga velar por garantizar el acceso a las nuevas tecnologías cuando sea necesario.

El informe de los expertos no se queda sólo en la eliminación de las pantallas y el uso de dispositivos móviles. También plantea regulaciones dirigidas al sector industrial, asumiendo que la autorregulación que se ha ejercido hasta ahora es del todo insuficiente. En este apartado destacan propuestas como la configuración por defecto de espacios seguros (control parental) o la obligación de advertir en las cajas contenidas en los dispositivos tecnológicos de los riesgos que tienen para la salud. También proponen elaborar informes de impacto y reforzar los mecanismos de denuncia, bloqueo y responsabilidad de la industria.

Limitar el uso pedagógico

Por lo que respecta a las escuelas, los expertos instan a poner normas sobre el uso de los dispositivos en los centros. Si bien los móviles privados ya están prohibidos en educación infantil y primaria, también proponen que se limite su uso como herramientas pedagógicas en la secundaria. En este sentido, se ponen en el punto de mira las aplicaciones que generan una gratificación inmediata cuando se supera la actividad sea a través de una recompensa o felicitación con sonidos y efectos llamativos. La preocupación entre los expertos es si este tipo de gratificación abre la puerta a efectos nocivos, como puede ser la adicción.

Finalmente, los expertos también han puesto el foco en los creadores de contenidos –incluidos los influencers menores de edad– y piden la "prohibición expresa de exponer a menores de edad al contenido que es objeto de su actividad en la red social", tanto si se trata de una actividad que genera ingresos económicos indirectos como directos. De hecho, el comité insta a regular la práctica del sharenting con menores por parte de los creadores de contenido o influencers (cuando los padres y madres comparten información del niño de manera constante y se genera una huella digital cuando el menor todavía no tiene la edad para consentirlo).

Con todo, Cataluña también abrió un proceso similar en torno al uso de los móviles en las escuelas y los institutos el año pasado, en partir del cual el Gobierno prohibió los móviles dentro y fuera del aula en las escuelas y los institutos.