Los jóvenes de entre 12 y 15 años se podrán vacunar a partir de mañana

BarcelonaLa vacunación de los 300.000 jóvenes de entre 12 y 15 años que viven en Catalunya es inminente. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha anunciado que los adolescentes nacidos entre 2006 y 2009 podrán empezar a pedir hora para vacunarse a partir de este miércoles en la web de el departamento de Salud y que las inyecciones se pondrán en los varios puntos de vacunación habilitados en todo el país, entre los cuales hay pabellones, centros cívicos, hospitales y centros de atención primaria (CAP). De momento estos jóvenes solo recibirán la vacuna de Pfizer/BioNTech, la misma que se está administrando a los de 16 a 18 años, si bien la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) dio luz verde al uso de la vacuna de Moderna en adolescentes de entre 12 y 17 años.

A diferencia de la campaña que se había hecho hasta ahora con los menores de 16 y 17 años, los que tienen entre 12 y 15 años tendrán que ir obligatoriamente acompañados del padre, madre o tutor legal para poder recibir la dosis. Además, los nacidos en 2009 tienen que haber cumplido los 12 años para ponérsela, puesto que por debajo de esta edad Europa todavía no ha autorizado el uso de ninguna vacuna contra el covid. Aragonès ha informado de que será la conselleria de Salud la que dará más detalles sobre esta vacunación, previsiblemente en la rueda de prensa del miércoles, que se dedicará al proceso de inmunización.

Los menores de edad son un colectivo que en el último año "ha sufrido especialmente los efectos de la pandemia y las restricciones", ha remarcado Aragonès y, por eso, ha hecho un llamamiento a esta franja de edad y a sus familias a pedir hora tan pronto como sea posible y a vacunarse para empezar las clases con más seguridad. "Hemos de empezar el curso [escolar] con la inmunidad más alta posible en los centros educativos. Es un colectivo que necesitamos que se inmunice", ha insistido el presidente. El objetivo es garantizar "el buen funcionamiento" de los centros de secundaria, bachillerato y ciclos formativos.

El retorno presencial a las aulas es precisamente uno de los cuatro argumentos que esgrime el pediatra y epidemiólogo en el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), Quique Bassat, para justificar la necesidad de avanzar en la inmunización de los adolescentes. "Si queremos volver a dar clases presenciales de forma segura con una variante como la delta propagándose, que es tan infecciosa, tenemos que vacunarlos", explica, y añade que el objetivo tendría que ser ir controlando la pandemia para no tener que hacer grupos tan reducidos como los del último curso.

Reducir casos graves y persistentes

"Hace un mes y medio habría tenido mis dudas sobre si vacunar a los más jóvenes era una urgencia, pero después de ver que uno de cada ocho casos de la pandemia se han concentrado en el mes de julio, los argumentos a favor de la vacunación cobran fuerza", afirma Bassat. Aunque los niños y adolescentes presenten habitualmente cuadros leves de la enfermedad, el experto subraya que la vacunación en estas edades es importante porque todavía se desconoce qué recorrido puede tener el virus y la enfermedad que causa en los próximos años y cómo podría afectar a los más jóvenes.

De hecho, se calcula que entre un 5% y un 10% de los menores que se contagian pueden acabar desarrollando secuelas relacionadas con el covid persistente. "Hay que proteger a los adolescentes individualmente: a pesar de que los casos graves de covid en estas edades son anecdóticos, aumentan a medida que crecen los contagios. Esta quinta oleada hemos visto que los hospitales pediátricos han tenido que atender algunas enfermedades que con vacunas se habrían evitado", afirma el pediatra.

Más allá de su protección individual, Bassat destaca que para tener "un control funcional" de la pandemia -lo que popularmente se ha conocido como inmunidad de rebaño- con la variante delta circulando habrá que vacunar a los adolescentes también: "Es una cuestión de números: si necesitamos un 85% o 90% de la población vacunada, hay que incluir a los adolescentes necesariamente o si no, no llegaremos".

La intención del Govern era vacunar a esta franja de edad en los institutos, tal como propusieron los departamentos de Salud y Educación, para facilitar la organización una vez hubiera empezado el curso o unas pocas semanas antes del inicio. De momento, sin embargo, la vacunación arrancará en los puntos convencionales. "Si el calendario es en agosto, evidentemente no lo haremos en los institutos, pero si es en septiembre, lo más probable es que vacunemos a nuestros jóvenes en los institutos", admitía ahora hace dos meses el conseller de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray.

Bassat no descarta que la estrategia de vacunación de adolescentes haya que complementarla mediante el despliegue de equipos de enfermeros en las aulas, pero admite que es buena idea ir vacunando ya a los adolescentes más vulnerables o a los que tienen más interés en vacunarse ya para no entorpecer la campaña. "Hay muchos jóvenes que de momento no se vacunarán porque están de vacaciones pero otros que sí. Se me hace poco creíble que consigamos un 20% o un 30% de adolescentes vacunados en agosto ", indica.

Freno a la inmunización

La vacunación empieza a resentirse un poco debido a las vacaciones y ahora ya la oferta de dosis es ligeramente superior a la demanda. El exceso de vacunas que se almacenan en las neveras catalanas ha precipitado que el Govern haya abierto ya la convocatoria para los más jóvenes y, de hecho, y por primera vez desde que empezó la campaña, el ejecutivo catalán ha admitido que hay un retraso en la inoculación de dosis debido al periodo estival y la eclosión de la quinta oleada, que ha dejado al menos 194.000 contagios en un mes y medio. La semana del 17 al 23 de julio se pusieron 360.421 dosis, y entre el 24 y el 30 de julio, 414.737. Unas cifras significativamente inferiores a las 557.198 vacunas administradas hace tres semanas o a las 677.366 de principios de julio.

La portavoz del ejecutivo catalán, Patrícia Plaja, ha admitido que a estas alturas hay unas 80.000 dosis disponibles y ha instado a la población a pedir cita para vacunarse, incluso si se está de vacaciones -"por necesidad, trabajo o placer", ha enumerado- para no frenar el proceso de inmunización y por "responsabilidad individual y colectiva". La portavoz ha recordado que a pesar de que "un grueso" de la población puede estar lejos de su residencia habitual se puede vacunar donde pase la temporada de verano. Este mensaje contrasta con el que ha intentado enviar el conseller de Salud, Josep Maria Argimon, estas últimas semanas, cuando pedía no saturar los puntos de vacunación de estas zonas estivales. Plaja ha admitido que esto puede añadir "más presión" al sistema sanitario pero ha apuntado que la población tendrá que ponerse la segunda dosis allá donde reciba la primera.

Catalunya cuenta con un 58% de población vacunada con la pauta completa y con un 65% de los ciudadanos con una primera dosis, y es la quinta comunidad que da un paso adelante e incluye a los adolescentes en la campaña de vacunación. Baleares, Murcia, Aragón y Canarias ya los han incorporado en su estrategia, mientras que Extremadura, Andalucía, Galicia, el País Vasco, el País Valenciano y la Rioja se preparan para incluirlos. En cambio, la Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Navarra, Ceuta y Melilla todavía no han hecho pública ninguna fecha orientativa para el inicio de la inmunización.

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, confiaba empezar a vacunar a los adolescentes de 12 a 17 años dos semanas antes del inicio del curso escolar, unos quince días antes del regreso a las aulas, para garantizar la presencialidad de los alumnos durante todo el curso. Como siempre, sin embargo, la decisión depende de los gobiernos autonómicos, que pueden adelantar la vacunación siempre que tengan disponibilidad de vacunas y se abran convocatorias por edades y en orden descendente.