La T-Usual puede encarecerse trece euros si decae la bonificación del Estado
La ATM sólo se compromete a mantener el 20% de descuento de los títulos de transporte


BarcelonaEl estruendo provocado por la caída de los tres decretos del gobierno español este jueves en el Congreso puede tener repercusiones en breve sobre el precio del transporte público en el área de Barcelona. En un comunicado, la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) -el consorcio formado por la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona y el AMB- ha avisado de que, si el Estado acaba retirando su aportación, sólo mantendrá el 20% del descuento que le corresponde.
En el comunicado, la ATM ha explicado que, de momento, mantiene los precios y las bonificaciones actuales a la espera de que el ministerio de Transportes comunique o publique el orden de anulación de estos descuentos. Sin embargo, el consorcio avisó de que si finalmente se anulan las bonificaciones del Estado, sólo mantendrá el descuento del 20% que le corresponde actualmente. Lo mismo han comunicado las ATM de Lérida, Gerona y Tarragona.
Esto implicaría que, por ejemplo, el título de transporte T-Usual de una zona –el más utilizado– pasaría de los 22 euros que cuesta actualmente –tiene una bonificación del 50%– a costar 35,2 euros. Un incremento de 13,2 euros que se hará notar en muchos bolsillos. En el caso de una T-Usual de dos zonas, por poner otro ejemplo, pasaría a costar 47,44 euros en vez de a los 29,65 actuales. La T-Jove subiría hasta los 70,4 euros. La T-Casual y los billetes sencillos, en cambio, se quedarían como estaban, puesto que no estaban bonificados.
El sistema tarifario integrado de la ATM –que permite utilizar con un único título de transporte metro, autobuses urbanos, metropolitanos e interurbanos, tranvía, Ferrocarrils de la Generalitat y Cercanías– es válido en Barcelona y en otros 295 municipios de su corona. Actualmente, el Estado financiaba un 30% de la bonificación del precio de los títulos de transporte público del área de Barcelona, mientras que la ATM –el consorcio formado por la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona, el AMB y el Asociación de Municipios por la Movilidad y el Transporte Urbano – el 20% restante.
Antes de terminar el año 2024, cuando todavía no estaba confirmado que el gobierno español mantendría su aportación, la consellera de Territorio, Silvia Paneque, había asegurado que la Generalitat estaba dispuesta a hacerse cargo de su parte para mantener las bonificaciones. De hecho, el 21 de diciembre el Gobierno anunció un acuerdo con los comunes en el que se garantizaba que las bonificaciones se mantendrían todo el año –y no sólo seis meses como en el caso del gobierno español–, lo que implicaba la prórroga de la bonificación del 50% de la T-Usual y la T-Jove, además de la gratuidad de la T-16. Ahora todo esto está en el aire.
Adiós a la gratuidad de Renfe
Donde también se notará la caída de los decretos al servicio de Cercanías. La gratuidad de los abonos para viajeros habituales de Cercanías, Media Distancia y servicios de Proximidad desaparece a partir de mañana. También los abonos Avant que se bonificaban al 50%. En el caso de los de Cercanías y Media Distancia ya emitidos se podrán seguir utilizando hasta que finalice su vigencia en el mes de abril. Lo mismo ocurre con los abonos gratuitos de las líneas de bus estatal.
Este mismo miércoles el ministerio de Transportes ha explicado que con la caída del decreto las tarifas de buses y trenes de la red estatal vuelven automáticamente a los precios de 2019, sin las bonificaciones. Esto significa, apuntan, que a partir de este jueves ya no podrán adquirirse nuevos abonos gratuitos o con descuentos.
Sin embargo, el ejecutivo español también tiene la opción de aprobar un nuevo decreto que recoja sólo las ayudas al transporte público. En este caso, Junts –que este miércoles ha votado en contra del decreto haciéndolo caer– ya ha avanzado que sí votaría a favor para permitir sacar adelante la medida.