Cómo hacer el cambio a la T-Mobilitat en cinco pasos

BarcelonaLa T-Mobilitat hace pequeños pasos adelante. Siete años más tarde de lo previsto (se tenía que poner en marcha el 2015) el cambio hacia el sistema de billetes de transporte digital, que tenía que suponer una "revolución" en el sector, ya tiene disponibles los tres billetes de más uso que utilizan la mayoría de usuarios: la T-Jove, la T-Usual y ahora, desde este martes, también la T-Casual. A pesar de todo, todavía hay pocos ciudadanos que se desplacen con la T-Mobilitat en su día a día. Actualmente, la Autoridad Metropolitana del Transporte (ATM) registra unas 800 altas diarias con el nuevo sistema, pero espera que la puesta en marcha de la T-Casual (el título que sustituyó la histórica T-10) implique un salto cuantitativo importante en cuanto a usuarios.

A continuación os explicamos en cinco claves cómo hacer el cambio de los billetes actuales a la T-Mobilitat.

La T-mobilitat es un sistema digital de taquillaje con tecnología sin contacto que tiene dos formatos posibles: la tarjeta física, una especie de carné que se puede recargar (adquirirla vale 4,5 euros, que se pagan una única vez) y la aplicación de móvil (bajarse la aplicación para pagar tiene un coste de 1 euro). El usuario puede decidir cuál de los dos métodos prefiere.

Para conseguir la tarjeta física hay dos vías: presencialmente o en línea. Para pedirla presencialmente hay que descargar este formulario de registro, llenarlo y entregarlo en uno de los puntos de atención de la red. Además del formulario hará falta el DNI para darse de alta. De este modo la tarjeta se recibe en el momento y ya se puede recargar con el título que cada usuario desee.

Si la solicitud de la tarjeta se hace online, hará falta primero registrarse en la web de T-Movilidad y después acceder al "Área personal". En este mismo momento también se podrá optar por cargar el soporte con el título deseado. La tarjeta llegará a través del correo ordinario a la dirección que se haya indicado.

Si, por el contrario, el usuario prefiere viajar con el formato de tarjeta integrada en el teléfono móvil, habrá que descargarse primero la aplicación de la T-Mobilitat, disponible tanto para Android como para IOS (iPhone). Después tendrá que entrar en la web y darse de alta. Una vez registrado se activa el "Área personal", desde donde se podrán comprar los diferentes títulos. Para pagar con el móvil, sin embargo, todavía hace falta una segunda aplicación (con coste único de 1 euro) y que en este caso solo está disponible para Android y para teléfonos con tecnología NFC (con versión de sistema operativo 6 o superior). Una vez descargada la segunda app y comprados los títulos, el móvil se convertirá en tarjeta y podréis pagar acercándolo a las máquinas validadoras.

Durante estos años, el ATM ha instalado máquinas validadoras que permiten el pago contactless además del taquillaje habitual con billetes de cartón. Cuando se tiene la T-Mobilitat recargada, solo hay que acercar la tarjeta física o el móvil a la máquina validadora.

Actualmente, todos los buses del AMB (es decir, los de TMB, los metropolitanos y también los interurbanos de la Generalitat) ya están adaptados. Los tranvías también. Y en el metro, Renfe y Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) hay instalada como mínimo una validadora digital y, en el supuesto de que haya más de una barrera de paso en la misma estación, el 50% tienen que estar adaptadas.

Se puede viajar en cualquier medio de transporte público colectivo que circule por el interior de la gran zona metropolitana que forman los 36 municipios del AMB. Hay, sin embargo, una excepción: las líneas interurbanas de autobús operadas por las empresas Sagalés y Casas, que, aunque tienen paradas dentro del área de despliegue inicial, salen de ella y, por motivos técnicos, se incorporarán más adelante, explican fuentes de la ATM. Poco a poco se irán incorporando las siete coronas del transporte que rodean Barcelona y después se desplegará al resto de Catalunya.

El calendario actual prevé que la T-Mobilitat esté totalmente implantada en la zona de la ATM entre finales de este año e inicios del año que viene. Después, la autoridad del transporte decidirá el día que se dejan de vender billetes de cartón -el apagón magnético-, seguramente en otoño del 2023. Una vez que esto esté hecho, la Generalitat prevé que el sistema se extienda en toda Catalunya el 2024.

El objetivo de la T-Mobilitat es doble. Por un lado, modernizar el sistema para ponerlo al nivel otros países. La actual manera de funcionar, con bandas magnéticas, hace años que ha quedado obsoleta y supone unos costes de mantenimiento y de vigilancia del fraude muy elevados. Del otro, el objetivo final es hacer el pago por uso. Una vez que el sistema esté del todo implantado y desaparezcan las siete coronas tarifarias, el pago se hará en función de los kilómetros recorridos en cada caso. Cuando esté totalmente desplegada, el 2024 -si no hay más trabas- se cumplirán 10 años de la firma del primer contrato, y el proyecto habrá acumulado unos 9 años de retrasos en total (se tenía que poner en marcha el 2015).

El director del ATM, Pere Torres, admitió al ARA que la administración "pecó de optimista" al diseñar el proyecto, que pretende unificar los sistemas de una setentena de operadores en todo el territorio.