La Palma se llena de turistas para fotografiar el volcán

BarcelonaLos tres días de fiesta que permite hacer el puente de Todos los Santos se han notado en la isla de La Palma que, lejos de empezar a recuperar una cierta tranquilidad mientras continúa la erupción del volcán Cumbre Vieja, se ha llenado de turistas. La isla cuenta con unos 10.000 visitantes desde este sábado hasta lunes, motivo por el que el Cabildo de La Palma ha tenido que poner orden. Durante el puente se ha montado un sistema de autobuses lanzadera –unos vehículos que en las Canarias se llaman guaguas– que van del antiguo aeropuerto de la isla al mirador de Tajuya, donde se concentran los turistas para poder fotografiar el volcán.

El director técnico del plan de emergencias volcánicas de las Canarias, Miguel Ángel Morcuende, explica que la medida de tener los autobuses lanzadera es por seguridad y para facilitar la circulación de los vehículos de emergencias. De hecho, la presencia de los turistas no parece que moleste a las autoridades. Al contrario: Morcuende agradece a los visitantes que vayan a La Palma porque con su presencia “demuestran que la isla es segura”.

Pero la aglomeración de los turistas ha coincidido este sábado con el día en que La Palma vivió el terremoto más grande. Se ha registrado un movimiento sísmico de magnitud 5, según la escalera del Instituto Geográfico Nacional, lo que lo sitúa como el más importante en los 41 días de erupción hasta ahora. A pesar del récord, la directora del IGN en Canarias, María José Blanco, asegura que los registros históricos apuntan que la isla ha llegado a tener un movimiento de magnitud 5,8. Además, se prevé que los terremotos aumenten de intensidad y haya algún movimiento sísmico de magnitud 6.

Nueva colada hacia el mar

En cuanto al volcán, que se considera que continúa en fase de estabilidad, tiene una nueva colada que se acerca hacia el mar: es la del sur, que continúa avanzando y ha obligado a evacuar los vecinos de la zona de La Bombilla, que todavía no han podido ir a casa a recoger sus objetos personales. Esta colada que va trasladando el magma del cono del Cumbre Vieja ya se ha catalogado como la que causa más daños materiales en las viviendas que traga.

Morcuende admite que la colada del sur también es la que más preocupa, a pesar de que se hayan evacuado los lugares por donde pasa, porque ha crecido y se dirige al mar. A pesar de que el momento de llegar al agua no parece que tenga que ser inminente, se calcula que si la lava continúa avanzando con el mismo rumbo afectará unas desaladoras que proveen de agua a los cultivos de la zona.

Hasta ahora, según los datos del sistema de satélites Copernicus, el volcán ha arrasado casi un millar de hectáreas de La Palma: ha destruido 2.532 construcciones y ha puesto en peligro 149 más. Las cifras todavía aumentarán más.