Más de la mitad de los maestros sufren problemas en la voz
El año pasado Educació distribuyó 77 micrófonos a docentes con alguna disfonía
BarcelonaLas disfonías son trastornos de la voz muy frecuentes, pero suelen infravalorarse. Afectan al correcto funcionamiento de las cuerdas vocales de una de cada trece personas del Estado, aunque en determinadas profesiones esta proporción se incrementa. Es el caso de los maestros, puesto que la voz es una herramienta de trabajo imprescindible en su día a día, y más de la mitad sufren algún tipo de trastorno a lo largo del curso escolar. De hecho, la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabo y Cuello (SEORL-CCC) estima que casi 9 de cada 10 maestros de infantil tendrán una disfonía a lo largo de su carrera profesional, por lo que los expertos insisten en la prevención y tratamiento precoz con el objetivo de evitar complicaciones de larga duración.
"Es necesario un plan formativo para que los maestros aprendan a cuidar su voz y la importancia de la prevención", defiende Silvia Naches, presidenta de la comisión de voz y trastornos de deglución de la Sociedad Catalana de Otorrinolaringología y Patología Cervicofacial y otorrinolaringóloga del Hospital. Estos trastornos impiden desarrollar con normalidad tareas cotidianas y profesionales y pueden tener "consecuencias graves" para la persona que los padece, tanto en su salud como en su trabajo. Naches insiste en la importancia de cuidar la voz, sobre todo en aquellos casos en los que, por motivos profesionales, existe más riesgo de sufrir una disfonía.
La experta ve necesario el despliegue de un plan para proteger la voz de los docentes y minimizar los riesgos de sufrir una disfonía, ya que en algunos casos hay maestros que incluso deben dar clase con micrófono porque no han tratado a tiempo el trastorno. Según el departamento de Educación, los docentes que lo necesitan deben pedirlo a la administración, pasar visita médica y, si el otorrinolaringólogo se lo prescribe, se les suministra un amplificador de voz con micro por parte del Govern. Sólo el año pasado el departamento distribuyó 77 y en el 2023, 69. Antes de llegar a este extremo, Naches recomienda algunas estrategias, como no hablar de espaldas a clase cuando se escribe en la pizarra y no gritar cuando haya jaleo en el aula, para evitar esfuerzos, aunque hay muchas otras vías.
El mito de susurrar
Lo más importante es evitar sustancias nocivas como el tabaco, el alcohol y el exceso de cafeína, que pueden afectar a la voz, pero también hay que mantener una buena hidratación, hacer una buena respiración por la nariz y mantener una postura corporal correcta. Además, debe controlarse la velocidad del habla, hacer pausas entre frases, y articular de forma clara y precisa, sin tensión muscular. Evidentemente, el volumen no debe ser muy alto y Naches insiste en que, si es posible, debe evitarse el ruido ambiental y no gritar cuando lo haya. La experta también avisa de que no debe hablarse con la voz cansada o forzarla durante una laringitis, ya que puede prolongar la recuperación. Otro mito con el que quiere romper Naches es que no hay que susurrar cuando se tiene una disfonía. "Si quiere hablar abajo, hable con su voz normal, aunque esté afónicos", avisa la experta.
De estos hábitos a evitar, el más negativo es el tabaco, que provoca el 85% de los tumores de laringe. La SEORL-CCC también pone el foco en otras formas de fumar, como las pipas de agua. El 40% de los adolescentes de entre 14 y 18 años del Estado han fumado en el último mes, por lo que afirma que "urge legislar sobre este hábito" y limitar su acceso. Por ejemplo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) pide que se endurezcan las medidas para abrir locales donde se fume en pipa de agua y aumentar los impuestos en estos productos.