Sánchez lo fía todo a la vacuna y a las mascarillas a pesar de la polémica por su regreso en los exteriores

MadridEl gobierno español considera que con el uso de la mascarilla en exteriores y con la aceleración de la vacunación tiene que bastar para controlar la situación ante la escalada de contagios por la variante ómicron. Este jueves el consejo de ministros ha aprobado un real decreto que modifica la ley de la nueva normalidad para recuperar la obligatoriedad del uso de la mascarilla en exteriores para personas mayores de 6 años. Tanto la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, como la de Sanidad, Carolina Darias, han insistido en que la principal arma contra la expansión del virus es la vacunación, y han rechazado posicionarse en el debate sobre si hacen falta más restricciones. De hecho, Rodríguez ha remarcado que "el gobierno apoya las medidas de todas las comunidades". Esto incluye desde la Comunidad de Madrid, que casi no tiene, hasta Catalunya, que volverá esta noche al toque de queda.

Las excepciones a la obligatoriedad de la mascarilla en exteriores serán para las personas que estén haciendo deporte individualmente y aquellas que estén en espacios naturales donde sea posible mantener la distancia de seguridad de metro y medio. Esto significa que la mascarilla será obligatoria en entornos urbanos en cualquier circunstancia, pero que no será necesaria en el campo o en la playa siempre que se esté con el núcleo de convivencia o se pueda mantener la distancia de metro y medio. Por lo tanto, dos personas no convivientes que vayan paseando por la playa no tendrán que llevar la mascarilla si respetan esta distancia entre ellas.

La medida de la mascarilla en los exteriores no convence, sin embargo, a buena parte de los expertos ni a las autoridades sanitarias de Catalunya. La secretaria de Salud Pública, Carmen Cabezas, la considera insuficiente. "La mascarilla es una capa extra de protección, pero sobre todo en el interior. En el exterior aporta poca cosa", ha dicho en una entrevista a RAC1. También la investigadora del Biocomsc Clara Prats dice que la mascarilla en el exterior no es "muy" efectiva para reducir la transmisión del covid y defiende que los contactos estrechos de positivos tendrían que hacer cuarentena. "La circulación del virus es enorme. La probabilidad de estar en contacto con él es muy grande", ha dicho. Habrá que ver la letra pequeña del decreto por si requiere la convalidación del Congreso -se tiene que hacer en un máximo de 30 días-, pero no está claro que el gobierno cuente con suficientes apoyos: han criticado la mascarilla en el exterior el PP, Vox, Cs, EH Bildu y Más País.

150 puntos de vacunación a cargo del ejército

A pesar de esto, el ejecutivo español lo fía todo a la aceleración de la vacunación y a la generalización del uso de la mascarilla. La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha insistido en que la mayoría de presidentes autonómicos apostaron ayer por las "recomendaciones" y no por las restricciones. Esto, sin embargo, contrasta con las críticas que tanto el president de la Generalitat, Pere Aragonès, como el lehendakari, Iñigo Urkullu, trasladaron a Pedro Sánchez por la tibieza de sus medidas. "Ahora hay que centrarse en la vacunación y en los objetivos ambiciosos que nos hemos propuesto", ha respondido Darias. La ministra ha remarcado que se pondrán a disposición de las autonomías 150 puntos móviles de vacunación a cargo del ejército y dos hospitales militares en Madrid y Zaragoza.

Ante las críticas sobre la falta de fondos para hacer frente a la pandemia, la ministra portavoz también ha subrayado que el gobierno español tiene un fondo previsto de 7.000 millones para las comunidades autónomas y que considera que es suficiente, a pesar de que está abierto a ampliarlo más adelante si es necesario. De hecho, se prevé una nueva conferencia de presidentes telemática para hacer el seguimiento de la pandemia a principios de enero.