El talento artístico disimula la crisis creativa de Disney
Barry Jenkins firma en 'Mufasa: El rey león' una intimista precuela de animación fotorealista del clásico de 1994
- Dirección: Barry Jenkins. Guión: Jeff Nathanson a partir de personajes de Linda Woolverton, Irene Mecchi y Jonathan Roberts
- 120 minutos
- Estados Unidos (2024)
- Animación
Hace unas semanas, el estreno de lo olvidable Vaiana 2 perfilaba uno de los nadires de la actual crisis de creatividad de la compañía Disney, empeñada en rentabilizar el atractivo comercial de sus franquicias más exitosas. Ahora, Mufasa: El rey león, precuela del filme de 1994 –que ya va sufrir uno remake digital fotorealista en 2019–, demuestra que no todo está perdido para la todopoderosa factoría de animación. De hecho, la comparación directa con Vaiana 2 resulta reveladora: allí donde la secuela de la aventura polinesia se limitaba a replicar la fórmula original, Mufasa añade unas estimulantes pinceladas de mitología griega al drama shakespeariano deEl rey león (el nuevo malvado responde al nombre de Kiros y la figura de Rafiki, el mandril sabio, se asemeja más que nunca al adivino Tiresias)
Más allá de las novedades narrativas, el éxito relativo de Mufasa pasa por el buen trabajo de su equipo artístico. Aunque estamos ante un gran espectáculo de animación digital, Barry Jenkins, director de la oscarizada Moonlight, convierte el filme en una exploración intimista, con muchos primeros planos, de la experiencia de la marginación. Por otra parte, Lin Manuel-Miranda, que no participó en Vaiana 2 después de componer las magníficas canciones del filme original, consigue dialogar de tú a tú con el legado de los míticos temas de Elton John y Tim Rice. Así, el talento y la autoría suavizan el desgaste de la zaga felina.