Muere el dibujante Enrique Ventura, creador de 'Grouñidos en el desierto'

BarcelonaEl dibujante Enrique Ventura, autor fundamental del cómic humorístico de las últimas décadas, ha fallecido la madrugada de este lunes. Nacido en 1947 en Madrid, dibujó durante más de cuarenta años la serie Grouñidos en el desierto en la revista El Jueves, durante los primeros quince años con guiones de su primo Miguel Ángel Nieto, fallecido en 1995. Juntos formaban el dueto Ventura & Nieto, uno de los tándems más importantes de la historieta humorística de los años 70 y 80. Ventura, que en 1997 recibió el Gran Premio de Honor del Salón del Cómic de Barcelona, trabajó también en animación y cine y escribió novela juvenil.

Ventura empezó los estudios de arquitectura pero, seducido por los nuevos aires de libertad que llegaban del extranjero, tanto él como su primo, que cursaba medicina, abandonaron la universidad para seguir una carrera en el cómic. Influenciados, por un lado, por la escuela de Bruguera y el TBO y, por otro, por el humor de revistas internacionales como Mad, debutaron en la revista infantil Molinete. Pero su ambición era trabajar en las revistas más punteras de la época: los objetivos eran la innovadora Trinca y la emblemática Pilote, que dirigía René Goscinny, con quien Ventura y su primo se entrevistaron en París para ofrecerle un material preparado expresamente para la revista. El creador de Astérix rechazó amablemente la propuesta de los autores y lo mismo pasó en la redacción de Trinca. Pero el destino tenía un golpe escondido, como recordaba Ventura en una magnífica entrevista en el portal Humoristan: "Una vez en casa, cuando nos consolábamos del fracaso a base de cubatas, recibimos la visita del dibujante Vicente Alcázar, que nos dijo: «¿Por qué no envías las historietas al revés?" Mano de santo. Trinca nos publicaron lo que había leído Goscinny y en Pilote acabaron publicando lo que habíamos hecho para Trinca".

De 'Trinca' a Groucho

¡Es que van como locos!, de 1972, fue el debut de Ventura & Nieto enTrinca, donde poco después apareció Maremagnum, el primer cómic largo del tándem, que enseguida se hace un huevo en el panorama del cómic humorístico gracias al gusto por el absurdo de los guiones de Nieto y al dibujo refinado y detallista de Ventura, que contrasta con el estilo más inmediato y caricaturesco de muchos dibujantes de la época. A raíz del cierre de Trinca, las series de Ventura & Nieto pasan a publicarse en uno de los grandes semanarios satíricos de los 70, El Papus, de donde en 1979 saltan a El Jueves para crear su serie más larga y emblemática: Grouñidos en el desierto, que protagoniza Julius, una versión libre de Groucho Marx que protagoniza historietas donde la inventiva de los guiones de Nieto alcanza cuotas muy altas, acompañada por el excelente dibujo de Ventura, siempre elegante y pícaro.

Hacía años (desde la época de Maremagnum) que Groucho aparecía en las historietas del dueto, pero según Ventura la idea de la serie fue del fundador de El Jueves, José Luis Martín, que les sugirió que, ya que les gustaba tanto el personaje, le dedicaran una serie. "Cuando nos lo propuso, Miguel Ángel respondió: «Primero deberíamos consultarle a él». Así que lo hicimos y la respuesta de Julius fue: «Sí, si me dejáis hacer de malo»", explicaba el 2021 Ventura. En Grouñidos en el desierto, Ventura & Nieto desarrollaron un estilo a la vez heredero del humor refinado de La Codorniz y del espíritu transgresor de la revista Mad, jugando con la cultura pop y los juegos de palabras, pero también con la comicidad slapstick del humor mudo. Y durante un tiempo la serie mutó y Julius fue sustituido por un alter ego de Harpo Marx, cambiando el nombre de la serie a Harponazos.

Surrealismo en el poder

En el contexto habitualmente más cafre y satírico de El Jueves, la serie se convirtió en un oasis de surrealismo e ingenio muy querido por los lectores. La serie incluso sobrevivió a la muerte inesperada de Nieto en 1995: Ventura asumió la realización en solitario, con la ayuda ocasional (no acreditada) a los guiones de Josep Maria Beà, y a partir de 2013 de Ion Arretxe, que firmaba con el seudónimo de Bisnieto. Pero la producción de Ventura & Nieto va más allá de Grouñidos, y juntos también firmaron las parodias Histerias indecentes de la tele, cómics educativos como La fantasía viaja en Metro y obras personales como Sonrisas (en la revista Rambla) y 10 Go to Magic (en Rumbo Sur). E incluso participaron en la creación del videojuego Freddy Hardest y la película fantástica de Fernando Colomo El caballero del dragón (1985): Nieto coescribió el guión y Ventura firmó el diseño de producción. "Diseñé una nave espacial al estilo Giger en los Estudios Buñuel y el traje de Miguel Bosé [...], pero creo que esa experiencia fue mejor para mí que para los espectadores", recordaba en el 2021.

Desde mediados de los años 80, Ventura colaboró como animador en proyectos de Jordi Amorós como la serie Mofli, el último koala (1987) y la película Despertaferro! (1990), y en 1997 empezó a dibujar una viñeta diaria en La Vanguardia, primero con guiones de Jaume Cullell, Toni Corominas y Kap, responsables de la sección El Burladero, y después únicamente con Corominas. Uno de sus últimos proyectos de cómic fue la recuperación en 2013 de la serie clásica de aventuras Diego Valor, con guiones de Andreu Martín. En paralelo a toda la producción como dibujante, también desarrolló una carrera literaria como novelista juvenil que arranca en 1993 con Cuatro gatos y que incluye títulos como ¡Qué me vas a contar de los marcianos! (1994) y Estricnina con yogur (1997).