Chile está a la espera de saber si Neruda fue asesinado
Por segunda vez se ha aplazado la publicación del veredicto de un grupo de expertos que tienen que aclarar si el escritor murió por un envenenamiento provocado
Buenos AiresChile espera, desde el viernes, aclarar la causa de la muerte del escritor y premio Nobel de literatura Pablo Neruda, y resolver así si se trató o no de un envenenamiento, tal como sospecha la familia, pero por segunda vez los resultados de la investigación han sido pospuestos. Este lunes se tenía que hacer una rueda de prensa para dar a conocer las conclusiones periciales de un grupo de expertos internacionales, pero a última hora se ha aplazado hasta el 15 de febrero. “Ninguno de los peritos que integran el panel de expertos se ha presentado a la audiencia de hoy y, en paralelo, su coordinadora ha presentado una solicitud para prorrogar los resultados provisionales con un argumento desconocido hasta ahora: que no hay consenso entre los integrantes y que piden más tiempo”, ha declarado la juez a cargo del caso, Paola Plaza.
La primera convocatoria para hacer público el veredicto estaba prevista para el viernes 3 de febrero, pero en el último minuto se suspendió por “problemas técnicos”. La explicación que dieron familiares y querellantes del caso es que varios participantes estaban fuera de la capital y tenían dificultades con la conexión a internet. La esperada cita se trasladó a este lunes, pero nuevamente se ha cancelado. En medio de la confusión, el viernes se filtraron las supuestas conclusiones a un medio independiente que citaba fuentes cercanas al caso. Esta filtración confirmaría la hipótesis del envenenamiento de Neruda por la bacteria Clostridium botulinum, pero además de la causa de la muerte, también se espera que los expertos expliquen cómo se habría introducido la sustancia en el cuerpo del poeta.
Historia de un misterio
Desde hace 11 años, la familia investiga el misterio sobre la muerte del escritor. En 2017, otro grupo de expertos internacional descartó por primera vez científicamente la versión oficial, que atribuía la defunción de Neruda a un cáncer de próstata que sufría desde hacía años. Esta conclusión se reveló después de haberle encontrado muestras de la bacteria botulínica en un molar. El nuevo escenario también confirmaba la falsificación del certificado de defunción entregado por la clínica.
Los peritos recomendaron entonces dar seguimiento a aquella investigación, pero el proceso se ha dilatado más de lo previsto por obstáculos institucionales, burocracia y la pandemia. Entre el grupo de científicos a cargo de las investigaciones, el tercero desde el inicio del proceso, hay peritos del Centro de ADN de la Universidad MacMaster de Canadá y del departamento de Medicina Forense de la Universidad de Copenhague.
La duda sobre la causa real de la muerte del poeta se instaló en 2011, cuando su antiguo chófer, Manuel Araya, aseguró en una entrevista que durante el ingreso en la Clínica Santa María de Santiago, donde Neruda recibía tratamiento para el cáncer, le inyectaron una sustancia desconocida. Las sospechas fueron en aumento cuando la familia descubrió que el médico que atendió al poeta aquel día, un tal doctor Price, no existe en ningún registro del centro y nunca nadie ha tenido noticias de él. En 2013 un juez chileno ordenó la exhumación de los restos del poeta y se hicieron las primeras pruebas, que descartaron la intervención de terceros en su muerte. Pero la insistencia de la familia y su lucha para conocer la verdad consiguieron que se abrieran nuevas investigaciones.
Neruda murió el 23 de septiembre de 1973, doce días después del golpe de estado de Augusto Pinochet y un día antes de marchar hacia el exilio que lo tenía que llevar hasta México. Militante histórico del Partido Comunista y diplomático con un importante reconocimiento internacional, según los denunciantes habría representado un enemigo peligroso para el régimen. Las conclusiones preliminares se han programado para el 15 de febrero, y los resultados definitivos se darán a conocer el 7 de marzo.
