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Barça y Nike: las heridas abiertas de un "acuerdo histórico"

Darren Dein pidió cobrar una comisión de más de 50 millones de euros por su intermediación, algo que no gustó dentro del club

Joan Laporta en una reciente comparecencia pública.

BarcelonaEl tira y afloja entre el Barça y Nike ha tenido un final feliz con la renovación del contrato, pero ha ocasionado algunas heridas debido a las tensiones vividas. El catalán Albert Baronet, máximo ejecutivo de Nike en el sur de Europa, ha dejado de ir asiduamente al palco del Barça como hacía con anterioridad, según explican al ARA fuentes de su entorno, pese a que la relación con Joan Laporta viene de lejos. Durante el primer mandato del abogado al frente del club azulgrana le propuso ser el director general. Baronet rechazó la propuesta y Laporta acabó incorporando a Joan Oliver.

Las tensiones y las demandas cruzadas que ha habido entre el Barça y Nike durante el último año han dejado tocadas las relaciones pese al acuerdo de renovación y, precisamente, éste es el argumento que se expone internamente en el club para justificar la participación como intermediario de Darren Dein, exagente de Cesc Fàbregas e hijo del exvicepresidente del Arsenal David Dein. Este abogado ya hizo de intermediario en las negociaciones entre el Barça y Spotify. De hecho, Laporta le agradeció públicamente el trabajo realizado durante la asamblea extraordinaria para aprobar el acuerdo, celebrada en el 2022. Fuentes conocedoras de las negociaciones entre el Barça y Nike aseguran al ARA que Darren Dein pidió cobrar un total de más de 50 millones de euros del club por su intermediación, de la que Nike ha querido desvincularse por escrito. Quien pagará por los servicios será el club, aunque no hay detalle exacto de la cifra.

Las reuniones con Nike, por otra parte, han evidenciado el poder absoluto de Laporta en el Barça, algo que también ha dejado heridas dentro del club. A diferencia de las negociaciones con Spotify, en las que tuvieron un papel relevante nombres como Juli Guiu, vicepresidente del área de marketing; Eduard Romeu, entonces vicepresidente económico del club, y Ferran Reverter, entonces CEO del Barça, en las negociaciones con Nike el único protagonista de la parte azulgrana ha sido Laporta.

Juli Guiu y Joan Laporta en un acto público del Barça.

Guiu, pese a que sigue en la actualidad como vicepresidente del Barça y que el de Nike se trata de un asunto claramente de su área, ha tenido esta vez un papel testimonial en las negociaciones y no ha encontrado idónea la intermediación de Dein. Esto ha comportado que el director del Festival de Cap Roig esté molesto con Laporta y haya renunciado a tener un papel principal durante la asamblea extraordinaria telemática que se celebrará este sábado para ratificar el acuerdo. Llevarán la voz cantante ante los socios compromisarios el propio Laporta y Ferran Olivé, el tesorero del Barça, que ejerce algunas funciones propias de un director general.

Las cifras al por mayor

El club azulgrana, hasta ahora, ha dado pocos detalles respecto a las cifras y cláusulas de una renovación con Nike que se da por hecho que los socios compromisarios aprobarán por una amplia mayoría. Fuentes del Barça afirman que se trata de un "acuerdo histórico" que supondrá para la entidad catalana 1.700 millones de euros en total hasta el 2038. Significa que el Barça percibirá hasta el curso 2027-2028 (cuando expira el todavía contrato vigente) unos 105 millones de euros de Nike por temporada (ahora, según la actual junta directiva, se cobran unos 60 millones por año). Desde 2028-2029 hasta 2037-2038 serán 120 millones por curso.

En estos números se incluyen los 158 millones de bonificación por renovación que Nike ha pagado al Barça. Desde los despachos de Arístides Maillol explican que la intención era que estos millones sirvieran para resolver definitivamente las inscripciones de Dani Olmo y Pau Víctor a partir del 1 de enero, pero que la Liga, instada por el Athletic Club, el Atlético de Madrid y el Sevilla, ha obligado al Barça a prorratearlos por los años de duración del contrato. Debido a esto, a 20 de diciembre, el fair play económico azulgrana sigue excedido.

El precedente del anterior contrato

El contrato con Nike vigente hasta el sábado, firmado en época de Josep Maria Bartomeu, desde el club se dice ahora que supone unos 60 millones de euros por año más bonificaciones por títulos. Pero cuando se cerró en 2016, el entonces vicepresidente de las áreas de marketing y comunicación, Manel Arroyo, aseguró que supondría unos 150 millones de euros por año. La afirmación tenía letra pequeña. Esto es lo que habría ingresado el Barça por temporada si se hubiesen cumplido siempre todas las cláusulas positivas que hay en el contrato, que básicamente tienen que ver con ganar títulos y con los aspectos de Barça Licensing & Merchandising (BLM) que el club se reparte con Nike.

Por este motivo, varias fuentes expertas en la economía del Barça consultadas por el ARA consideran que la cifra anunciada por la junta de Laporta de 1.700 millones hasta el 2038 debe ponerse en barbecho. Lo más relevante, más allá de si el Barça masculino y el Barça femenino se hinchan a ganar títulos o no durante este período, es lo que dice el nuevo contrato sobre la relación entre BLM y Nike. Hasta ahora, el club se ha limitado a explicar que "Nike tiene un papel estratégico clave en las operaciones de retail del club y, junto a BLM, unirán fuerzas en el desarrollo de planes específicos en la creación de productos, la cadena de suministro y la distribución global".

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