Vender a Memphis para inscribir a Gavi: ¿por qué ha salido el tiro por la culata?

BarcelonaMateu Alemany es un hombre de negocios y, como buen ejecutivo, no se deja llevar por las emociones. Por eso, cuando vio que podía pactar con el Atlético de Madrid la venta de Memphis, no vaciló. El director de fútbol del Barça sigue teniendo la misión de conseguir ingresos con la venta de jugadores y de adelgazar la masa salarial, objetivos que ha ido cumpliendo en los casi dos años que lleva en el cargo, a pesar de que todavía no han sido suficientes para que el club haya llegado a una situación de estabilidad.

Por eso, y a pesar de algunas críticas internas por el hecho de continuar haciendo negocios con los colchoneros–una parte de la directiva no lo quería porque consideraban que ya les habían tomado bastante el pelo con el caso Griezmann–, Alemany pensó que la salida del neerlandés iría de perlas para poder inscribir a Gavi. De hecho, hicieron números y adaptaron las cifras de la operación en este sentido. Lo que no se esperaba Alemany es que la Liga le diría que no. Que el margen conseguido todavía no es suficiente.

La decisión de la patronal, que hizo saber esta semana al Camp Nou, cayó como un cubo de agua fría en las oficinas, donde ya daban por hecho que Gavi podría ser inscrito de manera inminente. También en el vestuario, donde Xavi se ha encontrado con que ha perdido dos piezas (Memphis y Gerard Piqué, retirado en noviembre) sin nada a cambio. Así, y a ojos de la Liga, el centrocampista sigue constando como futbolista del filial y todavía no puede lucir el dorsal número 6 –actualmente todavía lleva el 30–. Con todo, desde el Barça no tiran la toalla y siguen trabajando con el objetivo de cerrar esta inscripción. "Hace días que estamos haciendo números y Mateu está trabajando muy duro en esto. Confiamos en que será posible", apunta una de las fuentes consultadas, vinculada al área económica del Barça.

Gavi renovó su contrato con el Barça a mediados de septiembre, con una mejora notable de salario, y firmó hasta 2026 con una cláusula de rescisión de 1.000 millones de euros. Ahora bien, tanto este contrato como el de Araujo –que en verano firmó con unas condiciones similares– están pendientes de ser validados por la Liga. Una especie de realidad paralela donde conviven el documento que vincula a los jugadores con el Barça hasta 2026 y la normativa de la patronal que, de momento, les impide jugar de azulgrana más allá de este 2023. Es decir, la Liga validó en su día los contratos que tenían como deportistas del filial y que les permitían jugar hasta el final de este curso. El nuevo documento, como el Barça está excedido en el límite salarial, no se puede formalizar hasta que el club haya generado suficiente margen. Es aquí, buscando la rendija, donde está ahora mismo Mateu Alemany.

El objetivo de renovar a Gavi y Araujo a pesar de no poder inscribirlos

Puede parecer extraño que el Barça haya renovado a un futbolista sabiendo que todavía no lo podía inscribir. Pero, según fuentes del club consultadas por el ARA, el motivo que hay detrás es puramente deportivo: retener al jugador en efectos legales. Sin la renovación, Gavi y Araujo habrían acabado contrato este 2023 y ya serían libres para firmar con cualquier otro club –de acuerdo con la normativa FIFA–. Al haber renovado, esta posibilidad desaparece.

La Liga, en su normativa sobre el límite salarial, también da margen para que se pueda hacer este doble juego. "Una renovación o un fichaje no se tiene que inscribir de manera inmediata sino cuando el club lo considera conveniente", dicen desde la patronal. Lo único que cuenta es el tiempo. Gavi y Araujo tienen que ser inscritos en verano. En caso contrario, el Barça no habrá podido cumplir con su parte del trato y los futbolistas podrán cortar el acuerdo unilateralmente. En este compás de espera, Gavi y Araujo pueden jugar con normalidad hasta final de temporada cobrando lo que acordaron con el club catalán cuando renovaron.

La venta de Memphis, pues, no está dando el resultado que se esperaban a las oficinas. Entre el margen salarial que ha supuesto su salida y el dinero que el club se ahorra con Piqué, retirado del fútbol antes de Navidades, solo habría espacio para inscribir a Gavi para esta campaña, pero no para las siguientes. El centrocampista es el primero en la línea para ser inscrito, y después vendrá Araujo. Fuentes del Barça, sin embargo, garantizan que las dos inscripciones se completarán, niegan que haya nerviosismo en el entorno de los futbolistas y aseguran que los dos seguirán en el Camp Nou "durante muchos años".

Mientras tanto, en la tesorería azulgrana siguen haciendo números para empezar a preparar una temporada, la 2023/24, que será especialmente delicada por el traslado a Montjuic y las consecuencias económicas que esto supondrá –se prevé una bajada de ingresos–. La venta de una parte de BLM para conseguir ingresos extraordinarios y la venta de un futbolista destacado del primer equipo para hacer caja, son las dos balas que tienen en la recámara.