Hegemonía culé: el Barça de balonmano, campeón de Europa por duodécima vez

BarcelonaHegemonía indiscutible. Ningún equipo en el mundo compite como el Barça de balonmano. El conjunto azulgrana superó al Aalborg danés en el Lanxess Arena de Colonia (30-31), donde se proclamó campeón de Europa por duodécima vez. Aitor Ariño y Gonzalo Pérez de Vargas sumaron su quinto título continental en una final de máxima exigencia que no se decidió hasta los últimos segundos.

El vestuario del Barça, que se ha sobrepuesto a una temporada llena de lesiones, contratiempos y decisiones difíciles, no pudo contener las lágrimas. "Hemos demostrado el tipo de equipo que somos. Estoy muy orgulloso del trabajo que hemos hecho", dijo Dika Mem, quien sufrió la muerte de una hermana hace apenas unas semanas. Melvyn Richardson, que marcó un gol clave, fue designado mejor jugador de la final.

Joan Laporta imitó la escenografía de la mítica final four de París 2010, en el que el Barça de baloncesto se proclamó campeón por segunda vez en la historia. El presidente presenció la final junto a Hansi Flick, el nuevo entrenador alemán del equipo de fútbol. El vicepresidente deportivo Rafa Yuste, el directivo Joan Solé, el asesor Enric Masip y el ex entrenador Valero Rivera fueron sus compañeros de asiento. El club acumula 47 Copas de Europa entre todas sus secciones.

La final no se pareció en nada a la del 2021, en la que el Barça pasó por encima del Aalborg. Carlos Ortega, el único entrenador de los seis equipos profesionales del Barça que seguirá en el banquillo, preparó muy bien la final, acentuando un ritmo alto que favorecía al Barça, pero el rival también fue capaz de potenciar sus virtudes.

El Barça empezó la final con buen pie, pero seis minutos sin marcar permitieron que el rival igualara el marcador (8-8). Aalborg, un equipo mentalmente muy regular que casi nunca pierde la concentración, supo esperar con paciencia su momento. El duelo en las porterías tuvo un gran peso durante una primera mitad en la que Niklas Landin mejoró las prestaciones de Emil Nielsen y Gonzalo Pérez de Vargas. El partido llegó empatado en el descanso (15-15).

La defensa del Aalborg fue creciendo durante una segunda mitad muy intensa. Las diferentes propuestas alternativas se le fueron atragantando, a un Barça que tuvo que jugar al límite para no perder comba (24-24). El equipo azulgrana logró una renta de dos goles a cuatro minutos del final (27-30). La expulsión de Dika Mem complicó un título que el conjunto catalán tenía en el bolsillo.

El Aalborg tuvo la posibilidad de empatar el partido en un último ataque de 10 segundos. Me cometió una falta y Mikkel Hansen, que no pudo tener la despedida que había soñado, falló un lanzamiento directo ya con el tiempo agotado. El balón se estrelló en el larguero de la portería del Barça, que contó con el apoyo de unos 300 aficionados catalanes en Colonia.