La hoja de ruta del Govern para impulsar el coche eléctrico en Cataluña
Isla anuncia que quiere movilizar más de 1.400 M€ con aportaciones también de otras administraciones y el sector privado

BarcelonaQue el coche eléctrico no arranca es sabido y Cataluña está lejos de los objetivos europeos de rebajar un 55% las emisiones del transporte en el 2030 y llegar a la neutralidad en el 2050. De hecho, de los 121.807 vehículos vendidos en Cataluña en el 2024, sólo un 14% eran electrificados (eléctricos puros o híbridos enchufados), los que tienen enchufes, los que tienen enchufes2, los que tienen enchufa. Y muy lejos del objetivo para 2030, que es que el 40% de los nuevos vehículos sean electrificados. El incumplimiento de estos objetivos tiene varios riesgos: el primero, medioambiental, pero también otros industriales. Los fabricantes europeos han invertido 70.000 millones de euros en el coche eléctrico entre 2021 y 2023 –Seat y Volkswagen en España están invirtiendo 10.000 millones–, y si no crecen las ventas de estos vehículos se pone en riesgo su continuidad industrial, con un añadido: si no venden coches eléctricos, se exponen a multas europeas5.
El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha anunciado este lunes que el Govern ha elaborado un plan, con el que quiere movilizar 1.400 millones de euros tanto de la Generalitat como de otras administraciones y del sector privado, para impulsar el coche eléctrico. Un pla que vol fer créixer la demanda i també millorar la infraestructura de recàrrega amb 9.000 punts nous d'accés públic fins al 2030. "Per descarbonitzar la mobilitat la solució és el cotxe elèctric. No hi ha marxa enrere", ha dit en un acte a Barcelona per presentar aquest pla juntament amb els consellers de Presidència, d'Economia, i d'Empresa, Albert Dalmau, Alícia Romero i Miquel Sàmper, respectivament. Un acto al que asistieron los principales representantes de la industria de la automoción en Catalunya, como el presidente de Seat y Cupra, Wayne Griffiths, el de Ebro, Pedro Calef, y el presidente del Clúster de la Industria la Automoción de Catalunya (CIAC), Sergio Alcaraz.
Un sector que ha recibido con satisfacción el plan del gobierno, como expresaba en una publicación en Linkedin el presidente de Seat y Cupra. "Catalunya acaba de dar un paso muy importante hacia el futuro de la movilidad", ha dicho Griffiths, y ha añadido: "estamos en un momento clave y nuestro país se juega mucho. No podemos poner en riesgo una industria tan importante para la economía y el empleo en España. La electrificación es el camino, y no hay vuelta atrás".
El Gobierno ha trazado una hoja de ruta, el Plan de Impulso en el Vehículo Eléctrico 2025-2030, para aumentar el parque de coches electrificados. Un plan que pretende movilizar a más de 1.400 millones de euros públicos y privados. Un plan que quiere descarbonizar el transporte, pero también un sector que en Catalunya factura más de 14.700 millones de euros, aporta un 7,9% del valor añadido bruto industrial y emplea a más de 35.000 personas. El plan quiere romper las principales barreras para acceder al coche eléctrico: precio, infraestructura de recarga y autonomía. Se trata de un plan con seis objetivos estratégicos, cinco ejes de actuación y veinte medidas concretas. Estos son los objetivos: llegar al 2030 con 150.000 matriculaciones de coches electrificados (120.000 eléctricos puros y 30.000 híbridos enchufables), 30.000 motos eléctricas y 9.000 nuevos puntos de recarga de tono0.
Estas son las principales medidas del plan:
Infraestructura de recarga
La compañía eléctrica L'Energètica jugará un papel importante en el despliegue de la infraestructura de recarga. El objetivo es que en la red troncal haya un punto de recarga cada 60 kilómetros. Para ampliar la red quiere movilizarse 380 millones. Una red que debe estar bien señalizada y ser de fácil usabilidad, de forma que pueda pagarse con tarjeta de crédito a todos los cargadores de acceso público. La Energética pondrá cargadores para la flota de la Generalitat, después los extenderá a todos los edificios públicos y, finalmente, asegurará que haya puntos de recarga en la red viaria donde no desplieguen las empresas privadas. Además, en la última fase, pondrá cargadores ultrarrápidos para autobuses interurbanos eléctricos, porque estas líneas son concesión de la Generalitat.
Los puntos de recarga públicos estarán bien señalizados y serán de fácil acceso y utilización para los ciudadanos. "No será necesario que seas un activista para cargar el coche eléctrico", dicen fuentes del Govern, en alusión a las dificultades actuales, que para acceder y pagar hay que tener los aplios de los distintos operadores. "Igual que puedes poner gasolina en cualquier gasolinera, aunque no tengas la tarjeta del operador, podrás cargar el coche eléctrico en cualquier punto de acceso público y pagar con tu tarjeta de crédito", indican las mismas fuentes.
Impulsar la demanda
El impulso de la demanda del vehículo eléctrico es el que va a consumir más recursos: 880 millones de euros. Aquí la Generalitat cuenta con las ayudas y bonificaciones fiscales que pueda realizar el Estado (en un futuro plan Moves o similar, ya que el anterior decayó cuando no se aprobó en el Congreso el decreto ómnibus). También existen medidas más concretas, como bonificar para los vehículos eco los peajes en las autopistas y túneles que son concesión de la administración catalana.
Dentro de este apartado, también se cuenta con electrificar la flota de vehículos de la Generalitat. Y para autónomos y empresas habrá dos líneas de crédito con interés bonificado por parte del ICF. Una línea de 200 millones de euros para autónomos y microempresas para comprar vehículos de hasta 60.000; y otra para empresas, por renovar sus flotas, de 240 millones de euros.
Industria, innovación y gobernanza
Por reforzar la cadena de valor de la industria del vehículo eléctrico, impulsar la innovación y la formación especializada, quieren movilizarse 135 millones de euros. Además, también quiere destinarse 10 millones de euros a mejorar la percepción social del coche eléctrico. "No ha hecho suficiente la administración para explicar los beneficios del coche eléctrico", indican fuentes de la Generalitat.
Para mejorar la gobernanza se destinarán otros 10 millones de euros, para establecer una mejor gobernanza dentro de la Generalitat –en el plan participan los departamentos de Empresa, Economía y Territorio de la Generalitat, además del Instituto Catalán de la Energía (ICAEN) y La Energética–, pero también para impulsar una gobernanza y colaboración. Y, finalmente, se quiere reducir la tramitación administrativa, después de la experiencia del último plan Moves, en el que las subvenciones llegan al usuario a veces un año y medio después de comprar el coche. El primer paso ha sido reforzar el ICAEN con 65 personas.