Elon Musk compra el 9,2% de Twitter y se convierte en el máximo accionista
Las acciones de la compañía se han disparado casi un 30% al saberse la noticia
El fundador de Tesla, Elon Musk, se ha convertido en el máximo accionista de Twitter después de anunciar que posee el 9,2% de la red social. Este movimiento ha disparado el valor de las acciones de la plataforma, que han aumentado un 29,4%, hasta llegar a los 50,87 dólares. El multimillonario, de acuerdo con el documento que ha entregado a la Comisión del Mercado de Valores de los Estados Unidos (SEC, en las siglas inglesas), actualmente tiene casi 73,5 millones de acciones de la compañía, que, después de la revalorización de este lunes, tendrían un valor de alrededor de 3.600 millones de dólares. Esto ha llevado a la SEC a concluir que Musk es “probablemente” el primer accionista.
Musk ha hecho este paso después de haber preguntado a sus seguidores la semana pasada: “¿Hace falta una nueva plataforma?” Este mensaje lo lanzó el día siguiente de hacer una encuesta en la que, previamente, afirmaba que “la libertad de expresión es esencial para que una democracia funcione” y a continuación pedía a los usuarios de la plataforma si creían que Twitter era una red social que la protegía. El 70,4% de los encuestados resolvieron que no.
Musk y sus juegos bursátiles en Twitter
El multimillonario lleva años jugando al límite de las regulaciones del mercado. De hecho, el 2018 Musk fue acusado de fraude y fue multado con 20 millones de dólares y obligado a dejar la presidencia de Tesla a consecuencia, justamente, de un mensaje publicado por él en Twitter. La SEC lo sancionó después de hacer un tuit donde anunciaba su intención de excluir la compañía de la bolsa tecnológica (Nadasaq) y aseguraba que pagaría 420 dólares por acción. Los valores de los títulos de la compañía subieron un 11% aquel mismo día después de que el fundador de Tesla sentenciara que la financiación estaba "asegurada".
Lo que la lista de Forbes situó como la segunda persona más rica del mundo también revolucionó el valor de las criptomonedas cuando el ocho de febrero del año pasado anunció que su compañía invertiría 1.500 millones de dólares en Bitcoin y aseguró que aceptarían la moneda como forma de pago de sus vehículos. En las horas siguientes del anuncio, el valor de la moneda electrónica aumentó un 12%, de 39.000 dólares a 44.000. La sorpresa, sin embargo, saltó tres meses más tarde, cuando se desdijo con un tuit que decía que les “preocupa el creciente uso de combustibles fósiles en el proceso de minería”. Y así volvió a crear el efecto dominó que surge después de cualquier anuncio que hace en la plataforma de la que ahora es el máximo accionista: la criptomoneda cayó un 10%.