Luz verde en la polémica planta Nueva Tracjusa de gasificación de residuos en Juneda
La cooperativa de ganaderos, asociada con Griñó, obtiene la licencia para empezar un proyecto de unos 10 M€


LleidaEl polémico proyecto Nova Tracjusa de Juneda (Garrigues), que pretende gasificar residuos urbanos como principal fuente de calor para secar el excedente de los purines de las granjas de cerdos, ha superado ya el último trámite administrativo. Tras recibir todas las autorizaciones medioambientales y urbanísticas, el Ayuntamiento le ha otorgado ahora la licencia definitiva de obras. El GAP, la cooperativa de 160 ganaderos de la comarca, asociada con el Grupo Griñó, puede empezar a ejecutar su proyecto.
Esta cooperativa invertirá unos 10 millones de euros para levantar una nueva planta que debería estar operativa en poco más de un año, de forma que pueda entrar en funcionamiento en el año 2026.
Tracjusa, que al mismo tiempo promueve también la optimización de su planta permiso– que valorizará anualmente 45.000 toneladas de residuos urbanos, conocidos como los CDR (combustibles derivados de residuos) para convertirlos en gas. La gasificación es un proceso termoquímico, como la incineración, pero utiliza poco oxígeno y transforma los compuestos orgánicos en un gas que se pretende aprovechar energéticamente. Es el gas de síntesis, que debe filtrarse para limpiarlo en un circuito que debería estar cerrado. Además, el calor que producirá este sistema permitirá secar a los purines para convertirlos en un fertilizante fácil de transportar y comercializar.
Aparte de que el tratamiento de residuos urbanos ha levantado duras críticas a los municipios de alrededor, una de las grandes críticas de los opositores es la posibilidad de que el sistema de gasificación empeore la calidad del aire de la comarca, actualmente bastante vulnerada por la intensa actividad agrícola y ganadera y por las condiciones meteorológicas del plan de Lleida.
Oposición municipal
Los últimos estudios del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) indican que en diciembre los niveles de nitratos, sulfatos, micropartículas, amonio, cloro y potasio en la atmósfera se disparan, en muchos casos por encima de los de Barcelona ciudad. Las nieblas persistentes de invierno hacen que compuestos y partículas queden atrapados. Pero los promotores de Nova Tracjusa aseguran que con la sustitución del actual sistema de cogeneración (que utiliza gas natural) por el de gasificación, "las emisiones de CO2 se reducirán en un 80%". En relación con las dioxinas y foráneos, uno de los principales temores de los opositores, los ganaderos aseguran que se mantendrán por debajo de los umbrales legales y mucho más por debajo de cualquier otro tipo de combustión.
En cualquier caso, más de una veintena de partidos han mostrado desde hace meses su rechazo explícito y han convocado para finales de este mes de marzo consultas populares para pedir la opinión de los vecinos y trasladarla a la Generalitat. Ante la concesión de la licencia de obras, las alcaldías opositoras prevén reunirse en las próximas horas "para analizar la conveniencia de mantener sus consultas o tomar acciones más contundentes", declaró el alcalde de Les Borges Blanques, Josep Farran, uno de los más activos en esta campaña.