Trifulga judicial en el seno del comité de sabios que deben salvar la economía alemana
Cuatro de los cinco miembros piden la dimisión de una experta que ha entrado en el consejo de Siemens Energy
BarcelonaMientras la economía alemana –la primera de Europa– sigue flirteando con la recesión, el consejo de sabios que asesora al gobierno de Berlín sobre cómo hacer frente a los retos económicos se desangra en una batalla que ha llegado a los tribunales. Lo explica este lunes el Financial Times, que informa que uno de los miembros del Consejo de Expertos Económicos, formado por cinco expertos, ha llevado a sus colegas ante los tribunales.
Este consejo de sabios debe presentar el 13 de noviembre su informe al canciller Olaf Scholz. Pero según explica el rotativo británico, Veronika Grimm, profesora de economía energética de la Universidad de Nuremberg, que forma parte de este consejo desde 2020, ha presentado una demanda contra los otros cuatro miembros del organismo por adoptar unas normas de transparencia contra su voluntad a principios de este año.
La profesora considera que las directrices sobre cómo tratar los conflictos de intereses no valen y violan sus derechos consagrados por la ley federal, según ha explicado una portavoz del tribunal administrativo de Wiesbaden en el Financial Times. Es decir, las discrepancias entre los miembros del consejo no están sobre la economía, sino sobre la ética en su funcionamiento. Pero las diferencias repercuten en su trabajo. "La disputa pública es muy perjudicial para la institución", declaró al Financial Times Volker Wieland, miembro de este consejo de expertos entre 2013 y 2022. "Socaba su credibilidad y obstaculiza una colaboración eficaz en un momento en que sería muy necesaria una evaluación crítica de las políticas económicas del gobierno", dice .
Fundado en 1963 por el entonces ministro de Economía de Alemania, Ludwig Erhard, este consejo ha sido clave en algunas de las principales políticas económicas del gobierno germano, como la reforma laboral de canciller Gerard Schröder el primer lustro de ese siglo.
Veronika Grimm, miembro de este consejo, entró a formar parte del consejo de supervisión de Siemens Energy, y entonces los demás miembros del consejo pidieron su dimisión del órgano consultivo del ejecutivo de Berlín. La demanda frente a los tribunales es el último paso de una escalada en este conflicto. Siemens Energy es una empresa privada que fabrica aerogeneradores y turbinas de gas, así como equipos para servicios públicos y redes.
Posible conflicto de intereses
La presidenta del consejo de expertos, Monika Schnitzer, y los otros tres miembros entendieron que la incorporación de la profesora Grimm en el consejo de supervisión de la compañía podía generar un conflicto de intereses, especialmente en el trabajo de los expertos en materia de transición energética y descarbonización. Los miembros del consejo pidieron a Grimm que dimitiera, pero ella ignoró estas peticiones. El encuentro llegó a los juzgados en julio, pero el tribunal de Wiesbaden aún no ha fijado una fecha para la vista.
Grimm argumenta que los miembros del consejo les nombra el presidente alemán y que la ley sólo prohíbe formar parte de ellos a los funcionarios del gobierno y los miembros de grupos de presión empresariales, patronales y sindicatos. Además, argumenta que otras personas que formaron parte del consejo habían estado en consejos de supervisión de empresas.