Ninguna normativa regula los límites de temperatura en el trabajo (excepto en las fábricas)
A partir de 28 ºC, los errores humanos crecen significativamente, según el Col·legi d'Arquitectes Tècnics
BarcelonaLas altas temperaturas pueden incrementar hasta un 10% la siniestralidad laboral, según un estudio publicado por el Col·legi d'Arquitectes Tècnics de Barcelona (CAATEEB) y elaborado con datos de todo el Estado por la empresa Estudi IS Global. Los accidentes más habituales son golpes de calor y quemaduras, mientras que los sectores más afectados son la agricultura y la construcción.
El CAATEEB destaca que varios estudios muestran que, a partir de temperaturas superiores a los 28 ºC, el número de accidentes derivados de errores humanos y actos inseguros crece significativamente, puesto que los trabajadores tienen más dificultades para concentrarse, descansan menos y sufren un retardo de la capacidad de respuesta. En España no hay ninguna normativa que regule las temperaturas mínima y máxima que debe haber en los centros de trabajo (excepto en las fábricas). Aun así, el gobierno español ha pedido a empresas y sindicatos que "revisen las condiciones de trabajo y los planes de prevención de riesgos laborales".
De hecho, en los últimos días ha habido dos muertos en España por causa directa del calor: en concreto, dos trabajadores perdieron la vida en Madrid el pasado viernes. La primera víctima, conocida este sábado, fue un empleado de 60 años del servicio municipal de limpieza de la capital española, que ingresó en el hospital con una temperatura corporal de 41,6 ºC. Aquel mismo día, un operario de 56 años de una nave industrial en el municipio de Móstoles, al suroeste de Madrid, también murió en el hospital, donde había entrado "en estado crítico" y con una temperatura corporal de 42,9 ºC.
La temperatura puede ser mortal, también fuera del trabajo. El 2021, murieron en España 1.298 personas por causas relacionadas con un "exceso de temperatura", según los datos del Instituto de Salud Carlos III de Madrid —dependiente del ministerio de Sanidad — una cifra que previsiblemente se incrementará como consecuencia del cambio climático. Según este organismo, entre el 10 y el 18 de julio se produjeron 510 defunciones por la ola de calor.
En este sentido, el CAATEEB recuerda que los episodios de altas temperaturas han dejado de ser ocasionales para pasar a ser cada vez más habituales durante los meses de verano, aparte de más largos e intensos. De media, la temperatura en Catalunya ha subido 1,8 grados desde el 1950.
Los servicios de prevención deciden
Ni Catalunya ni España tienen ninguna norma que prohíba la actividad laboral en el exterior a partir de cierta temperatura, ni tampoco en las oficinas. La norma catalana que sirve de marco para evitar accidentes al trabajo es la ley de prevención de riesgos laborales y permite que según la actividad se tomen unas medidas u otras, según explica Jordi Garcia, catedrático de derecho laboral de la Universitat de Barcelona. "Respecto al exterior no hay nada", indica, pero sí en el interior de factorías, donde se marca un límite máximo de 35 ºC.
Esto no quiere decir, sin embargo, que no haya ningún tipo de control. "Todas las empresas tienen unos servicios de prevención" que pueden ser internos o externos y que cuentan con "una parte médica", comenta Garcia. Es este servicio de prevención quien determinará "qué medidas se tienen que implementar" en cada empresa durante los episodios de temperaturas altas como la ola de calor que afecta Europa estos días, y que serán diferentes según las actividades. Por ejemplo, el calor no afecta igual a un trabajador del metro que puede estar sujeto a altas temperaturas, pero está permanentemente a cubierto, que a un jardinero, que trabaja bajo el sol gran parte de su jornada.