¿Cómo reducir el consumo de energía inmediatamente para hacer frente a la nueva crisis de precios?

Las autoridades recomiendan rebajar la demanda para depender menos de Rusia

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Una bombilla de bajo consumo.

La subida del precio de la energía, que ya se había generalizado en los últimos meses, se ha desbocado con el inicio de la invasión rusa de Ucrania. La UE ha impuesto sanciones a Rusia, pero son insuficientes porque Europa continúa comprando gas y petróleo rusos, de forma que continúa llenando las arcas públicas del gobierno de Vladímir Putin.

Es por eso que la Agencia Internacional de la Energía y la Comisión Europea piden a los usuarios que reduzcan el consumo energético en todo el continente. Estados Unidos ha prohibido directamente la importación de gas y petróleo rusos, pero la UE todavía no lo puede hacer. A pesar de que se ha propuesto reducir sustancialmente la dependencia de Rusia en los próximos meses, la acción que tendría un impacto más inmediato sería una rebaja generalizada del consumo por parte de ciudadanos y empresas.

¿Pero cómo se puede reducir el consumo energético? Hay que tener en cuenta que casi la mitad del consumo de energía que se hace en Catalunya se debe al transporte, por lo tanto este es un aspecto clave en el que se podría actuar. Además, tres cuartas partes de la energía que se consume en Catalunya son petróleo (46% del total) y gas natural (23%).

Dejando de lado medidas de eficiencia energética (mejorar los aislamientos, por ejemplo), concretamente estos son algunos consejos que podemos seguir de manera inmediata:

  • Reducir los desplazamientos en vehículo privado tanto como se pueda. En caso de que no sea posible, intentar agrupar el mayor número de gente en el mismo vehículo. Priorizar el transporte público y los desplazamientos a pie y en bicicleta.
  • Reducir el tiempo que pasamos en la ducha con agua caliente.
  • Rebajar el termostato de la calefacción uno o dos grados.
  • Vigilar el consumo de luz en las casas.
  • Reemplazar las bombillas tradicionales por bombillas LED o de bajo consumo.
  • Desenchufar el televisor cuando no lo estemos viendo. Hacer lo mismo con los aparatos eléctricos que no estemos utilizando.
  • Apagar el ordenador si no lo estamos usando. Si lo mantenemos en reposo continúa consumiendo una cantidad importante de energía.
  • No poner productos calientes en la nevera, el electrodoméstico que acostumbra a ser el gran consumidor de energía que tenemos en casa. Poner productos calientes hace que la nevera necesite más energía para mantener la temperatura.
  • Poner la nevera y el congelador a una temperatura menos fría.
  • No ventilar más de 10 minutos la casa cuando hagamos limpieza. Con este tiempo ya es suficiente para renovar el aire y así el hogar no se enfría en exceso.
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