Amal Clooney, la nueva víctima de la ira de Donald Trump (que podría ser expulsada de EE.UU.)
La abogada especializada en derechos humanos está casada con el actor George Clooney desde 2014 y tienen dos hijos en común
BarcelonaSufrir la ira donaldtrumpesca está a punto de dejar de ser noticia. Con los poco más de cien días al frente de Estados Unidos, el presidente naranja ha firmado tantos decretos ejecutivos como cosas o personas odia. Concretamente, durante los primeros cien días del mandato –el pasado miércoles– ha firmado 143 decretos, cifra que le convierte en el presidente estadounidense que más ha firmado de la historia del país en el simbólico período inicial del mandato. Evidentemente, pocas de estas –por no decir ninguna– han sido planteadas en positivo. Es decir, ninguna de ellas busca explícitamente mejorar nada en concreto, ni ayudar a nadie en especial ni proteger a algún colectivo en general. El planteamiento de la mayoría es amargar la vida a sectores sociales o grupos de personas que él odia, bien porque no puede hacer más o bien porque debe contentar a una enorme masa de votantes que odian tanto o más que él cosas y personas que no saben situar mentalmente en el mundo plural y cambiando en qué nos ha tocado vivir.
En medio de esta espiral infinita de odio en la que él y sus votantes han quedado enrocados, mientras arrasa todo tipo de políticas y derechos que la sociedad daba mayormente por aceptados y consolidados, le ha tocado el recibir a Amal Alamuddin, una abogada libanesa y británica de 47 años de 47 años marido: Clooney. Según el Financial Times, Amal Clooney –lleva ese apellido desde que se casó con el actor George Clooney en el 2014– ha sido advertida por el ministerio de Asuntos Exteriores del Reino Unido –junto a abogados de alto perfil– que podría ser objeto de sanciones por el asesoramiento que ofreció al Tribunal Penal Internacional (TPI) recientemente.
En la diana de Trump
Trump no pudo soportar que la abogada formara parte de un grupo de expertos que trabajó para el TPI analizando pruebas sobre supuestos crímenes de guerra cometidos tanto por líderes de Hamás como por altos cargos israelíes durante el actual conflicto en Gaza. A raíz de la actuación de Amal Clooney y del resto de abogados del panel, el actual primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el exministro de Defensa israelí Yoav Gallant recibieron órdenes de detención del TPI en noviembre del 2024. Como cabía esperar, la sanción a su sanción amigo Netanyahu provocó una respuesta vengativa de la administración Trump, que en febrero del 2025 –cuando sólo llevaba un mes al frente de EEUU– firmó un decreto para imponer sanciones al TPI y también a todos aquellos que colaboraran con sus investigaciones. Para los colaboradores del TPI, las nuevas medidas incluyen restricciones de entrada en EE.UU. y congelación de activos, entre más cosas.
Esto ha puesto bajo la lupa el destino de Amal Clooney, que actualmente reside parte del año en Estados Unidos con George Clooney y sus hijos gemelos, Ella y Alexander, de 7 años. de Occidente podría llegar a perseguirla. De hecho, su trayectoria en EEUU es larga, porque incluso estudió allí. master of laws en la escuela de derecho gracias al cual pudo ejercer de becaria del Tribunal Internacional de Justicia, órgano dependiente de Naciones Unidas. Amal, que obtuvo altísimas calificaciones y becas en su etapa estudiantil, también ha sido muy reconocida posteriormente, ya como profesional. De hecho, fue distinguida con el premio de Abogada Internacional del Año por Legal500 en 2024. Seguro que en la concesión pesaron su labor como abogada defensora de Julian Assange y de víctimas de ISIS. Pese a lo que estos logros podrían hacer pensar, Amal Clooney tampoco lo ha tenido todo tan fácil. Su familia tuvo que huir de Líbano en los años ochenta, cuando ella era pequeña, huyendo de la guerra civil. Se instalaron en el Reino Unido.
De Amal y George Clooney, que todavía no se han pronunciado sobre esta polémica, solo se sabe a estas alturas lo que ella dijo sobre ese trabajo en el TPI cuando lo acabó. "Formé parte de este grupo porque creo en el estado de derecho y en la necesidad de proteger las vidas de los civiles", expresó de forma sintética sobre el encargo, que acabó sirviendo para señalar tanto a líderes de Hamás como israelíes. Sin embargo, la orden ejecutiva firmada por Trump no demostraba precisamente satisfacción con aquel trabajo de Amal Clooney. Más bien al contrario, porque según expresó el líder republicano, el TPI emite órdenes de detención "infundadas" contra aliados de Estados Unidos -aka Israel– y actúa con "prejuicio".
Este choque frontal de Trump contra los abogados ha sido valorado de forma muy crítica en EEUU, donde algunos expertos señalan que es un hecho inaudito que el país sancione a abogados extranjeros por desempeñar su trabajo profesional ante tribunales internacionales, lo que podría contravenir incluso principios fundamentales de la ONU sobre el ejercicio de la abogacía. Pese a las dudas respecto a esta orden firmada por Trump contra Clooney, la decisión no necesita pasar por el Congreso para aplicarse. De hecho, si ella la recorriera, se seguiría aplicando.
A la espera de que la abogada o su marido se pronuncien, ahora mismo se desconoce en cuál de sus residencias vive estas turbulencias, porque el matrimonio reparte su tiempo entre EEUU, Reino Unido e Italia, donde pasan largas temporadas en Villa Oleandra, su mansión del llac. estilísticamente en las alfombras rojas y es una celebrity norteamericana muy aplaudida y querida, lleve la respuesta a este ataque a alguna noche glamurosa y tiñe de reivindicación política la velada. Esta mujer, que por su prestigio EEUU debería estar muy feliz que quiera vivir en ella, debe utilizar su poder de convocatoria por famosa, por glamorosa y por destacada profesional para alzar la voz contra la sobredosis de odio que Trump convierte en decretos para satisfacer sus fobias personales e intereses políticos y económicos. Si alguien puede acabar con la pátina de superficialidad que suele recubrir las alfombras rojas hollywoodianas y agitarlas para dar repercusión a temas realmente importantes es ella. A ver si tiene tiempo...