La reina Isabel II empieza el año con una despedida: pierde a su amiga Lady Farnham

BarcelonaLa reina de Inglaterra, de 95 años, está viviendo de cerca lo que significa llegar a una edad muy avanzada. Y es que ha perdido a una amiga muy cercana: Lady Farnham, que fue su asistente personal y miembro de la corte durante más de tres décadas. La difunta, que se llamaba Diana Maxwell, murió el miércoles a los 90 años, según ha informado ahora The Telegraph.

Maxwell pasó a ser asistente personal de Isabel II en 1987, y se convirtió así en un apoyo fundamental para la monarca durante mucho tiempo, hasta el punto de que se hicieron amigas personales. En algunas de sus imágenes más emblemáticas, podemos verla junto a los reyes de Inglaterra a la salida, detrás suyo, en las sesiones de apertura del Parlamento británico en el Palacio de Westminster, una de las tareas que incluía el puesto para el que fue designada por la monarca. También destacan momentos como los actos conmemorativos por el 60º aniversario de su reinado, que tuvieron lugar en 2012, después de que su marido, el duque de Edimburgo, fuera hospitalizado.

Fuentes próximas a la soberana aseguran al citado medio que su muerte ha sido "muy dolorosa" para ella, por la larguísima relación que habían tenido. Lady Farnham es una de las damas de compañía con las que la reina más solía pasear por los jardines de Windsor, explica The Telegraph. "Todo el mundo quería a esta mujer agradable, generosa y divertida", destacan sobre Diana, que estuvo casada con el banquero y duodécimo barón de Farnham, Barry Maxwell, muerto en 2001.

A principios de diciembre, la reina ya se despidió de otra de sus legendarias asistentes. En esa ocasión, la difunta fue la duquesa de Grafton, que murió a los 101 años después de pasar más de medio siglo apoyando a la monarca. Ann Fortune FitzRoy, su nombre de pila, vivió momentos tan importantes como la coronación de Isabel II, puesto que empezó a trabajar para la familia real británica en 1953, justo el año en el que empezó el reinado de Isabel II, el más largo de la historia del Reino Unido.

Además de ayudarla con los estilismos, la acompañaba en viajes de estado como los que hicieron a Nigeria, Francia o Rusia. En 1967 empezó a ocupar el puesto de más rango dentro de este grupo al ser elegida por la soberana señora de las túnicas. "La consecuencia de tener una vida larga es que, desgraciadamente, tienes que decir adiós también a muchos seres que te importan", señala el Telegraph sobre la situación actual de la monarca.