10 datos de Alemania que preocupan
El país ha sufrido una desaceleración económica mientras el sistema político está más fragmentado que nunca


BarcelonaAlemania ha sido históricamente el motor político y económico de Europa. Pero en los últimos años se ha extendido la sensación de que la que había sido la punta de lanza del Viejo Continente ha retrocedido en lo económico y que también podría retroceder en la esfera democrática. ¿Pero es realmente así? ¿Qué dicen los datos? Repasamos la evolución de los indicadores socioeconómicos de la Oficina Federal de Estadística, Destatis, y otras fuentes en la última década.
PIB
Si nos fijamos en la última década, el PIB de Alemania tocó techo en 2017, cuando registró un crecimiento del 2,7%. Con la pandemia, en 2020, cayó un 4,1%, pero se recuperó relativamente en 2021. Ahora bien, 2023 cerró en recesión, encadenando tres trimestres seguidos de decrecimiento. Y en el 2024 la economía alemana volvió a decrecer. Si excluimos el período de la covid, es la primera vez que el PIB alemán desciende dos años seguidos desde 2003.
Inflación
Los precios de todo tipo de productos han aumentado de forma muy considerable en los últimos años, sobre todo a consecuencia de la dependencia del gas ruso en el sector industrial y de las sanciones derivadas de la guerra de Ucrania.
Salarios
El salario medio de Alemania ha pasado de los 3.612 euros brutos en el mes de 2015 a 4.634 a mediados de 2024. Se trata de un incremento del 28,3% en términos nominales, es decir, sin tener en cuenta el impacto de la inflación. Pero si tenemos en cuenta la inflación, el incremento sólo es del 1,64%, con lo que el poder adquisitivo de los alemanes no ha aumentado considerablemente en la última década.
Vivienda
El precio de alquiler de un piso de obra nueva en el 2015 era de 8,51 euros en el metro cuadrado, mientras que el precio de las viviendas de segunda mano era de 6,96 euros en el metro cuadrado, según Statista. A finales de 2023, los precios habían crecido hasta los 11,87 y 9,83 respectivamente. Es decir, que en ambos casos han subido cerca de un 40%, sin tener en cuenta la inflación.
Energía
El alemán medio tiene la factura de la luz más alta de toda la Unión Europea, de casi 0,40€ el kWh. Sin impuestos, el precio ha pasado de los 0,13 en 2017 a 0,28 en 2024, un dato que supone un incremento del 115%.
Riesgo de pobreza
Si nos fijamos en el porcentaje, ahora existen menos alemanes que viven en riesgo de pobreza y exclusión social que hace 10 años. De hecho, esa cifra ha pasado del 16,7% al 15,5%. Pero en medio esta tasa se había reducido y cayó hasta el 14,8% en 2019, con lo que en los últimos 5 años sí ha registrado un crecimiento.
Demografía
El alemán medio es también más viejo que hace una década. Concretamente, la población en edad laborable ha caído 3 puntos (66-63%) desde 2015 y aunque la inmigración aumenta, el índice de natalidad se reduce. En 2015 cada mujer tenía de media 1,50 hijos, mientras que en 2024 la media era de 1,35.
Inmigración
La sociedad alemana es ahora mucho más diversa que hace una década. De los 83 millones de ciudadanos, 14,1 millones son de origen extranjero, otros 5 millones que hace una década. El número de solicitantes de asilo también ha crecido y son hoy 3 millones. En 2015 y 2016, Alemania recibió más de un millón de solicitudes de asilo por la política de acogida de sirios capitaneada por Merkel. Y aunque el ritmo ha disminuido desde entonces, en el 2022 las demandas de asilo casi se doblaron respecto al año anterior.
Pensamiento
Ideológicamente, el alemán medio también se ha radicalizado. Según una encuesta del popular think tank Pew Research Center, en 2024, el 19% de los alemanes tenían una visión favorable de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), mientras que hace 5 años sólo tenía una visión favorable un 14% del censo. Por el contrario, los partidos tradicionales han perdido popularidad. El Partido Socialdemócrata (SPD) del canciller Olaf Scholz, por ejemplo, ha sufrido un bajón muy considerable, pasando del 67%, en el 2022, al 39% en el momento de la encuesta. La CDU también ha perdido 6 puntos de popularidad respecto a 2016, mientras que los liberales del FDP han caído casi 20 puntos en sólo una legislatura.
Partidos políticos
El escenario de partidos en Alemania está más fragmentado que nunca. Los partidos tradicionales (CDU y SPD) nunca habían tenido tan poca fuerza, mientras que en una sola década han irrumpido y se han consolidado nuevos actores como Die Linke, FDP, AfD o la reciente BSW. AfD entró por primera vez en el Bundestag en 2017 con 94 escaños, y un 11,5% del soporte. Sin embargo, los siguientes comicios en 2021 sólo obtuvo 84, es decir, el 10,2%. Las encuestas ahora le auguran un 22%.