Macron propone un nuevo formato europeo para aproximar Ucrania a la UE

Dortmund (Alemania)El 9 de mayo es un día lleno de simbolismo político. Desde 1945 Rusia conmemora el Día de la Victoria soviética sobre la Alemana nazi. Pero también en esta fecha, en recuerdo de la declaración fundacional de la integración política y económica del continente que pronunció en 1950 Robert Schumann, exministro francés de Exteriores, los europeos celebran el Día de Europa. Este lunes ni ha habido victoria de Putin en Ucrania ni Europa está en paz ni entera. Pero el presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha propuesto otro gesto cargado de simbología: la creación de una “comunidad política europea”.

Se trataría de una confederación de estados que sería más extensa que la UE y que, según Macron, “aseguraría el futuro y la estabilidad de nuestro continente” en tiempos difíciles.

El presidente francés ha anunciado este plan en Estrasburgo, en la sede del Parlamento Europeo, y pocas horas después lo ha defendido en Berlín, donde ha hecho su primera visita oficial al extranjero desde que ha arrancado su segundo mandato en el Elíseo. Al recibirlo, el canciller alemán Olaf Scholz ha calificado la idea de Macron “de interesante”, si bien ha insistido que esta propuesta no tiene que ir en detrimento de otros procedimientos de integración ya en curso en la Unión Europea como por ejemplo el de Macedonia del norte. “La valentía que los partidarios de la UE han reunido allí también tiene que ser recompensada oportunamente”, ha precisado el líder del gobierno de Berlín.

Europa y su renovación. Este es el primer punto del programa de Macron después de su reelección. A pesar de que no ha podido dar más detalles, el presidente francés, que ahora también es el presidente de turno del Consejo Europeo, ha dejado claro que su propuesta de una nueva comunidad política está abierta en los países que han salido de la UE, en alusión al Reino Unido, y a los que están presionando para entrar, pero que tardarían “quizás décadas” a ser admitidos, en referencia a Ucrania.

“Tenemos que construir una nueva forma política, y no solo jurídica, que nos permita incorporar en Europa a los países que comparten estos valores europeos”, ha destacado Macron desde Berlín. El líder del Elíseo ha postulado que se necesita un formato político que aporte nuevas formas de solidaridad y coopere con países como Ucrania que no pueden ser admitidos en la UE tan rápidamente.

Eje franco-alemán por la paz en Ucrania

Macron ha subrayado junto con Scholz que el eje franco-alemán quiere dar “un nuevo impulso” en Europa. “La amistad entre Francia y Alemania es, como motor, más importante que nunca”, ha remarcado el canciller alemán. “El espantoso ataque de Rusia en Ucrania une a los socios europeos y se trata ahora de actuar juntos. Ucrania pertenece a la familia europea”, ha insistido.

Los dos líderes han coincidido que hay que replantear la política de defensa y limitar la dependencia europea de los combustibles fósiles procedentes de Rusia. Macron y Scholz han subrayado, a la vez, los pasos por hacer hacia la paz. En este sentido, el canciller ha señalado que es “importante que ahora se impulse una desescalada, al menos en cuanto a la retórica”. Lo ha dicho en referencia al discurso de Vladímir Putin, que en el desfile militar en Moscú ha dicho que la intervención rusa en Ucrania es necesaria porque “Occidente preparaba una invasión en nuestro territorio histórico”.

Macron ha coincidido que tampoco ha detectado adelantos en el discurso de Putin: “Lo que queremos conseguir es un alto el fuego, cuanto antes mejor. Esta es la única manera de concluir las negociaciones entre Ucrania y Rusia para conseguir la paz y, posteriormente, la retirada permanente de las tropas rusas”.

A iniciativa de la presidencia francesa del Consejo Europeo, durante la noche de este lunes se han iluminado numerosos lugares emblemáticos con los colores de la bandera ucraniana como muestra de solidaridad. En París, la Torre Eiffel. En Berlín, la Puerta de Brandeburgo, donde se dejaron ver juntos Scholz y Macron para remarcar el simbolismo de un 9 de mayo en plena guerra en Europa.