Muere en un atentado cerca de Moscú la hija de un aliado de Putin
Daria Dugina murió cuando una bomba estalló al paso de su coche
BarcelonaDaria Dugina, hija de un aliado próximo del presidente ruso, Vladímir Putin, fue víctima de un atentado cuando una bomba estalló al paso del vehículo que conducía en una carretera cerca de Moscú. Su padre, Aleksandr Dugin, es un filósofo ruso ultranacionalista partidario de la intervención rusa en el este de Ucrania. Según el CIR, la explosión se produjo el sábado por la noche hacia las nueve de la noche, hora de Moscú (las ocho de la tarde en Catalunya).
Se cree que el objetivo de la acción era Aleksandr Dugin, conocido como "el cerebro de Putin", porque ha sido uno de los ideólogos más influyentes en la política del Kremlin en los últimos años. Padre e hija habían asistido como invitados de honor a un festival cultural, donde el filósofo hizo una conferencia. Los dos tenían que volver del evento en el mismo coche, pero Dugin decidió trasladarse por separado a la capital rusa. Los investigadores han confirmado que un artefacto explosivo estalló y que después el coche de Daria se incendió.
Si bien Dugin no es un funcionario del Estado, sí que es una figura simbólica de la política rusa. Su filosofía ultranacionalista y antioccidental se ha convertido en la ideología política dominante en Rusia y ha espoleado la política exterior expansionista del presidente Putin, sobre todo en Ucrania. Ahora, la atención se dirige a quién está detrás este ataque. Denis Pushilin, el líder de la autoproclamada república popular de Donetsk, prorrusa, ya ha culpado al Gobierno de Kiev. "En un intento de eliminar a Aleksandr Dugin los terroristas del régimen ucraniano han matado a su hija", ha escrito en Telegram. Por su parte, el senador ruso Andrei Klishas ha calificado el atentado de "ataque enemigo" y ha pedido llevar a la justicia a sus autores materiales e intelectuales.
Incidentes como este encienden los nervios de los funcionarios de Moscú, sobre todo a raíz de la serie de explosiones y ataques en la península de Crimea y en las regiones rusas próximas a la frontera con Ucrania. Hasta ahora, la propaganda del Kremlin ha subrayado constantemente que Putin ha llevado la seguridad y la estabilidad en Rusia después de los turbulentos años noventa, cuando los coches bomba y los asesinatos eran habituales. Este atentado en la capital rusa ha cambiado el escenario.
Kiev niega el ataque
Mijailo Podoliak, un asesor del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha negado este domingo, en declaraciones televisadas, que Kiev esté implicada en el atentado. "Recalco que Ucrania no tiene nada que ver con esto, porque no somos un estado criminal como la Federación Rusa ni somos un estado terrorista," ha afirmado.
Podoliak ha añadido que Rusia ha empezado a "desintegrarse internamente" y que varios grupos políticos están empezando a enfrentarse en una lucha por el poder. Como parte de esta redistribución ideológica está creciendo la "presión informativa" sobre la sociedad y se está usando la guerra en Ucrania como vía de escape, mientras que los sectores nacionalistas se están radicalizando todavía más.