Trump anuncia la movilización de dos submarinos nucleares en una escalada con Rusia
El presidente responde así a la amenaza nuclear lanzada por Medvedev y después de que Putin avise de que no cederá al ultimátum de Washington
Washington / MoscúDonald Trump ha movilizado a dos submarinos nucleares "para que se les posicione en las regiones apropiadas" cerca de Rusia, en una nueva escalada de tensiones a raíz del ultimátum del presidente estadounidense en Moscú para que llegue a un acuerdo para detener los combates en Ucrania. El mandatario lo ha anunciado a través de una publicación en Truth Social, en la que asegura que la decisión responde a las "estúpidas e inflamatorias declaraciones" hechas ayer por Dmitri Medvedev, vicepresidente del Consejo de Seguridad de la Federación Rusa. Medvedev recordó en Washington que Moscú es una potencia nuclear. "Las palabras son muy importantes ya menudo pueden conducir a consecuencias no deseadas, espero que ésta no sea una de esas ocasiones", ha escrito hoy el republicano, en una nueva muestra del enfriamiento de la relación con Rusia.
Todo empezó el jueves con la respuesta de Medvedev a la amenaza hecha por Trump con aplicar aranceles punitivos en Rusia ya sus compradores de petróleo. El expresidente ruso advirtió al republicano que se estaba adentrando en "un juego de ultimátums" y que, de hacer efectiva esta medida, estaría un paso más cerca de la guerra con Rusia. Trump dijo a Medvedev que vigilara sus palabras, y éste se volvió poniendo sobre la mesa la capacidad nuclear rusa.
Trump añade presión cuando está previsto que en las próximas horas la Casa Blanca haga un último intento por convencer al presidente ruso, Vladímir Putin, de que se siente a negociar. El su enviado especial, Steve Witkoff, tiene previsto viajar a Rusia durante el fin de semana después de que este viernes haya visitado a Gaza. Se trata del principal interlocutor entre Trump y Putin, al que ya se ha reunido con el ruso en dos ocasiones. La última vez, a finales de abril, se presentó en Moscú con una propuesta de paz bajo el brazo que incluía el reconocimiento de Crimea, la no adhesión de Ucrania a la OTAN y la congelación del frente en la situación actual. Pero Putin la rechazó.
El jueves el secretario de Estado, Marco Rubio, informó de que a principios de semana habían mantenido conversaciones con personas "del círculo íntimo" del presidente ruso a fin de explorar vías de acuerdo. Sin embargo, en una entrevista en Fox News lamentó que, desde entonces, no había habido "ningún progreso".
Putin deja claro que no cederá al ultimátum
Horas antes de la amenaza nuclear de Trump, Putin había respondido por primera vez personalmente a los ultimátums de su homólogo estadounidense. Pese a no llamarle, le ha querido dejar claro que no se arruga, que las negociaciones deben llevarse a cabo al ritmo que marca el Kremlin y que la condición de Rusia por la paz es la capitulación de Volodímir Zelenski. "Nuestros objetivos, sin duda, siguen siendo los mismos", ha dicho.
El líder del Kremlin considera que Trump se ha fijado unas "expectativas excesivas" y que éste es "el motivo de cualquier decepción". Por eso pide "calma y silencio" para abordar las conversaciones. Recuerda que en la última reunión entre las delegaciones rusa y ucraniana, Moscú propuso la creación de tres grupos de trabajo que se comunicarían online y que éste debe ser el camino. "Necesitamos una conversación profunda, sin cámaras, no en público", aseguró.
Desde una isla cerca de San Petersburgo, acompañado del presidente bielorruso, Aleksandr Lukashenko, ambos vestidos con camisa y vaqueros, en un ambiente distendido, Putin ha repetido que el gobierno de Kiiv no es legítimo y que está dispuesto a discutir un acuerdo tras unas elecciones. "Si creen que no es el momento de negociar, Moscú puede esperar", añadió, al tiempo que se mostró confiado en que las conversaciones continuarán.
Zelenski ya le ha respondido que si sus palabras son "serias" y pretende "poner fin a la guerra con dignidad y establecer una paz verdaderamente duradera", y no está intentando "comprar" más tiempo y "retrasar" las sanciones, entonces lo que debe hacer es abrirse a una cumbre al máximo nivel. "Ucrania llama a ir más allá del intercambio de declaraciones y las reuniones técnicas, ya pasar a las conversaciones entre líderes", apuntó.
Ahora bien, Putin, al tiempo que hablaba de paz, reiteraba los argumentos para no detener los combates. Su prioridad, dice, sigue siendo "erradicar las causas que dieron lugar a la crisis", es decir, conquistar por completo los territorios ucranianos ocupados y garantizar la neutralidad de Ucrania. También quiso remarcar que las tropas rusas avanzan en todos los frentes, pese a los intentos occidentales de detenerlas. Reivindica que su ejército ha conquistado a la población de Chasiv Iar, en Donetsk, después de meses de lucha intensa y de bombardeos que le han dejado arrasada. Por contra, Ucrania niega que los soldados rusos se hayan apoderado del control del municipio.
Durante la conversación con los periodistas, el presidente ruso ha sacado pecho de haber dado el pistoletazo de salida a la producción "en masa" de misiles Orejnik, un arma de largo alcance que se considera la joya de la corona del ejército ruso. Todo ello al día siguiente del devastador ataque aéreo contra un edificio residencial de Kiiv en el que, según el último balance, murieron al menos 31 personas, incluidos cinco niños, y más de 150 personas resultaron heridas.