Ayuso sonríe (pero afila los cuchillos)

La prensa favorable al PP –es decir, casi toda en España– tiene las aceiteras funcionando a toda prisa desde hace días, para transmitir la idea de que el futuro congreso del partido será una balsa de aceite para el partido. Aunque la decisión de celebrarlo se tomó a espaldas de los varones territoriales, enseguida los escribanos habituales aseguraron que los líderes autonómicos estaban extáticos de alegría por la decisión. Hoy La Razón pone una buena dosis de jabón en la portada: "Feijóo se proyecta en la Moncloa con el lema «haré lo que prometa»". Y lo que promete, según indica el subtítulo, es una "limpieza profunda del sanchismo". No hay proteína, en esta noticia, sólo el deseo íntimo de poner Moncloa y Feijóo en una misma frase.

Pero, ¿es realmente todo tanto color de rosa, en este Shanadú del PP? La portada deEl Mundo sugiere que hay rendijas en este anuncio permanente de Norit, cuyo subtítulo es una citación de Isabel Díaz Ayuso: "Un proyecto para España debe ser algo más que echar a Sánchez. Tiene que ilusionar". Es sabido que la capacidad de generar entusiasmo de Feijóo es similar a la de un mejillón de roca, así que la presidenta madrileña ataca por el flanco populista, que es donde más le duele. Nada hace pensar que Ayuso le dispute el liderazgo... de momento. Sí que lo hizo cuando Casado embarrancó el partido y entonces todos los diarios de la derecha la trataban de presidenta a secas, sin especificar que lo era de Madrid. Ahora hay menos ruido de timbales, pero este subtítulo sugiere, en mi opinión, que a Feijóo se le está concediendo una última oportunidad. Y que si fracasa, suya será la responsabilidad y suyas también las nalgas donde se estampará la suela del zapato de Ayuso, pidiendo paso. Auguro unas semanas previas al congreso con titulares que no serán de daga mortal, pero sí de pequeños dardos.