"El amor va de compartir, no de sacrificarse"

Las últimas personas de las que Patricia Illa se ha enamorado, explica la psicóloga, han estado de fuera de Catalunya. “Creo que se debe a que me gusta estar en contacto con culturas y lenguas nuevas; me estimula a que me expliquen cosas diferentes”, dice. A Pate, que es de madre francesa y padre senegalés, le conoció a través de un amigo. “Hacía días que me avisaba de que vendría de visita. «Seguro que te gusta, me decía»”. Y no sólo le gustó, sino que se enamoró. Empezaron una relación a distancia y finalmente fueron a vivir juntos a Barcelona. “Es una persona muy atractiva y muy inteligente con la que comparto la forma de ver el mundo”.

Por su profesión, sexóloga y psicóloga especializada en terapia de pareja, Illa ha aprendido unas cuantas cosas sobre el amor y las relaciones. "Hay una manera de amar bien y para cada uno puede ser diferente", dice. Aun así, existen ciertos elementos que propician un amor más o menos feliz. “Creo que amar tiene mucho que ver con revisar y desmontar los mitos del amor romántico, mitos como que el amor duele o que debemos buscar una media naranja o alma gemela. Querer bien implica cuidarte a ti misma para poder compartir con las demás personas y cuidarlas también”, reflexiona.

Otro aspecto que añade dificultades a las relaciones, reflexiona, es el hecho de “poner a la pareja en el centro de tu vida”, por encima de las amistades o de una misma. "El amor va de compartir, no de sacrificarse", subraya.

Isla afirma que es una lástima que en la escuela no se hagan “clases de gestión emocional” que den herramientas para identificar qué sentimos o cómo comunicarnos con asertividad y sin agresividad. “Soy de las que creo que no hay personas o relaciones tóxicas; hay dinámicas que no funcionan y que pueden trabajarse”. Especialmente en el caso de las personas que socializan como hombres, dice la psicóloga, hay mucho trabajo por hacer en la apertura emocional. "Si no se quitan la coraza, difícilmente podrán acercarse emocionalmente a los demás", argumenta.

Isla, que trabaja sobre todo con gente joven, explica que las consultas más recurrentes en terapia giran en torno a la diversidad relacional. "A los jóvenes les interesan mucho las diferentes maneras de relacionarse que hay más allá de la monogamia: relaciones abiertas, poliamor, anarquía relacional… Una de las consultas más habituales es cómo abrir la relación", detalla. “En general, tanto los jóvenes como el colectivo LGBTIQ+ están buscando nuevas formas de relacionarse en las que mejor encajen, huyendo del patriarcado o de los mitos del amor romántico. Definitivamente, el concepto de familia y pareja está cambiando”, concluye.