El análisis de Antoni Bassas: 'El PP y la podredumbre de la democracia'

Una de las señales de cómo la vida política española ha podrido las estructuras de la democracia es la prueba que vamos a hacer ahora. Les comentaré una noticia grave, pero ustedes la oirán y pensarán: “¿Dónde está la noticia? Si esto ya nos lo podíamos imaginar”. Hoy publicamos que la policía investigó diputados de Podemos por orden del gobierno de Rajoy. O sea, el gobierno del PP, sin que ningún juez lo pidiera, hizo un rastreo masivo de las bases de datos policiales para investigar cualquier rastro estirable de la vida de 69 diputados de Podemos. En las búsquedas ponían conceptos como hoteles, joyas, viajes en avión o viajes en barco. Ahora esas búsquedas y conversaciones entre policías ya están en manos de un juez de la Audiencia Nacional. ¿Veremos a alguien, quiero decir, un jefe policial o un ministro del Interior o el propio Rajoy, procesado, condenado o en prisión por esta práctica propia de la policía de la dictadura? No se admiten apuestas, que la respuesta es demasiado fácil.

La cuestión era ensuciar a Podemos, a los que temían por comunistas, al igual que la cosa ha sido hasta hace un par de días ensuciar independentistas. Recuerden la imputación por terrorismo por las protestas del Tsunami. Y que ahora se ha caído porque un juez se ha descontado de los días. Una de dos, o era mentira o era terrorismo y entonces es monstruoso que un juez deba cerrar la causa por un defecto de forma. Naturalmente, la respuesta correcta es que el terrorismo era inventado. La cuestión era ensuciar e impedir la amnistía.

Esta mañana, Puigdemont replica un artículo de Pablo Iglesiasy dice que “hace tiempo que en España existe una especie de golpe de estado híbrido. Desde instituciones e instrumentos de la democracia -poder judicial, fuerzas policiales- se está actuando al margen de la ley. Como no son guardias civiles entrando en el Congreso con la metralleta en la mano, el golpe de estado no es percibido como tal. Pero el resultado es el mismo: subvertir las decisiones del Parlamento, intervenir en el funcionamiento de las instituciones del Estado”.

Por eso ya no hacemos mucho caso de informaciones como esta. En España, que la policía investigue a rivales políticos el gobierno del PP lo normalizó. Y lo peor es que la respuesta judicial es lenta, si hay respuesta. Éste es el marco en el que nos movemos, por desgracia.

Mientras, Esquerra y PSC siguen intercambiándose muchos papeles. Juntos cree que las conversaciones con Esquerra tampoco van mal. No perdamos de vista el escenario negociador del Parlament, porque hoy la cámara, con el voto del PSC y los Comunes, ha reformado el reglamento y ha aceptado el voto telemático, por internet, de los diputados en el extranjero. Esto significa que Carles Puigdemont y Lluís Puig podrían votar a distancia. Esta reforma estaría en vigor el 25 de julio. Pero ya saben que si hay debate de investidura, Puigdemont cuenta con votar presencialmente, sentado en su escaño del Parlament. Tendremos un verano movido.

Buenos días.