Evite el aval ICO para la vivienda

Esta semana nos hemos despertado con una nueva medida que afecta a la demanda de vivienda. En concreto, hablamos de los avales del ICO para el 20% de la entrada de una nueva casa. Aunque puede parecer muy interesante, es necesario conocer muy bien sus consecuencias. Y como consejo: evítelos.

En primer lugar, un aval no quiere decir que te regalen el dinero, simplemente que el Estado te lo presta y se pone a sí mismo como garante (es decir, a todos los que pagamos impuestos) en el caso de que no lo puedas devolver. Por tanto, en la práctica, estás pidiendo dos préstamos: tendrás la cuota de la hipoteca del 80% del piso y la cuota de préstamo del 20% hacia el ICO.

Dicho de otro modo, tendrás un préstamo para el 100% del valor del piso. Si hace memoria, esto ya ocurría quince años atrás por parte de los propios bancos (de hecho, hasta el 120%) y, ¿cómo acabó? Ahora, en vez de los bancos, te los garantizamos entre todos.

Además, tu riesgo no mejora cara al banco, ya que no puedes aportar fondos propios para la compra de la vivienda. Hoy en día ya existían bancos que ofrecían hipotecas hasta el 95% para el público joven, pero claro, a un mayor tipo de interés. Con o sin aval, pagarás más interés por tu hipoteca que si aportaras el 20% de entrada.

Y finalmente, ¿qué pasa si la persona del préstamo no puede pagarlo en cualquier momento? Que vamos a pagar la parte restante entre todos. Recuerde, que sea público, no significa que sea gratis. Esta medida no es la primera vez que se aplica en otros sectores. Durante la pandemia fueron las empresas las que recibieron estos avales. Hoy, según el Banco de España, nos ha costado ya 6.000 millones a los contribuyentes por impagos.

El problema de la vivienda no es de demanda, el grave problema es de oferta. Sólo se aplican medidas de corto plazo que no afrontan el problema real. De verdad, evite los avales del ICO.