El gobierno español supera el primer trámite de los presupuestos con el debate sobre la sedición de fondo

MadridEl gobierno español quiere desvincular la negociación sobre la reforma del delito de sedición de la tramitación de los presupuestos, que hoy ha superado el primer trámite con el rechazo a las enmiendas a la totalidad, pero hoy ha sido la propia ministra de Hacienda, María Jesús Montero, la que ha hecho referencia a esta cuestión en el Congreso de Diputados en su respuesta al diputado de ERC Joan Maragall. Montero ha recordado el "compromiso firme" del presidente del gobierno, Pedro Sánchez, para "homologar con estándares europeos la calificación de determinados delitos", y ha añadido: "Lo llevaremos a esta cámara, que soberanamente tendrá que decidir sobre esta cuestión". La ministra se ha visto obligada a matizar después estas palabras, de las que se podía inferir que ya hay una decisión tomada para llevar el proyecto al Congreso, y a insistir en que no hay ningún cambio respecto a la postura oficial del PSOE, que es que no hay todavía una mayoría suficiente. Pero en todo caso es la muestra de que la reforma de la sedición marca en estos momentos todo el debate político español.

De hecho, desde Suráfrica, el presidente español, Pedro Sánchez, ha dicho en una conversación con periodistas que antes de llevar la reforma a la cámara habría que tener asegurado que ERC la apoyará y también ha dejado caer que los republicanos tendrían que asumir que en 2017 se cometieron delitos. Sánchez, por lo tanto, no se aparta del guion del PSOE, que consiste en decir que quieren hacer la reforma, pero insisten en que no hay mayoría para hacerlo. ¿Pero es cierto que no hay mayoría? Pues es difícil mantenerlo porque ERC ya ha dicho que está dispuesta a negociar una rebaja de las penas del delito, igual que el resto de socios de investidura. El portavoz republicano, Gabriel Rufián, ha dicho hoy mismo que su formación está a favor de hacer "lo más homologable posible al entorno europeo" el Código Penal.

Lo cierto es, sin embargo, que esta cuestión inquieta mucho a algunos barones del PSOE, como el aragonés Javier Lambán o el castellanomanchego Emiliano García Page, que se juegan la reelección en las elecciones autonómicas de mayo. El propio Page ha sido muy contundente hoy mismo y ha declarado que Puigdemont se tendría que someter a los tribunales antes de "hablar seriamente sobre la reforma de la sedición".

Negociaciones CGPJ

También hay miedo en el PSOE de que la reforma de la sedición afecte a las negociaciones sobre la renovación del CGPJ con el PP. El líder de los populares, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado hoy que si llega a la Moncloa "agravará" las penas de sedición y de rebelión, y también tipificará como delito la "mera convocatoria" de un referéndum.

"La simple convocatoria de un referéndum ilegal tiene que tener una sanción clara y contundente en el Código Penal de la democracia española", ha afirmado en un acto sobre juventud en Santander. Ahora bien, el líder popular ha evitado vincular la negociación sobre la renovación del CGPJ, que está en la "recta final", según fuentes de la negociación, con la reforma de sedición. "Necesitamos saber si el gobierno está dispuesto a proteger la democracia o solo a sobrevivir como gobierno", se ha limitado a decir.

Rechazo a las enmiendas a la totalidad en los presupuestos

Como decíamos, el Congreso ha rechazado hoy las enmiendas a la totalidad presentadas en el proyecto de presupuestos por parte de PP, Vox, Cs, Juntos y la CUP, entre otras, por 186 votos en contra, 159 a favor y 3 abstenciones. ERC ha votado junto a los grupos que apoyan al ejecutivo y ha reafirmado así su apuesta por la vía negociadora. Durante el debate, y al contrario de lo que pasó ayer con la portavoz de Junts, Míriam Nogueras, ha habido sintonía entre la ministra y el diputado de ERC. Margall ha agradecido la disposición de Montero a estudiar un mecanismo de garantía sobre la ejecución de las inversiones en Catalunya similar al que funciona en el País Vasco. El diputado republicano, por cierto, lo ha aprovechado para lanzar un dardo a Junts recordando que "no negociar los presupuestos no hará caer la monarquía".

Por su parte, la ministra ha dicho que comparte la "frustración" que provoca la ejecución tan baja de las inversiones que sufre Catalunya porque "cuando se pone un dinero a los presupuestos es para que se ejecute, y no para que se tenga que trasladar a los siguientes y así sobrecargarlos". La ministra también ha subrayado, a pesar de que no hay ninguna partida para ello en los presupuestos, la importancia que tendrá para Catalunya el proyecto de construir un gasoducto por hidrógeno verde que unirá las ciudades de Barcelona y Marsella.