Ayuso ya pone deberes al resto de 'barones' del PP
No descarta gobernar con Vox mientras Casado da por muerto a Cs y desafía a Sánchez a un duelo político
MadridEl PP tiene una nueva reina y se llama Isabel Díaz Ayuso. La dirección del partido y buena parte de los barones le han rendido este miércoles homenajeo en un comité ejecutivo de urgencia para celebrar la amplia victoria en las elecciones madrileñas. El escenario no podía contrastar más con el de hace casi tres meses, cuando Pablo Casado compareció después de los resultados nefastos de las elecciones catalanas –donde solo sacaron tres diputados– e intentó pasar página al batacazo con el anuncio de la venta de la sede de la calle Génova, desde donde el martes se celebró a golpe de DJ y sin distancia de seguridad el triunfo de la estrategia de Ayuso. El líder del PP ha comparecido exultante, dando por muerto a Ciudadanos y desafiando al presidente español, Pedro Sánchez, a convocar ya un debate de política general para rendir cuentas en el Congreso. “Volvemos a ser el gran partido de España”, ha asegurado, y se ha rendido a la fórmula del ayusismo y lo ha reivindicado como el “PP de siempre” porque “Isabel es puro PP”.
Pero la presidenta madrileña no ha tenido problemas en continuar luciendo perfil propio ante toda la dirección del PP. Es más, ha recomendado su receta al resto de barones territoriales del partido, reivindicándose como un modelo a seguir. “Creo que tenemos que intentar que esta ilusión no pare y quiero que esta ilusión continúe por toda España”, ha dicho poniendo deberes al resto de líderes territoriales porque esto “ya es una misión nacional para todos los compañeros”. A pesar de las reticencias de otras comunidades gobernadas por el PP como Galicia y Andalucía sobre el modelo de Madrid, este miércoles tanto el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, como el andaluz, Juanma Moreno, han aplaudido los resultados. “Una palabra es suficiente: espectacular”, ha dicho Feijóo, según fuentes del partido. “Estamos en el buen camino”, ha añadido en la misma dirección Moreno. Queda la incógnita de si Génova intentará repetir la fórmula madrileña en Andalucía con la convocatoria anticipada de elecciones.
Casado se ha hecho enseguida suya la victoria. Con un largo discurso cargado de euforia, ha pronosticado que la coalición de Sánchez está tocada de muerte pero no ha pedido un adelanto electoral como sí está haciendo Vox desde hace meses. En cambio, ha reclamado un debate de política general, que no se celebra en el Congreso desde febrero del 2015, cuando Mariano Rajoy todavía gobernaba con mayoría absoluta. A pesar de que no es una práctica recogida en la Constitución, desde el 1983 todos los presidentes han tenido la costumbre de rendir cuentas con un largo debate en el Congreso. Pero la política acelerada de los últimos seis años, con repeticiones de elecciones, investidures fallidas, largos periodos en funciones, una moción de censura y sucesivos estados de alarma, ha arrinconado este debate.
“De la moción de Murcia a la emoción en Madrid. Ha acabado porexplotar una bomba en Ferraz”, ha señalado el líder del PP, que extrae como segunda lección del 4-M "la clara unificación de las siglas del centro y de la derecha entorno al PP”. En la práctica, como destacaban ya fuentes populares el martes, que la derecha pase de tres marcas a solo dos con la desaparición de Ciudadanos. “No me alegro por ellos. Llevamos dos años intentándolo hacer de la manera más coordinada”, ha alegado Casado después de haber lanzado una opa hostil a los naranjas después de la convocatoria electoral de las madrileñas, sobre todo con el fichaje de Toni Cantó.
Vox ha sido el partido que tanto Ayuso como Casado han evitado mencionar durante las intervenciones en abierto. Pero hay discrepancias en este punto: mientras que el equipo de Casado ha insistido durante todo el día en que Ayuso formará un gobierno monocolor, la presidenta madrileña no ha descartado incorporar “fieles” de Vox y Cs a su equipo. El líder de la extrema derecha, Santiago Abascal, ha dicho que no cerraban la puerta a entrar en el ejecutivo pero que esperan primero una propuesta de la presidenta madrileña. A pesar de los homenajes, la sombra de Ayuso sigue siendo demasiado potente sobre la dirección del PP y el número dos de Casado, Teodoro García Egea, ha evitado confirmar si será la nueva presidenta del PP madrileña. Todavía está vivo el recuerdo de la pugna abierta entre Esperanza Aguirre y Mariano Rajoy.
El PSOE busca un chivo expiatorio
Sánchez reunirá este jueves a la ejecutiva federal para analizar una “clara derrota”, como ha admitido este miércoles la vicepresidenta primera del gobierno español, Carmen Calvo. Ferraz necesita maniobrar para intentar responder a los peores resultados del socialismo madrileño, comandado esta vez desde la Moncloa. A pesar de que el equipo de su candidato, Ángel Gabilondo, ha asegurado que recogería el acta del partido, el hecho es que diferentes cargos del PSOE ya le han enseñado la puerta de salida. Se busca un chivo expiatorio y el secretario de organización y ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ya ha apuntado que Gabilondo tiene que saber “tomar las decisiones” oportunas y que ya ha "cumplido su papel".