Illa sí o no: ¿hacia dónde se decanta la militancia de ERC?
En Lleida y Girona es donde han aflorado más voces contrarias al pacto en comparación con territorios como el Ebre o el Baix Llobregat
BarcelonaLa militancia de Esquerra tiene en sus manos decidir si lleva a Salvador Illa al Palau de la Generalitat o encamina al país a una repetición electoral. Y la idea de hacer presidente al líder socialista a cambio, principalmente, de conseguir una financiación que se acerca al concierto económico, divide la militancia. Quedó constatado en las asambleas territoriales que hizo el partido este martes donde afloraron las voces partidarias a avalar el pacto que la dirección de ERC firmó con el PSC y las contrarias. ¿Qué posición es mayoritaria? Nadie se atreve a cuantificarlo, pero sí hay territorios en los que, en las asambleas de las últimas horas, se ha hecho sentir más una posición que la otra: en Lleida y Girona se han visualizado más adeptos del no que en territorios como el Ebro, la Catalunya Central o el Baix Llobregat, según diversas fuentes consultadas por el ARA. Ahora bien, no son blogs graníticos, sino que el veredicto final lo marcarán los aproximadamente 8.700 militantes que están llamados a votar el viernes.
Antes de someter a consulta el acuerdo que ERC cerró con el PSC, la dirección de los republicanos ha querido recorrer el territorio para explicar todos los detalles del pacto e intentar convencer a la militancia ante la "desconfianza" que habían percibido de las bases respecto a los socialistas. Si hay un consenso entre los favorables y contrarios es que el acuerdo es bueno, que se ha llegado más lejos de lo que en un inicio incluso el propio partido se pensaba. Los cambios en el modelo de financiación en el que Catalunya debería pasar a recaudar todos los impuestos es un hito que los republicanos han defendido siempre y, especialmente, en los últimos meses, con la propuesta de financiación singular que puso sobre la mesa el presidente de la Generalidad, Pedro Aragonés.
Para quienes votarán que no el viernes, el problema no es tanto el contenido del acuerdo como la desconfianza instalada hacia los socialistas: consideran que ni el PSC ni el PSOE materializarán lo que han acordado y recuerdan el historial incumplimientos de los últimos años. "Son supuestos, no tenemos nada en firme", afirma un militante contrario al pacto. De hecho, recuerda que para materializar los cambios en el modelo de financiación no sólo depende del PSOE, sino que existen reticencias también entre los socios de investidura. "El problema es la fiabilidad, las garantías y tampoco tenemos fuerza para hacer cumplir ese pacto", afirma otra voz que votará en contra del pacto el viernes. ¿Prefieren ir a una repetición electoral? Creen que el panorama cambiará poco: "Pero al menos ERC habrá sido coherente".
Hay otro factor que influye en los contrarios al pacto: Salvador Illa no les gusta. Tampoco a los favorables, pero –a diferencia de los detractores– consideran que el acuerdo es lo suficientemente bueno y que ERC tiene la fuerza para hacer cumplir el documento de 25 páginas que suscribieron con socialistas. "Motivados no lo estamos, pero debemos actuar con responsabilidad y aprovechar las oportunidades", afirma una de las voces del territorio que votará a favor del acuerdo. "La nueva coyuntura política hace que el acuerdo permita dar pasos adelante", afirma otro dirigente territorial. Los defensores del acuerdo consideran que el hecho de que los votos de ERC sean decisivos en el Parlament y también en Madrid es una de las cuestiones que el partido puede hacer valer para hacer cumplir el acuerdo. La dirección republicana, además, también ha presentado a los verificadores internacionales como garantes del pacto, al igual que los socialistas.
Manifiesto de alcaldes
En paralelo, justo al día siguiente de las asambleas territoriales, los alcaldes de ERC han firmado un manifiesto favorable al sí. "Queremos apoyar la decisión que ha tomado la ejecutiva nacional. No porque el candidato del PSC sea de nuestro agrado ni de nuestra confianza política, sino porque se trata de un muy buen acuerdo y porque una repetición electoral sería muy negativa para el conjunto del país", dice el manifiesto, que está rubricado por una veintena de alcaldes, entre ellos el de Manresa, Marc Aloy; Aurora Carbonell, alcaldesa de Sitges; Marc Giribet, alcalde de San Andrés de la Barca; Alba Pijuan, alcaldesa de Tàrrega; Jordi Viñas, alcalde de Salt; Adam Tomàs, alcalde de Amposta; Isidre Pineda, alcalde de Caldes de Montbui; Jaume Oliveras, alcalde de El Masnou, o Marçal Ortuño, alcalde de Torelló.