El PSC y los 'comuns' ponen condiciones para negociar los presupuestos

BarcelonaLa decisión de la CUP de presentar una enmienda a la totalidad a los presupuestos y mantener la puerta abierta a seguir negociando no solo no ha cerrado ningún interrogante sobre las cuentas sino que ha abierto algunos nuevos. Y los potenciales socios alternativos ya han puesto las condiciones encima de la mesa. Mientras que el PSC afirma que su voto y el de la CUP "son incompatibles" y no se puede poner en marcha una negociación paralela con los dos, los comuns reclaman al Govern un asiento en la mesa de negociación "independientemente de lo que hagan los otros partidos".

La portavoz del PSC, Alícia Romero, ha dejado claro en rueda de prensa que se presentan como plan B e "incompatible" con la CUP y algunas exigencias de los antisistema, contrarios al proyecto del Hard Rock, el impulso de los Juegos Olímpicos de Invierno y el papel de los Mossos d'Esquadra en las actuaciones por desahucios. En cambio, los comuns no ponen como condición las negociaciones paralelas que pueda tener el Govern, e incluso ven con buenos ojos que hable con más de una "fuerza progresista". "Nos mantenemos en una enmienda a la totalidad condicionada a la posibilidad de que nos llame el Govern", ha dicho la líder de En Comú Podem, Jéssica Albiach, que ha advertido de que al descolgar el teléfono ya pondrán encima de la mesa su agenda.

A pesar de que la militancia de la CUP ha dado una oportunidad más al ejecutivo para seguir negociando y la diputada Eulàlia Reguant no ha descartado que se pueda retirar la enmienda si las conversaciones avanzan, para el PSC se ha "roto e invalidado" la mayoría de la investidura. Para Romero, la "responsabilidad" no es de la CUP, sino del Govern, que es quien tiene que sacar adelante la tramitación de los presupuestos. Así, el no de la CUP cuestiona, según su parecer, la credibilidad del president Pere Aragonès. "Apelamos al Govern para que sea responsable, deje de mercadear con la CUP y busque las mayorías necesarias", ha dicho la socialista. En este sentido, los socialistas han insistido en los puntos "mejorables" de los presupuestos, que a grandes rasgos Romero ha resumido en aspectos relacionados con la "reactivación económica y el estado del bienestar".

Albiach ha reclamado más inversión en el sector industrial y ha criticado que se destine "el triple de dinero al Hard Rock que a la industria, más inversión en carreteras que en trenes, que no haya un plan suficiente de salud mental" y que no se haya encontrado "ninguna partida para salud bucodental". Si bien están ante unos presupuestos "expansivos", ha puntualizado la dirigente del espacio, no son "transformadores": "En la balanza se impone el continuismo". Aún así, "mantienen las líneas abiertas". De momento, el Govern todavía no ha llamado ni a los comuns ni al PSC.

Cs oficializa la enmienda a la totalidad

Quien presentará una enmienda a la totalidad y no tiene ninguna voluntad de negociar es Cs. La suya, ha reivindicado el líder naranja, Carlos Carrizosa, "sí es una enmienda a la totalidad, y no un instrumento de negociación": "Nosotros no la retiraremos". Carrizosa ha criticado la "pelea entre la CUP y el PSC para decidir quién paga las fantas a Aragonès": "Si son unos presupuestos expansivos, lo son del Procés", ha asegurado. Después de quedarse solo la semana pasada pidiendo al PP y Vox su apoyo para llevar las cuentas al Consejo de Garantías Estatutarias, Carrizosa ha cargado, haciendo suyo el calificativo que Vox suele dirigir tanto al PP como Cs, contra la "derecha cobarde", y ha acusado a los dos partidos de tener reticencias a "defender las finanzas de los catalanes". Vox, a su vez, ha asegurado por boca de su portavoz, Joan Garriga, que prefieren "las cosas prácticas", como por ejemplo ir directamente al Tribunal Constitucional. Con todo, Garriga no ha concretado si han encontrado alguna partida de las cuentas susceptible de ser impugnada y, de momento, se ha limitado a pedir una rebaja de impuestos.