Podemos deja a Pedro Sánchez contra las cuerdas
Los lilas y Junts ponen condiciones duras para los presupuestos mientras en la Moncloa impactan los casos Ábalos y Errejón
Madrid / BarcelonaPedro Sánchez acababa una semana por olvidar y empieza otra con un nuevo golpe. Ya no son sólo los presuntos casos de corrupción que afectan a su ejecutivo, la investigación judicial a su mujer y las dificultades para hacer que Junts sea un aliado estable para la legislatura, sino que ahora también está en duda Podemos. El voto de sus cuatro diputados en los presupuestos generales del Estado se ha encarecido tras una consulta a la militancia en la que el 89,8% (34.417 personas) han aceptado poner condiciones que, de entrada, el gobierno español rechaza frontalmente: una es romper las relaciones comerciales y diplomáticas con Israel, con un embargo de armas incluido, y la segunda es bajar por ley el precio del alquiler en un 40% y prohibir la compra de una vivienda si no es para residirla hi. La crisis abierta en Sumar por el caso Errejón es el broche de oro delicado para el ejecutivo de Sánchez.
La semana pasada fuentes del gobierno español ya advertían de que esta petición de reducir drásticamente los alquileres no es viable, y coincidían con la comparecencia en el Congreso de la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, que anunció otras medidas como el blindaje perpetuo del parque de vivienda pública. Lo que transmitían desde el ministerio de Hacienda, el encargado de elaborar las cuentas, era la duda sobre si, llegados a la situación en la que los cuatro votos de Podemos resultaran imprescindibles para aprobar los presupuestos, la formación lila de verdad les haría caer. Ésta es la situación aritmética en la cámara baja: Juntos debe entrar en la ecuación y es el principal reto de la Moncloa, pero Podemos también, y en plena crisis en Sumar por el estallido del caso Errejón, los de Irene Montero y Ione Belarra intentan marcar perfil propio.
"Si el PSOE quiere los votos de Podemos, tendrá que aceptar estas dos condiciones", ha aseverado el coportavoz del partido, Pablo Fernández, en rueda de prensa. En cuanto a la exigencia relacionada con Israel, la ley española de comercio de armas no prevé la posibilidad de decretar un embargo –habría que ver si puede hacerse con un decreto–, pero de todos modos el PSOE ya comunicó la semana pasada que se han dado pasos, como detener la compra y la venta de material con ese país.
Las condiciones de Juntos
Al día siguiente del congreso, Juntos también ha puesto presión por los presupuestos. El vicepresidente del partido, Toni Castellà, ha asegurado en una entrevista en Catalunya Ràdio que el ejecutivo español debe hacer un "gesto contundente" hacia Catalunya, que implicaría condonar a una parte de la deuda del fondo de liquidez autonómico (FLA) o una empuje en la ejecución de las cuentas de ejercicios anteriores que debería alcanzar el 100%. "En materia de presupuestos es tan fácil o complejo como respetar el techo de gasto, que es repartirlo a tercios entre el ámbito municipal, Estado y comunidades autónomas. Y si hay un gesto contundente antes de ese debate respecto de la falta de ejecución de presupuestos, puede haber un acuerdo para tramitar presupuestos.
También se ha referido al secretario general de Junts, Jordi Turull, en RAC1, asegurando que si el PSOE quiere su apoyo deben cumplirse antes los compromisos de investidura anteriores. En este sentido, toma relevancia la ley para traspasar las competencias de inmigración a la Generalitat, que ha sido uno de los temas clave del congreso de Junts este fin de semana. Turull se mostró optimista con los trabajos sobre esta norma, aunque admitió resistencias sobre todo del ministerio del Interior. Juntos busca que el gobierno catalán tenga un papel a la hora de decidir los flujos migratorios o renovar el permiso de trabajo y residencia. Por ejemplo, en la ponencia aprobada por el cónclave de este fin de semana en Calella se establece que el conocimiento del catalán debería ser un "requisito" después de un tiempo "razonable" para renovar este tipo de certificados.
Tranquilidad en el PSOE
De momento el PSOE intenta mostrarse tranquilo respecto a la negociación a abrir. En rueda de prensa este lunes en Ferraz, la portavoz, Esther Peña, se mostró "convencida" de que las cuentas saldrán adelante. "Debemos respetar los tiempos. Cuando se abran las negociaciones se pondrán las pretensiones sobre la mesa. Lo hará Podemos, lo valoraremos y veremos los acuerdos a los que se pueda llegar", indicó Peña, quien ya avisó de que en estas conversaciones siempre existe alguna "pérdida" respecto a los planteamientos de máximos. En la misma línea se ha expresado preguntada por las negociaciones con Junts. "El PSOE es firme y cumple lo que firma", aseguró.
Aprovechando el momento delicado en la Moncloa, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha vuelto a pedir la dimisión de Pedro Sánchez agarrándose a una fotografía publicada este fin de semana en El Español en el que el empresario Víctor de Aldama habría estado supuestamente en la planta noble de Ferraz en el 2019. El PSOE ha contraatacado recuperando la fotografía "asquerosa", en palabras de Peña, de Feijóo con el narcotraficante Marcial Dorado en los años noventa en un yate. "En un partido serio esta fotografía te inhabilitaría políticamente", ha manifestado la portavoz socialista, que ha pedido a El Español que demuestre si verdaderamente Aldama ha estado en la sede del PSOE.