¿A quién votan los católicos (y ultracatólicos) en Cataluña?
Los votantes que se declaran practicantes se concentran en el PP, mientras que Vox tiene penetración también en otras ramas del cristianismo
BarcelonaPese al proceso de secularización vivido en las democracias occidentales, el movimiento de extrema derecha y conservador a nivel internacional ha vuelto a poner en primer plano la religión católica como una variable relevante en la batalla política. Y no precisamente están ganando ascendencia los movimientos practicantes más tolerantes, sino que cogen bastantes sectores ultracatólicos que hasta ahora estaban relegados. Sin ir más lejos, esta semana el Papa ha ordenado eliminar una rama de la Iglesia, Sodalicio de Vida Cristiana, con vínculos con el gobierno de Donald Trump, a través del vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance. Ahora bien, ¿cuáles son los datos en Cataluña y en el Estado? ¿Cómo son ya quiénes votan los católicos y ultracatólicos en Cataluña?
Si nos fijamos en los últimos datos del Barómetro del Centro de Estudios de Opinión en Catalunya, el 53,5% de los catalanes se declara católicos, aunque la mayoría se considera "social", es decir, no practicante. Sólo el 3,7% explica que su práctica religiosa es semanal y la mayoría son mujeres. Esto contrasta con los cristianos de otras ramas que han aumentado en los últimos años a raíz de la inmigración del este y latinoamericana, como los ortodoxos o los evangelistas, quienes declaran que, siendo una minoría en la sociedad (3,4%) practican de forma habitual hasta en un 25%. En cuanto al resto de actitudes hacia la religión, en Cataluña hay un 17,2% que se describen como agnósticos y un 20,5% ateos. Y en cuanto al islam, sólo un 1% se declara creyentes, aunque de éstos, un 46,7% asegura ser practicantes habituales.
Si bien la extrema derecha está creciendo entre los jóvenes, por ahora los datos no reflejan que se esté traduciendo en un aumento de la religiosidad. Un 61% de quienes se declaran practicantes tienen más de 64 años. Y, en cambio, los jóvenes (de 18 a 24) sólo son un 5,48%. Sin embargo, esta cifra contrasta entre los jóvenes de otras confesiones. En el caso del islam, el porcentaje más elevado se encuentra precisamente entre las franjas de edad más jóvenes, un 38,1%. También es más elevada la práctica de quienes tienen entre 18 y 24 años en otras ramas del cristianismo (17,9%).
El director del Centro de Estudios de Opinión, Joan Rodríguez Teruel, consultado por el ARA, explica que en Catalunya la religión tiene poca incidencia en la discusión política y también a la hora de decidir el voto, puesto que se ha vivido un profundo proceso de secularización. También en el Estado, donde nunca ha habido un partido democristiano fuerte como en Italia o Alemania. Según el último CIS, un 55,4% de los españoles se considera católico (un 18,8%, practicantes).
El perfil de los católicos en Cataluña
Ahora bien, Teruel dice también que los ultracatólicos en Catalunya tienen un perfil muy determinado. Son más de derechas y españolistas que la media de la sociedad. Si se cruzan los datos por intención de voto, los partidos en los que más pesan los católicos son el PP y Vox. En concreto, entre los que prefieren a Alejandro Fernández de presidente, hay un 12,5% que se declaran católicos duros y un 87,5%, católicos blandos. Entre los simpatizantes de Ignacio Garriga (Vox) destacan los católicos blandos (66,67%) y resalta también el peso, respecto al resto de líderes, de las otras ramas cristianas, como ortodoxas y evangelistas, que normalmente suelen ser más frecuentes en la práctica. A diferencia de la extrema derecha españolista, entre los que prefieren a Silvia Orriols de Aliança Catalana no hay un peso significativo de los ultracatólicos y se sitúa en la media de la población catalana en cuanto a católicos blandos.
Salvador Illa, de hecho, que ha hecho más fluidas las relaciones entre la iglesia y la Generalitat, cuenta con un 64,5% de los simpatizantes católicos, por encima de Carles Puigdemont (54,6%) y Oriol Junqueras (36,89%), aunque el peso que tienen los ultracatólicos entre los que tienen simpatía por el presidente de Esquerra es superior a la media catalana (4,92%). Sin embargo, el electorado favorable a Junqueras es diverso en términos de religiosidad, ya que también predominan los agnósticos (25,41%) y los ateos (28,69%). Esto encaja, apunta Teruel, con la dinámica tradicional: que entre los catalanistas de izquierdas han predominado las actitudes menos creyentes. En todo caso, entre los que prefieren a Puigdemont de líder, también pesan estas dos actitudes, en torno a un 20% en ambos casos.
Por lo que respecta al Estado, también los católicos y los ultracatólicos son los que tienen más peso entre los partidarios de Alberto Núñez Feijóo. Y se repite el fenómeno de Ignacio Garriga con Santiago Abascal: tienen un peso específico los votantes de otras ramas cristianas, como ortodoxos o evangelistas. En cualquier caso, la extrema derecha sí ha penetrado en los círculos ultracatólicos organizados. Un ejemplo es el vínculo de Vox con El Yunque, una secta mexicana ultracatólica e integrista, fundada en España en los setenta y que también está ligada al grupo de presión Hazte Oír. Según El País, el concejal de Vox en Barcelona Liberto Senderos es fundador.